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Las conferencias de TED que buscan “hacer fácil lo difícil” para que las personas que no somos expertas en determinadas materias, podamos entenderlas, son las que más me llaman la atención.
En este caso quiero compartirles una reciente charla de la científica Ilissa Ocko, experta en el cambio climático y en las implicaciones de los contaminantes en nuestro entorno.
Durante la conferencia, Ilissa nos explica cuál es esa solución “más rápida” para contribuir al cambio climático aparte de lo primero que se nos viene a la mente: reducir las emisiones de C02.
“Nada más llegando al estudio de grabación (lo que me tarda 10 segundos), 10 mts3 de C02 fueron emitidos a la atmósfera de la Tierra” (Ilissa, TED, 2022).
En términos generales, el 99% de estas emisiones provienen del C02 (como muchos lo sabemos), pero ese 1% se le atribuye al metano. Incluso, ese pequeño porcentaje no termina siendo tan pequeño, porque podría estar afectando en mayor medida que el C02.
Y la explicación (brevemente) científica, es porque el metano absorbe mucha más energía por unidad de masa que el C02 debido a su estructura molecular.
Sin embargo, y como bien lo dice Ilissa, no podemos enfocarnos en soluciones futuras, sino debemos mirar lo que HOY nos está costando este problema.
Ya lo sabemos, mejor dicho, lo tenemos más grabado que villancico en diciembre: para estabilizar la temperatura de la Tierra necesitamos lograr cero emisiones.
Pero continuemos, hasta el momento lo que se nos queda grabado es el hecho que reducir el metano, nos permite paralelamente contribuir positivamente a la disminución del cambio climático.
¿De dónde viene entonces el metano que producimos?
- Producción de energía: ojo, no es tanto por la quema de combustibles fósiles, sino por su producción. Y la idea en este punto no es hablar de grandes soluciones súper costosas, sino de realizar pequeños ajustes técnicos en las plantas de producción para evitar su emisión (como las fugas por fallas técnicas).
El otro año tendremos por primera vez un satélite que va a medir las emisiones de metano alrededor del mundo. No es un gran descubrimiento, es más cuestión de “plomería” (Ilissa, TED, 2022).
- Manejo de residuos sólidos: El problema no es que existan basureros, es que están mal diseñados y ubicados en sitios no aptos para evitar que se libere el gas metano.
- Agricultura: La más compleja y la que más metano emite. Sin embargo, ya hay muchos inventos tecnológicos que permiten cambiar la dieta con la que se alimenta al ganado y así reducir hasta en un 30% las emisiones de metano. Incluso, los cultivos de arroz alrededor del mundo, generan ambientes propicios para la acumulación de bacterias que terminan produciendo este gas.
No son soluciones imposibles. Realmente requieren de trabajo que YA se está haciendo.
Por este motivo el objetivo es ver los cambios y no trazarlos al 2080 cuando no sabremos si el Planeta nos pueda seguir ofreciendo una vida como la que llevamos ahora.
Y esta parte me encanta: las soluciones que abarcan los tres focos de la producción del metano, generan empleo y contribuyen a disminuir la inequidad climática para quienes la sufren de primera mano.
En definitiva, llegó el MOMENTO DEL METANO.
Información tomada de la Conferencia de TED de 2022.
