¿Hasta dónde es capaz de llegar una madre para encontrar a su hijo?

¿Cuáles son las consecuencias de disparar al vacío?

¿Los derechos legales de un homosexual son exactamente iguales a los de un heterosexual?

Estas tres preguntas podrían no tener nada en común, a menos que estemos hablando de los ‘claquetazos’ de este mes. En ese caso, sí. Aquí van.

1. Babel – Alejandro Iñárritu (2006)

Dos niños marroquíes, por encargo de su padre, salen armados con un rifle a cazar cabras. Sin conocer el alcance de las balas, disparan a un autobús en movimiento. Desde ese instante, la vida de cuatro grupos de personas, en cuatro países diferentes, entra en conflicto. Babel es lo que podríamos llamar una ‘película coral’.

Es una historia que deja ver las diferencias culturales y también generacionales de sus personajes. Lo interesante de este filme es que, los relatos se van entrelazando poco a poco y no son predictivos, incluso nos impiden ser hipotéticos como espectadores (cosa que nos encanta). Con una producción, un elenco (en especial Brad Pitt y Rinko Kikuchi) y un tratado de la imagen impecables, Iñárritu logra una cinta consistente que lo único nocivo que llega a tener, es un ritmo demasiado pausado en algunas partes, pero si la vemos en conjunto, eso desvanece. En tiempos cargados de pesimismo, como estos, Babel es un retrato poderoso del ser humano y de una sociedad que parece envenenarse cada día para resucitar al día siguiente, un poco más muerta que el día anterior.

9 claquetazos de 10.

2. The Changeling – Clint Eastwood (2008)

Clint Eastwood, a mi parecer, difícilmente falla (si es que el cine es de ‘acertar’). Christine Collins (Angelina Jolie) es una madre soltera cuyo hijo desaparece sin dejar rastro alguno. Unos días después, la policía le comunica que lo han encontrado, pero al verlo, Christine asegura que ese es otro niño. De ahí en adelante, la película se convierte en una lucha de palabras y hechos, cortes y testigos, investigaciones, desespero, misoginia, injusticias y uno que otro diagnóstico de locura.

Pareciera que las 2 horas y 20 minutos que dura la película no le alcanzan, se siente corta, y eso habla muy bien de la dirección. Angelina Jolie, en el que podría asegurar, el mejor papel de su carrera. Mutable, sensible y sobre todo creíble. Basada en una historia real, The Changeling es un viaje por el drama, que recorre en el camino el terror y el suspenso, para terminar, podría decirse, en un thriller psicológico. La historia se convierte en un mundo, que a su vez sumerge sin excepción a cualquiera que quiera entrar en él. De repente sabemos qué pasa, o tal vez no.

9 claquetazos de 10.

3. Freeheld – Peter Sollett (2015)

Basada en la historia real de Laurel Hester y Stacie Andrée, Freeheld es un canto al amor y a la justicia sin pretextos. Laurel (Julianne Moore) es una policía de Nueva Jersey a quien le diagnostican un cáncer terminal, al recibir la noticia intenta dejar toda la pensión ganada durante sus años de servicio, a su pareja Stacie (Ellen Page), pero la imposibilidad de verlas como iguales, crea una conspiración por parte de los funcionarios del condado para impedírselo.

Julianne Moore y Ellen Page tienen una química exquisita, que place ver. La historia tinta de reivindicación sociopolítica todo el escenario, y eso se engrandece, en especial en tiempos de tanto odio. Los personajes son amados, desde su individualidad y como un conjunto, pero debo confesar que en ocasiones se tiñe de escenas un tanto ‘romanticonas’. Recae, quizás, en la melancolía y los complejos de inferioridad, pero tratándose de una adaptación desde la realidad misma, es muy respetable. Sin embargo, contra todos esos precedentes, y siguiendo un tema en extremo necesario: es bella. Y sí, a mí, me llega al corazón.

7.5 claquetazos de 10