Así pensaba en 2008 y sigo pensando igual:

El primero de los males de este milenio ha aparecido y se encuentra entre nosotros, al principio como muchos otros creí que se trataba de algo pasajero y que seria cosa de un par de meses máximo seis como ocurrió con el meneito, el carrapicho, la quebradita y otros tantos males menores que nos atacaron a finales del siglo pasado,

Es innegable el impacto del reguetón el los Bogotanos, al parecer sobrevivió a los 2600 metros de altura cosa que no sucede con todas las plagas y es que día a día su preocupante auge crece al punto de alcanzar rápidamente a tener emisoras dedicadas exclusivamente a este ritmo cosa que le costo mucho trabajo a otros estilos como la salsa y algunos otros que no han alcanzado este logro como el jazz o la mismísima y aceptadísima ranchera.

Hace pocos días Willie Colon dijo en nuestra ciudad que el reguetón estaba tomando el lugar de la salsa , lo cual me parece desastroso no solo por lo que implica sino por las diferencias abismales que existen entre uno y otro. La coexistencia de culturas en Bogota nos permite escuchar y tolerar ritmos venidos de muchas parte sin embargo hago esta pataleta basado en los siguientes puntos, que son a su vez lo que defienden los seguidores de este seudo ritmo

 

 

Para finalizar mi sentida y preocupada pataleta invito a toda los capitalinos a extirpar este mal que junto a la progresiva traquetizacion de Bogota están consolidando el imperio del mal gusto el cual debemos acabar.

 

¡JUNTOS LOS DERROTAREMOS ¡

 

DON BETO

Sigueme en Twitter: @gilronguz