Para ser bien directo, así como le pasa a la navidad, la semana santa es una celebración desgastada. Esa época del rezo, camándula, andar pasito y comer de aquello poquito en la acción sencillamente traduce ocho días (y más, según el descaro) de locha, playa, algo de pocholita y sexo santificado.
Lo que se haga en esta época es cuestión de cada quién y en eso no me entrometo. Lo que sí me parece curioso es el cambio de percepción frente a la práctica de un culto determinado, digamos el católico. Si bien somos un país mayoritariamente devoto, el pretexto de salir de viaje para reencontrarnos con nosotros mismos termina por algún motivo enredado con las ganas de escapar de los problemas a como dé lugar. ¿Cuál veladora, palma o película de Jesús de Nazaret? Eso no repone mis creencias ni resuelve las cuentas por pagar.
Y pongo más el dedo en la llaga al revisar la imagen del catolicismo, el cual parece dar un paso atrás con esa promulgación de los nuevos pecados capitales. Su discurso aparece más monótono e intransigente. Una vuelta a lo mismo.
En mi caso, yo no renuevo mis votos por la práctica católica. Sin desconocer el misticismo o la majestuosidad que suele darse al conjunto de sus actividades, pienso que cualquier momento es oportuno para buscar esa reflexión que permita el no embarrarla más en esta vida o saberla arreglar cuando sea necesario.
Unos dirán que hay festival de teatro, cine y actividades culturales por docenas que pueden paliar esa necesidad de catarsis espiritual. Pero no nos digamos mentiras, siempre buscamos aferrarnos a algo que nos obligue a repensarnos y cargar las baterías.
Por eso, en este post busco asaltarlos en su buena fe y preguntar a los católicos practicantes si no sienten ese peso de la costumbre de ir a los monumentos, la subida a Monserrate, la mala programación de los canales, los jueves y viernes santos más grises que de costumbre. Para los que practican otra religión, ¿sienten que esta semana santa pierde aún más su enfoque? Y para los nuevos agnósticos ¿cómo hacen para agotar estos ocho días de relajo santo?
BOCADILLO: Pues valga la propaganda, la próxima semana estrena imagen una vieja amiga mía. Espero la visiten en www.redcamaleon.com