Hablar de la película Dedicada a mi Ex, dirigida por el ecuatoriano Jorge Ulloa, implica vincularla indefectiblemente con sus orígenes, específicamente con el proyecto audiovisual del mismo país llamado Enchufe TV. Nos encontramos frente al más loable resultado de ocho años de trabajo que iniciaron con su debut en YouTube en noviembre de 2011 y la fundación de la empresa Touché Films, que vinculó en un principio a Ulloa con Christian Moya, Leonardo Robalino y Martín Domínguez, todos ellos con sólidas bases en producción audiovisual.
Si mantienen fresco el recuerdo de los sketches de ‘Chichico’, interpretado por Raúl Santana, o el exitoso y controvertido falso trailer de una película inspirada en los personajes del Chavo del Ocho llamado El Chico del Barril, entonces ya pueden hacerse una idea del impacto de esta iniciativa, que hoy en día supera los 21 millones de suscriptores en su canal de YouTube.
En esa medida, Dedicada a Mi Ex es un regalo para los seguidores de los ‘enchufeliebers’, al mantener presente la marca de la casa: el protagónico de Santana, la compañía de Nataly Valencia (otra asidua actriz y colaboradora del canal), el humor de clara influencia inglesa y la línea visual de su puesta en escena, con abundancia de color y luminosidad.
¿Entonces es un largo sketch del canal en formato cinematográfico? Dedicada a mi Ex traza un límite en cuanto a lo que es el estilo reconocible de Enchufe TV para explorar las posibilidades que les permite moldear una historia de (des)amor con fuertes raíces ochenteras. Y al final cumple su promesa de divertir con las ocurrencias de Ariel, un joven nerd que emprende la odisea de triunfar en un concurso musical con el objetivo de recuperar a su antigua novia, para lo cual conforma una banda donde cada integrante resulta tan extravagante como él. Una pandilla antisistema con todo en contra para alcanzar el éxito.
Pero el mérito más interesante de Dedicada a Mi Ex es convertirse en testamento de la era del ‘youtuber’ y el meme, absolutos protagonistas de esta segunda década del nuevo milenio. Cada cameo donde aparecen, brevemente, algunos de los exponentes más populares de nuestro tiempo (Werevertumorro, Luisito Comunica, Kika Nieto, entre otros) confirma sin ambigüedades su herencia digital, misma que cuestiona con el retrato de la obsesión de marcas y patrocinadores por los likes, las reproducciones y los ídolos portavoces de una generación narcotizada por la gloria efímera.
Con el apoyo de la empresa colombiana Dynamo Producciones y la participación de un elenco multiestelar latinoamericano en el que destacan Mariana Treviño (México), Carlos Alcántara (Perú) y Biasinni Segura (Colombia), Dedicada a Mi Ex es la cúspide de una pasión y dedicación continuas por llevar lo más lejos posible una iniciativa que he seguido desde sus primeros videos, ahora convertida en evidencia del potencial de la industria creativa de origen digital, sin el vicio del personalismo mediático de algunas de sus “figuras” más representativas, para centrarse en desarrollar contenidos que hablen por sí solos del talento que poseen para conquistar al público con sus historias en nuevas plataformas. Dedicada a Mi Ex se estrenará mañana 7 de noviembre en los cines nacionales.
Durante su primera presentación a los medios colombianos tuve la oportunidad de conversar con Biassini Segura, actor bogotano que interpreta a Ortega en esta película. Desde su debut en la pantalla chica con la telenovela El Último Matrimonio Feliz en 2009, Segura ha participado en más de 18 producciones nacionales e internacionales y asume el divertido reto de encarnar al bonachón y lengüilargo amigo del protagonista, para lo cual aprovechó su formación como artista de la técnica clown en la capital colombiana. En este clip para Radio Distractor nos comparte sus impresiones sobre su participación en Dedicada a Mi Ex y el estado actual de la creación de contenidos humorísticos en nuestro país.
His Dark Materials: otro testamento de HBO
La batalla del streaming no da tregua ni descanso, especialmente si se trata de consolidar propuestas que atraigan a nuevos públicos. HBO se echa a los hombros la responsabilidad de brindar una experiencia dramática que hable principalmente a la generación que apenas descubre en la literatura fantástica una fuente inagotable de aventuras, reflexiones y personajes con los cuales identificarse. Sí, puede ser la misma generación casada con Harry Potter o El Señor de los Anillos (que ya inició la producción de su adaptación como serie), pero —afortunadamente— el universo es más amplio. De esa manera el desafío de recuperar la trilogía del autor inglés Phillip Pullman, conocida como La Materia Oscura, cuyo primer tomo se publicó en 1995, y hacer olvidar la fallida adaptación cinematográfica del 2007 dirigida por Chris Weitz, establecen a His Dark Materials como el must see de la temporada venidera.
Desde luego, a la luz de hoy la trama se nos hace muy familiar: héroe o heroína huérfanos, encaminados a cumplir un apabullante destino, con formidables padrinos y terribles enemigos. El encanto de esta adaptación, construida en asocio con la BBC, es hacer creíble las circunstancias que rodean el papel de Lyra (Dafne Keen) como poseedora de un conocimiento invaluable que será determinante para vencer las fuerzas oscuras que luchan por controlar un mundo donde el alma de los niños se manifiesta en lo que se llama un ‘Daimonion’, que cambia de forma y lleva el sexo contrario a la del ser que acompañan. Las conspiraciones están a la orden del día: hay un misterio alrededor de unas partículas llamadas ‘Polvo’ que una organización llamada ‘El Magisterio’ desea mantener ocultas a costa de lo que sea. Pero el valor de Lord Asriel, tío de Lyra, y la determinación de ésta por viajar al Norte para dar con el paradero de su mejor amigo, Roger, mantienen el interés por la trama, a la vez de explayarse con calma en detalles de los libros que se obviaron de la película.
La producción se reserva para más adelante la aparición de Lin-Manuel Miranda, admirador de la obra de Pullman, pero lo cierto es que las actuaciones de James McAvoy como Lord Asriel y Ruth Wilson como la benefactora Marisa Coulter llenan la pantalla en el mismo tono y ritmo exigido por una trama llena de aventuras. La puesta en escena aprovecha al máximo los paisajes ingleses para introducirnos en el ambiente del Jordan College o el de la comunidad de los ‘gytpians’ y es allí donde His Dark Materials empieza a desligarse de la sombra potteriana para enseñarnos un mundo adulto que sobrevive en medio de una lógica fantástica que unos respetan y otros quieren entorpecer. Con esos valores aún queda por ver si le alcanza para ganarse a la audiencia, consolidarse como un suceso y llegar a los niveles de culto de otras series de la casa como Game of Thrones. His Dark Materials se puede ver cada lunes por la noche en HBO y en diferido por su plataforma HBO GO.
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