A pocas horas de abrirse las urnas para elegir los alcaldes, concejales, gobernadores, diputados y ediles que liderarán el desarrollo del país en cada una de las regiones, es común conversar con amigos, familiares y compañeros sobre las mejores opciones de candidatos.

Esos pequeños debates, en los cuales generalmente prevalece la percepción individual sobre la colectiva, nos demuestran que en Colombia nos acostumbramos a votar con las emociones y no con la razón. Allí, en esos pequeños grupos sociales, entendemos por qué se nos dificulta tanto elegir los funcionarios públicos correctos.

Votar con el corazón, pero sin convicción racional, nos convierte en animales fanáticos que eligen gobernantes por conductismo -porque la mayoría apoya determinada opción- y, en el peor de los casos, nos transforma en idiotas útiles que invierten su derecho al sufragio solo para evitar que otro candidato gane -como el caso de las pasadas elecciones presidenciales-.

También es frecuente escuchar que los colombianos votamos porque un candidato promete solucionarnos una necesidad específica, como la movilidad o la seguridad, pero al cuestionar sobre una visión integral a largo plazo para el desarrollo de una localidad, ciudad o departamento son pocos los que pueden conectar dos ideas de un plan de gobierno. Eso precisamente es lo que nos condena a un círculo vicioso donde cada administración llega a solucionar el problema que no atendió su predecesora.

Salir del problema requiere de mayor esfuerzo por parte de los electores para comprender los distintos perfiles de los candidatos y sus propuestas de gobierno. Los debates en medios de comunicación son insuficientes para lograrlo. Hay que apropiarse del poder que tenemos como ciudadanos y dedicarle tiempo a investigarlos, conocerlos en detalle y sentir con convicción quién puede representar mejor la visión que todos queremos para el desarrollo futuro de nuestras ciudades y regiones.

La Unidad de Asuntos Públicos de Dattis, firma de consultoría en comunicaciones, preparó una herramienta bastante útil para analizar de manera ágil los distintos candidatos a la Alcaldía de Bogotá. Consúltela a continuación y arme de poder su decisión en el tarjetón.