El próximo miércoles comienza La Vuelta del Porvenir, la carrera que se encarga de reunir a los mejores ciclistas de todas las regiones del país, en proporciones, la vuelta a Colombia para la categoría juvenil. Desde 1985 hace parte del calendario nacional, y muchos de los que han participado en ella, han llegado al máximo nivel del ciclismo mundial, por ejemplo: el doble campeón de esta carrera, Rigoberto Urán en 2004 y 2005; o Nairo Quintana, tercero en el 2008. Aunque muchos otros de los que alguna vez fueron figuras en esta carrera por diferentes razones no tuvieron el mismo destino que los ejemplos anteriores, sin duda, es un paso fundamental en la carrera de un ciclista en formación de este país.

Este año Montería y sus planas carreteras serán anfitriones de este evento en su edición número 34, con 5 etapas: tres etapas en línea de 127, 91 y 122 kilómetros, respectivamente; una contrarreloj de 13 kilómetros y un circuito final que sumará 84 kilómetros.

Hoy escribo desde la perspectiva del joven ciclista que hizo todo el proceso de clasificación para obtener un cupo de los 180, aproximadamente, que se repartieron en todo el país; proceso que para nada fue sencillo, que me hizo dar cuenta del nivel de ciclismo que hay en Colombia, de primera mano. Toda la travesía de buscar patrocinadores para poder asistir, y entender lo fundamental del apoyo de la familia, que al final terminan siendo los patrocinadores de la mayoría de los ciclistas que este año corren La Vuelta.

Estos años de juvenil son el punto más crítico en el proceso de todos los ciclistas en formación, irónicamente es donde el apoyo es más escaso, es por eso que a través de este blog voy a compartir las experiencias diarias de esta etapa de mi proceso, así como lo hice en La Vuelta del Futuro del año pasado, donde fue mi primer contacto con carreras de tal nivel.

Emoción a un par de días de poder estar en la carretera, por sentir la adrenalina de portar un dorsal, aprendiendo, llenándome de experiencias, convirtiéndome en cada kilómetro un poco más profesional. Además de poder ser la ventana de estas carreras, donde se crean los campeones del futuro y donde tengo fe de que ese apoyo que ahora es ausente en esta etapa de los procesos, con iniciativas así, empiece a aparecer un poco más.

El otro día recordaba cuando fui como espectador y blogger a La Vuelta del Porvenir 2015, para ese momento yo tenía 14 años y la idea de poder llegar a estar parado en esa línea de partida, donde sonaban nombres como Iván Sosa, Javier Montoya, Julián Cardona, me parecía casi inalcanzable, hoy tres años después se vuelve realidad, para darme cuenta de que los objetivos y las metas están para alcanzarlas, por difíciles que parezcan.

¡Espero contar con su apoyo!

@BorrasNicolas