Ya casi cumplimos tres años desde que los colombianos hemos puesto todas nuestras esperanzas y buenas energías en la búsqueda de la paz, y aunque la mayoría (por no decir la totalidad), no sabemos realmente que estamos buscando, por la sencilla razón que nunca hemos tenido tan siquiera un instante de esta, estamos dispuestos a pagar el precio que sea necesario para conseguirla; y es por esto que nuestro benemérito presidente nos ha puesto una tarea un tanto desconcertante y con el desastroso rótulo de “desescalamiento del lenguaje”.
Inicialmente da la impresión de que como los colombianos hablamos el mejor español del mundo y sus alrededores y por lo tanto hemos encumbrado nuestra lengua hasta límites insospechados, es necesario aterrizarla para poder hablar con los guerrilleros desmovilizados, sin embargo, creo que lo que “Chuky” quiere es que dejemos de ser ofensivos en nuestras maneras de referirnos a los demás, lo cual, con todo el respeto que me merece el presidente, es una equivocación ya que ofender es un símbolo de identidad nacional que nos une como pueblo; ya hemos sacrificado demasiadas cosas en esta guerra fratricida como para que nos quiten el placer de estar llamando las cosas “por otro nombre” como buenos colombianos.
Para evitar tal castración identitaria, me he tomado el trabajo de traer algunas formas de llamar las cosas, consignadas en el ALEC , obra cumbre de la lingüística colombiana, que nos permitirá refrescar nuestro idioma y fortalecer nuestra identidad en el posconflicto. He aquí unos ejemplos (Para verificar lo aquí consignado favor dirigirse al Atlas Lingüístico y Etnográfico de Colombia. Tomo V. Instituto caro y Cuervo. Bogotá 1983):
Malpellejo: Que tiene manchas en la cara. Ejemplo: Si Iván Márquez decide quitarse la barba quedara en evidencia que es un malpellejo.
Comesancocho: Nombre dado a la boca en el norte del país. Ejemplo: El ex presidente Uribe debería dejar quieta esa comesancocho para no alterar el proceso.
Caspusia: Hambre: Ejemplo: la firma de la paz permitirá erradicar la caspusia en muchas zonas del país.
Cumbambiar: Bostezar. Ejemplo: los discursos del candidato a la alcaldía de Bogotá Rafael Pardo incitan a cumbambiar.
Chéchere: Aparato reproductor masculino. Ejemplo: Oscar Iván Zuluaga tuvo que llevar su chéchere a reparar.
Estoy con pacho: Tener el periodo menstrual. Ejemplo: los que estén con pacho por favor abstenerse de ir a votar.
Fidel Castro: Aparato reproductor femenino: Ejemplo: El ex presidente Uribe nunca ha hecho una declaración en favor del Castrismo.
Capítulo aparte en este desescalamiento del conflicto merece nuestro alcalde de Bogotá el choneto (zurdo) Gustavo Petro, quien sin ponerse colorado dijo en el Vaticano delante de 50 desconcertados alcaldes de todo el mundo que la situación del planeta se debía a la existencia de tantas chucherías. Ojala este acto genere interés hacia el español que se habla en Colombia y no se diga que el discurso de nuestro alcalde es digno de un atronado o tomachicha (tonto).