¿No les pasa que cada vez que se van un tiempo de casa buscan alguna manera de transportarse a ella? Me está pasando.
Ahora que vivo en Bogotá entiendo perfectamente por qué mis familiares y amigos, cuando yo vivía en la costa, me pedían que les trajera tres libras de queso, cuatros codos de butifarra y hasta chuzo desgranado… No les quiero comentar el olor que mi maleta desprendía luego del viajecito a la capital.
Así que yo, como buena casi costeña -y básicamente como cualquier persona que extraña su hogar- decidí buscar cinco lugares de comida que, con un solo bocado, pudieran transportar a los costeños a su ciudad natal. Porque, ajá, no estaría mal tener un poquito de la costa en las calles de Bogotá.
Para que el asunto tomara seriedad y no se dudara de la credibilidad del buen sabor de los lugares, tres costeños y una cachaca me acompañaron en el doloroso y difícil desafío de degustar algunos de los sabores de estos restaurantes. Cabe aclarar que la cachaca no estaba en la lista de invitados, pero le fue imposible abstenerse de probar los platillos.
Amigo cachaco, esta lista también le servirá a usted para encontrar una buena comida en Bogotá.
Angélica Carroll Acuña, dueña del local y quien fue reina cívica del Carnaval de Barranquilla en el año 2002, transmite el sabor de esta festividad a través de platos tan costeños como la arepa e’ huevo, la carimañola y los jugos de zapote y corozo, hechos con frutas traídas directamente de Sabanagrande, Atlántico.
Los visitantes del lugar son generalmente cachacos que, después de una rutina de ejercicio en el gimnasio de la cuadra, deciden recargar energías con un típico frito costeño.
Dirección: Calle 63 # 7-78
Chambakú
El restaurante tiene una tradición que se remonta a 1998 y exalta los sabores de Montería, pues todos los ingredientes con los que son elaborados los platos son traídos de este lugar.
La consistencia del mote de queso y la perfecta cocción de la posta cartagenera nos hicieron confirmar que este es el lugar ideal para probar el verdadero sabor costeño. Si decide visitar el restaurante no olvide pedir un jugo de guayaba agria, su sabor le recordará esos olores frutales que solo la brisa caribeña puede dar.
Dirección: Calle 63 #7-64
Donde Chucho
El lema que acompaña este restaurante es: “Si vas a Santa Marta y no has ido a donde Chuco, no has ido a Santa Marta”. Así que amigo cachaco, si usted no conoce la tierrita de Carlos Vives, venga a este lugar para que “meta mono” (presuma algo que no es cierto).
Los platillos de Donde Chucho llevan deleitando por más de 20 años a comensales de Barranquilla, Santa Marta y Bogotá. La frescura de sus mariscos hizo recordar a los invitados a esos días de playa en el Rodadero.
Dirección: Calle 84 No. 13-43
Donde Pele
Los ingredientes de Donde Pele son traídos de la Jagua, César. Y es que solo un verdadero queso costeño logra que cachacos y costeños se maravillen ante un buen chuzo desgranado, una comida rápida muy característica del caribe colombiano.
Querido costeño, ya tiene usted el lugar predilecto para ir a comer chuzo desgranado después de una noche de rumba o como decimos en nuestra tierra, el lugar “pa’ pasar la pea” (la borrachera).
Dirección: Calle 116 # 19A-60
Narcobollo
Este es un negocio familiar que lleva 63 años seduciendo a los comensales del país con lo que denominados “maricaditas varias de la costa”, lo que incluye desde chicharrón con yuca cocina, hasta fritos, bola de tamarindo, panderitos y diabolines.
Narcobollo es como un Mc Donald’s costeño: a pesar de tantas sucursales siempre está lleno de clientes. Cuenta con seis sedes en Colombia repartidas entre Barranquilla Bogotá y Cartagena.
Dirección: Cra.20 No116-14
* Los mártires que se le midieron a probar tanta comida fueron: Simón Sánchez, Nando Banquez, Luz Nelly Galé y Laura Pava.
* Ilustración por: Jerson Charrys
Angie Cabrera Peña