Estos cinco días de negociaciones climáticas durante la COP20 han sido complejas. Algunos países están más abiertos a escuchar e inclusive modificar ciertos parámetros y otros se encuentran completamente reacios a ello. Puedo decir que hasta ahora, las negociaciones han sido “normales” desde el punto de vista de convergencia entre propuestas, discusiones, proyectos e ideas sobre la mesa; sin embargo, a una semana se haber iniciado formalmente la conferencia, no hay mucho adelanto en varios temas de interés global.
Temas como la adaptación, la mitigación y el financiamiento son actualmente el centro de las discusiones entre las naciones y grupos del mundo. Países en vías de desarrollo se centran a buscar las alternativas para asegurar la adaptación al cambio climático y por ello, el día de ayer, los Países Menos Desarrollados (LDC en inglés), pidieron a la COP20 la asignación de 5.000 millones de dólares para ejercer Planes de Adaptación Nacional en áreas de interés como agricultura, riesgos, gestión de agua y zonas costeras, manejo de recursos naturales, educación y equidad de género (lo cual es un avance en las discusiones sobre adaptación).
El IPCC lo ha reiterado innumerables veces: la adaptación es esencial para nuestra sobrevivencia y para dejarle a las generaciones futuras un planeta con oportunidades. Para el IPCC, preparar planes de adaptación es vital para afrontar las consecuencias del cambio climático y contribuir con una modificación del paradigma económico y político del mundo.
El día de hoy, la UNEP (Programa de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático) ha hecho público un documento sobre adaptación y financiamiento llamado: “Adaptation Gap Report”, el cual estima que los costos globales de adaptación se duplicaran o triplicaran de acuerdo con las estimaciones hechas con anterioridad.
Keith Alverson (Coordinador del PNUMA), enfatizo que las naciones en vías de desarrollo tienen mayor necesidad de adaptarse a los cambios del clima, por lo cual deben hacer mayores esfuerzos para cerrar la brecha lo más pronto posible.
Reiteró que los tres puntos prioritarios del reporte son: financiamiento, tecnologías y conocimiento y destaco que ningún plan de desarrollo nacional o regional puede darse el lujo de hacer caso omiso al cambio climático.
Por su parte, Christiana Figueres (Secretaria Ejecutiva de la UNCCC), destaco que estamos viviendo una realidad completamente diferente y nueva y que ningún país del mundo se puede dar el lujo de hacer planeación sin incorporar el tema climático.
Esperemos que los días siguientes de negociaciones climáticas, tengamos positivas respuestas sobre nuevos planes de financiamiento en adaptación orientado a países en vías de desarrollo y que al finalizar la COP20, cada uno de los países se comprometan a hacer formalizar los acuerdos y adaptar sus ciudades y naciones.