Por @Silviadan
Hoy se celebra el Día Internacional de las Niñas en Comunicaciones y Tecnología. #NiñasenTIC. La idea detrás de la conmemoración de ésta fecha es que las jóvenes interesadas en ésta área, se sientan acompañadas y estimuladas a alcanzar sus sueños.
En nuestra región, aún son muy pocos los esfuerzos para unirse a esta campaña y es clave no solo que nuestras niñas entiendan la importancia de estas carreras para su desarrollo personal y laboral sino que quienes ya se sienten atraídas por esta areas no pierdan el impulso para posicionarse en estos campos, hasta ahora dominado por hombres.
En Estados Unidos solo un quinto de los doctorados en Ciencias son entregados a mujeres, y solo un 14% de los profesores de física son mujeres. A pesar de que las mujeres representan más de la mitad de la fuerza laboral del país, menos del 25% tiene un trabajo en estas áreas.
Según estadísticas de Engineering.com, en un grupo de 25 ingenieros, solo 3 serán mujeres, y a pesar de que los empleos en ingeniería y tecnología son mejor remunerados, las mujeres que se gradúan de estas carreras terminan trabajando en otras plazas.
¿Por qué? Algunos de los factores incluyen la falta de modelos a seguir: aún son realmente muy pocas las mujeres triunfadoras en estos campos. Tristemente no abundan mujeres de la talla de Marissa Meyer, CEO de Yahoo.
Con la campaña se quiere estimular a las jóvenes a explorar el mundo de las aplicaciones en línea, la codificación, la digitalización y otras áreas que no solo pueden ser divertidas y entretenidas y que además pueden ayudar a romper los tradicionales esquemas de socialización.
Muchos de estos campos aún se catalogan de “masculinas“ respondiendo a viejos estereotipos de cómo debe verse y comportarse una mujer para ser femenina, y tal vez por la misma razón, no hay flexibilidad dentro de los círculos familiares para que las mujeres puedan practicar y dedicarse a estos campos.
Más aún. Al ser dominados por hombres, cuando las mujeres logran posicionarse en estos campos, no les es fácil moverse con libertad y se ven enfrentadas a problemas de discriminación y acoso por parte de sus pares masculinos.
Para romper con estas taras es necesario pasar la voz. Hoy me uno a ellos… ¿Y tú?