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Lo que hoy se inunda (Suba, Fontibon, Chía) ayer era un chirriadísimo
lugar para un paseo dominical de cachacos y rolos; en medio de una ciudad que
no lo era tanto y de un río Bogotá que lo fue. 

 

1--Sabana acuática.jpg

Una Sabana acuática

Juan Manuel Vargas.
El Tiempo.

 

Relato

 

  
«Santa Fe de Bogotá es pueblo y capital del corregimiento de ese nombre,
que también se llamaba de la Sabana, situado en un hermoso y agradable llano,
en las orillas de un río que tiene la misma denominación, en donde pescan
muchísimo y especialmente un pez llamado capitán,
muy gustoso y estimado […]»

Felipe Pérez, 1883. Comisión Corográfica

 

 

2--Transporte a ninguna parte.jpg

Transporte a ninguna parte

Enrique Mathieu,
archivo CEET.

 

Relato

 
«Las calles de Bogotá son rectas por lo general, empedradas y no muy
anchas; pero casi todas tiene espacio para la comodidad del tránsito, y muchas
están cortadas con arroyos que desembocan en los ríos que atraviesan».

Felipe Pérez, 1883. Comisión Corográfica

 

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Aviso temporal

Sin autor

 

Relato

 

  
«Ya en el interior de la ciudad, nuestros ríos son verdaderos
recipientes de cuanta inmundicia puede haber en una población que ignora el
deber común llamado aseo; […] un enjambre de hombres y mujeres depositan allí
sus excreciones, y cuanto objeto inútil cae a los ríos».

Josué Gómez, 1898. Las epidemias de Bogotá.

 

 

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Amor húmedo

Beatriz González.
Los suicidas del Sisga. 1972.

 

Relato

 

  «Un día
cualquiera abrí el periódico y encontré la foto de los suicidas del Sisga. La
historia narraba cómo un jardinero enloqueció y dijo a su novia, empleada de
servicio, que el mundo estaba lleno de pecado y era mejor dejar de existir;
decidieron entonces lanzarse a las aguas heladas de la laguna del Sisga, luego
de hacerse retratar juntos con un ramo de flores entre las manos. Aunque era
una historia muy bella y romántica, mi interés se centró en la imagen
reproducida en la prensa: esas caras planas eran la fórmula que yo andaba
buscando […]».

Beatriz González, entrevista, 1991. Museo de Bellas
Artes de Caracas.

 

 

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