Sin duda, la pregunta más popular en estos días es “¿ya te vacunaste?”, haciendo referencia a la propuesta de inmunización contra el virus de Wuhan/covid-19/SARS-CoV-2. ¿Tú ya la consideraste? ¡Yo, sí!

Me he dado cuenta que solamente se presenta una franja reducida de información en los principales medios de comunicación. Esto es una lástima, porque es muy difícil tomar una buena decisión a largo plazo si solo se tiene un porcentaje pequeño de la información necesaria. Por esta razón, busqué datos confiables y más amplios en medios complementarios acerca del tema. Los resultados de mi investigación, que se pueden verificar fácilmente con las referencias a pie de página, me ayudaron a llegar a una conclusión, y los quiero compartir; tal vez sean útiles para tí de alguna manera.

De antemano quiero aclarar: hay diferentes perspectivas acerca del virus en general y de la vacuna en particular. Seguramente tú tienes una u otra posición al respecto, y no estoy expresando de ninguna manera desprecio ni condenación hacia ti. No busco generar brechas, sino incentivar la reflexión crítica y comprensiva. A propósito, estas razones se limitan al ámbito médico. Ciertamente hay otras consideraciones filosóficas y de cosmovisión, las cuales no están contempladas en este artículo.

  1. Al investigar por qué hay una insistencia arrolladora en muchos medios para movilizar a la gente a vacunarse lo más pronto posible, encontré el hecho de que ésta llamada “vacuna” no ha sido aprobada de forma oficial, sino que solamente recibió una “autorización para uso de emergencia” [1]. ¡No hay vacuna aprobada contra el virus de Wuhan/covid-19!. Esto significa que está en un estado investigativo o experimental, y al menos debería llamarse “vacuna experimental”, para reflejar esta realidad. Pero este no es un nombre bonito que anime a las personas a recibir este tipo de tratamiento experimental.[2]

No se han realizado las pruebas a mediano y largo plazo, como suelen hacerse antes de aprobar una vacuna. Este agente biológico comenzó a ser desarrollado apenas el 30 de marzo del 2020 en Estados Unidos[3] y fue autorizado para su uso de emergencia el 11 de diciembre del 2020[4]. ¡Ocho meses y medio! A pesar de esto, muchos medios llaman a esta “vacuna experimental” una vacuna segura, ¿Será cierto?.

De hecho, en la historia médica, la vacuna que en menor tiempo fue aprobada, fue de “paperas”, en 4 años de desarrollo (teniendo la ventaja de poder referenciar trabajos anteriores para el desarrollo de una vacuna contra paperas, de 15 años).[5] Personalmente, no me animo a ser parte de un experimento médico gigantesco.

  1. Las empresas farmacéuticas están exentas de toda responsabilidad civil referente a esta “vacuna experimental» (y otras vacunas) en Estados Unidos. Astrazeneca (empresa farmacéutica global) solicitó esta misma exención de responsabilidad civil en Europa para su “vacuna” contra el covid-19. Encuentro muy cuestionable usar cualquier producto del cual sus fabricantes no toman ningún tipo de responsabilidad civil.
  2. Es una generación y tecnología nueva de “vacunas”. En particular, las vacunas de Pfizer-BioNTech y Moderna utilizan una tecnología mediante la cual, parte del ARN (material genético del virus) es pasado por las paredes de la célula humana e introducido al interior de la misma. Esto nunca antes en la historia se ha hecho. ¿No debería haber estudios a mediano y largo plazo, con mucha más razón, para determinar si esta tecnología nueva tiene contraindicaciones y efectos secundarios? Pero no las hay. Perdón, corrijo: Se están realizando actualmente: con toda persona que está recibiendo esta “vacuna experimental”. ¿No sería mejor esperar unos años para ver resultados de estudios serios, como se hacía en el pasado?
  3. Para todo tratamiento médico hay que evaluar el beneficio y riesgo. Así que, ¿cuál es el riesgo del covid-19, según el CDC (Center of Disease Control-Centro del Control de Enfermedades) de Estados Unidos? Varía según el grupo de edad. Para personas entre los 20 y 49 años, el índice de mortalidad es 0.02% (2 personas en 10.000), y para personas de 0 a 19 años, es 0.003% (3 personas en 100.000).[6]Para personas mayores aumenta, así como para personas con comorbilidades. Estos números son considerados sin tratamiento médico, el cual se ha mostrado muy efectivo cuando ha sido oportuno y apropiado. Con un buen tratamiento médico el riesgo baja considerablemente.

