Parecía todo, menos una carrera de la Fórmula Uno. El fin de semana, en México, fue uno de los espectáculos más vistosos, bonitos y hasta lacrimógenos que haya visto en estos últimos 35 años frente a la pantalla viendo las carreras.

Por donde se le haya mirado, donde se haya puesto el ojo, el espectáculo fue de lo mejor, la muestra de los carros antiguos, el desfile de personajes, los niños cantando el himno de su país y toda la iconografía de la nación mexicana.

Pero nada como haber escuchado al tenor español Plácido Domingo cantando ‘Cielito Lindo’ y lo más representativo de los mexicanos, sus rancheras que todos hemos tarareado alguna vez en la vida.

El Gran Premio de México ha sido de la mejor carrera del año, tanto en lo deportivo como en sus actividades que giran alrededor.

En lo primero, lo que nos motiva como parte de la fanaticada, muy merecido el triunfo para el piloto de Red Bull Racing, Max Verstappen, quien se llevó los aplausos de comienzo a fin. Hizo lo mejor que pudo y demostró que es un piloto aguerrido; sin embargo, a ratos parece como si le faltara carro.

Lo anterior, contrario a los que sí tienen carro pero les faltó, quizás haber sido menos conservadores a la hora de correr, los Ferrari, en las manos de Sebastian Vettel y Kimi Räikkönen, quienes llegaron en los lugares 2 y 3 de la competencia de este domingo.

Eso no quiere decir que hayan pasado sin pena ni gloria en la carrera, por el contrario, lo que sorprendió es que no hayan podido con Verstappen.

En la carrera parecía que, al menos en los cinco primeros, hubiese habido un ‘pacto de no-agresión’, pues Lewis Hamilton ganó su quinto campeonato mundial sin un mayor esfuerzo, pues llegó en el puesto 4. Un triunfo que casi malogra su propio equipo, pues los juegos de llantas utilizados por el piloto se degradaron muy rápido y las marcas del desgaste eran evidentes en todas las tomas.

Pero como ningún triunfo es gratuito, Hamilton pasó el dolor de su vida durante la misma carrera por la muerte de su abuelo el pasado jueves, tres días antes de la carrera.

Como siempre, la carrera también estuvo emocionante del quinto puesto hacia atrás, donde pudieron apreciarse destrezas al manejar,  remontadas y uno que otro ‘toque’ o ‘intercambio de pintura’ entre varios carros, en una carrera larga, a 71 vueltas, en un circuito que permite lo mejor: altas velocidades (de hasta 345 kilómetros por hora) y sobrepasos, pues la pista es lo suficientemente ancha en todo su trayecto.

La carrera, emocionante desde dos horas antes de las transmisión hasta una hora después de finalizada.

Lo triste: el retiro del australiano Daniel Ricciardo (Red Bull Racing), quien se prefilaba como el ganador indiscutible de la carrera, tras lograr el mejor tiempo en las pruebas de clasificación.

Lo jarto: la repetitiva despedida de Fernando Alonso, quien ya pasó de ser campeón a perdedor nato, pues no tiene carro para competir. No es fobia, pero hace mucho rato debió irse, no como lo está haciendo hoy, en moto tras las fallas mecánicas de su carro en todas y cada una de las carreras.

Lo inesperado: el retiro del piloto local, Sergio Pérez, quien fue ovacionado de la manera más emocionante por el público de su país.

Lo mejor: toda la carrera de comienzo a fin.

Vale la pena indicar que no valió la pena hacer comentario alguno por el Gran Premio corrido en los Estados Unidos, en Austin, donde el triunfo fue para Kimi Räikkönen, más que merecido, pues no subía al podio desde el año 2013.

La transmisión de la televisión no salió del seguimiento, al detal, de la punta de la carrera, dejando de lado las emociones que se presentan atrás.

Como siempre, Fernando Alonso abandonó; esa vez fue en la primera vuelta, luego de haberse tocado con Lance Stroll (escudería Williams); obviamente, a este último lo culparon del abandono; cosas de excampeones.

El martes 30, ‘El Día T’… de Tatiana

La piloto de pruebas para el equipo Sauber, la colombiana Tatiana Calderón será la primera latinoamericana que conducirá un auto de Fórmula Uno, este martes 30 de octubre, en el autódromo Hermanos Rodríguez, de la Ciudad de México.

Telcel, el proveedor líder de telecomunicaciones móviles en México, e Infinitum serán patrocinadores de Alfa Romeo Sauber F1 Team durante el evento promocional. El logotipo de Telcel lucirá en el alerón trasero y en el cono frontal del auto.

«Estoy muy agradecida y emocionada por la oportunidad que me brindan Alfa Romeo Sauber F1, Escudería Telmex, Telcel, Infinitum y Claro para manejar por primera vez en mi carrera un auto Fórmula Uno. Desde que inicié mi carrera en el automovilismo, mi sueño y mi objetivo han sido manejar al más alto nivel. Será una experiencia increíble», dijo Tatiana.

Este martes 30 estaremos pendientes de Tatiana. Forza Tati !