En el año 2020, más de 250 mujeres de todas las condiciones sociales fueron asesinadas en Colombia. Hoy no nos acompañan en esta conmemoración del Día Internacional de la Mujer. Y lo más grave para esta sociedad es que el 93 por ciento de esos casos siguen en la impunidad.
Entre enero y febrero de este año, 2021, han sido asesinadas 16 mujeres en Bogotá. El crimen de 9 de cada 10 mujeres sigue sin castigo, sin culpable, todos los asesinos gozan de libertad. La mayoría de todos estos asesinatos los cometieron la pareja o expareja, el padre de los hijos, el supuesto amor de su vida.
Hace un año estaba entre nosotros maría de los Ángeles Trejos, la mató su marido; Gladys Rodríguez fue lanzada por su compañero del piso 17 de un edificio; Ana María Castro fue arrojada desde un vehículo en marcha, y hoy su muerte sigue en el completo misterio.
Keyla Morales, de 33 años; luz Helena Ortiz, de 38; Juliet Patricia González, de 27; Lina Marcela Beltrán, de 30. La lista sigue interminable, solo en el año 2020.
Y a ellos hay que sumarle casos como el de la porrista del equipo de Millonarios, una de las más antiguas, la más lejana a estas fechas recientes, Luisa Fernanda Ovalle. Hace seis años le quitaron la vida y hoy no hay responsable, todo es confuso.
A Luz Esmilda Beltrán, de 48 años, un disparo le quitó la vida; su expareja tenía restricción para que no se le acercara, pero no importó, la asesinó.
Ana Mercedes Rivas, de 38; Sandra Patricia Martínez, de 28; Janet Aponte, de 45; Luz Amparo García, de 55.
Durante el aislamiento de la época de la pandemia la línea púrpura que atiende las quejas de las mujeres amenazadas o en riesgo recibió más de 15 mil llamadas. El aumento de los reportes de violencia fue del 230 por ciento, es decir, que el sitio más inseguro para las mujeres, el más peligroso, el más tendencioso, el más oscuro, el menos seguro es la casa.
Las casas refugio, la ruta de la mujer, los teléfonos de emergencia, la asistencia de la Secretaría de la Mujer y las órdenes de aislamiento, infortunadamente, al día de hoy, no han podido parar el genocidio contra la mujer.