Para los niños, el covid-19 es mucho menos letal que la influenza (gripa).[7] Yo nunca me vacuné contra la gripa, así que tampoco pienso vacunarme contra el covid-19.

  1. ¡Una persona “vacunada” puede contraer el Covid-19![8] Así que no se detiene el virus con la “vacuna”. ¡No hay prueba que la vacuna experimental detiene la transmisión del virus! Entonces, una persona no-vacunada, no representa un mayor riesgo para otros que la persona vacunada.
  2. Dios nos dio un diseño maravilloso contra las enfermedades: El sistema inmunológico. Mi perspectiva es concentrarme más en fortalecer mi sistema inmunológico a través de alimentación sana, suficiente hidratación, bajar el estrés, dormir suficiente y hacer ejercicio.

Una pregunta final. Si esta “vacuna experimental” es supuestamente para nuestro beneficio, ¿porque hay tanta insistencia y hasta presión de recibirla? ¿No debería ser la decisión libre y voluntaria de cada ciudadano? ¿Por qué restringir los derechos de las personas no vacunadas, como el acceso a ciertos lugares públicos o aún, el poder volver a su lugar de trabajo en algunas naciones?[9]

Sin duda, hay más aspectos médicos y científicos al respecto, que no he tratado aquí. Si quieres investigar mas a fondo, te recomiendo un articulo muy completo de “American Frontline Doctors-Whitepaper»: https://planetmacneil.org/Documents/Content/SMDwhitepaper.pdf, y https://www.deconstructingconventional.com/post/18-reason-i-won-t-be-getting-a-covid-vaccine?mc_cid=904177ac41&mc_eid=db63777076, de Christian Elliot, del 19 de abril.

Estoy consciente que algunas voces en los medios de comunicación han criticado a este grupo de médicos y su “Whitepaper”, pero “American Frontline Doctors” ha entregado muchas referencias y citan obras que los medios de comunicación generalmente nunca mencionan. Así que vale la pena informarse y formar una propia opinión.

No le estoy diciendo a nadie lo que tiene que hacer o lo que no tiene que hacer. Si se debe vacunar o no. Estoy simplemente compartiendo una información que normalmente no escucharás, pero que es cierta; y será esencial para tomar una decisión adecuada acerca de esta “vacuna”.

Finalmente, quiero decir: toda decisión debe ser basada en la verdad. La verdad es una persona: Jesús (Jn. 14:6). Por medio de una relación personal con La Verdad (Jesús) y su Palabra llegaremos a una decisión que le agradará a Él.

Por: Florian Pistulka

 

[1] https://www.fda.gov/vaccines-blood-biologics/vaccines/emergency-use-authorization-vaccines-explained

[2] https://planetmacneil.org/Documents/Content/SMDwhitepaper.pdf, pg. 2 y 16

[3] https://www.biospace.com/article/a-timeline-of-covid-19-vaccine-development/

[4] https://www.fda.gov/news-events/press-announcements/fda-takes-key-action-fight-against-covid-19-issuing-emergency-use-authorization-first-covid-19

[5] https://en.wikipedia.org/wiki/Mumps_vaccine

[6] https://www.cdc.gov/coronavirus/2019-ncov/hcp/planning-scenarios.html,

https://planetmacneil.org/Documents/Content/SMDwhitepaper.pdf, pg 10

[7] https://amp.statesman.com/amp/113718780

[8] https://www.cdc.gov/coronavirus/2019-ncov/vaccines/effectiveness/why-measure-effectiveness/breakthrough-cases.html,

[9] https://www.nytimes.com/2021/02/18/world/middleeast/israel-covid-vaccine-reopen.html, https://www.reuters.com/world/us/exclusive-us-developing-plan-require-foreign-visitors-be-vaccinated-official-2021-08-04/