“Seducir con la frialdad de quien solo va a la cama para despertarse con su soledad” ¿Les gusta? Puede sonar lúgubre pero se me ocurrió justo en el momento de pensar cómo abrir uno de los meses comercialmente más populares después de la navidad: amor y amistad. Para los que me han seguido últimamente estoy en la etapa más enconadamente antiromántica y anticursí de mi corta vida, por lo que me solazaré en ella durante las próximas actualizaciones.
¿Cómo? Pues claro, la vida de un separado, un ex acompañado de cualquier sustantivo, una supuesta nueva soltería. Llevo 23 días en ese plan reflexionando en el significado de terminar una relación para comenzar con lo que sea. ¿Siempre es así? Desde luego que no.
Durante las primeras semanas, incluso meses, uno oye el requetemanido consejo de “espere que ya viene el amor de su vida”, una tonadilla con sabor a excelente consejo pero con el paso del tiempo provoca vómito… En todo caso, volver al ruedo es asunto de tiempo.
¿Y qué hacer con ese tiempo? Bueno, tenga en cuenta que no es fácil retomar las viejas costumbres (si las tuvo) por andar al c… de su pareja. Así que esa es la principal prioridad. La vida no se detuvo en esos tres meses, dos años o más en los que estuvo absorbido.
De otra parte analice muy bien que tan importante es para usted comprometerse. Para mí ya no es la panacea, pero para otros lectores ha de ser una esperanza alimentada desde sus tiernas infancias. El punto es reflexionar si realmente no puede estar solo y exige una relación que le de sentido a su existencia Por mi parte yo les diría que no se preocupen por ir tras de una y otra y otra oportunidad: nada será tan completo como se desea.
También hay que mencionar que algunas de estas preguntas son de fácil resolución para personas que hemos vivido relaciones efímeras. Las respuestas para aquellos que se divorciaron y además dejaron hijos no las tienen al final del libro, como el álgebra de Baldor. En esos casos, por lo que he visto, aún se lleva al ex como lastre (cuando fue una completa porquería) o siempre surge la tentación de volver (pero porque no hubo nada más en el bosque a donde salió cuando abandonó la casa) No más piense en verle la cara durante los trámites de la separación, pedirle plata para los muchachos o aguantarse los reclamos de estos últimos por no haber hecho lo suficiente para mantenerse unida a su pareja, como se prometieron hace ya un buen tiempo.
En esas circunstancias, ¿alguien querría involucrarse con usted, con perspectivas de ‘para toda la vida’? NO. Mejor diviértase un tiempo, gócese su familia…posee valiosos motivos para enfrentar ese receso en la circulación. Usted también tiene una vida, el sacrificio o la abstinencia se ven bien en los diccionarios. Creo que mientras más ser humano parezca ante sus hijos, más lo apreciarán.
Finalmente queda el asunto de la verdad. Si es tan radical y contemporáneo como para decir lo que pasó pasó, piense otra vez. No resulta tan cierto cuando usted sale con alguien y le hace creer que su pasado no interferirá, mientras al tiempo la ex le timbra al celular, o se la encuentra por la calle y tan solo verla le daña el rato con su cita. O viceversa (pues cabe cuestionarse si uno estaría muy cómodo al sentar en su casa a una probable pareja con el pasado aún en el apartado de llamadas recibidas de su celular)
No deseo extenderme porque sé que ustedes compartirán más opiniones. Para los que me leen ¿qué tan llevadera ha sido la vida tras una separación? ¿Cómo les ha ido en los intentos siguientes? ¿Han entendido su posición o lo dejaron viendo un chispero?