No vuelvas.
No vengas a hacerme daño.
No vengas a robarme la paz.
No vengas por mi seguridad.
No vengas, falsa esperanza.
No vengas a demostrarme lo que ya no se mostró.
Mi corazón está bien, está feliz.
No importa cuántas veces lloró o cuántas veces tembló por ti.
Hoy mi corazón está bien.
Está mejor sin ti.