@NataliaGnecco

Todos conocemos a Grecia en azul y blanco, un país de extraordinaria belleza, con una historia riquísima, cuna de la civilización, de la democracia de la filosofía, de las artes, de los ideales olímpicos, pero esa patria de Aristóteles, Homero y Platón también se respira desde el suelo azteca, gracias a la ayuda de Georgia Boutsianis, Vicepresidenta de la Comunidad Helénica de México, COMHELMEX.

Dotada de una extraordinaria calidad humana, Georgia asegura que el pago emocional que recibe por su trabajo en COMHELMEX  es más que suficiente, pues le satisface saber que el nombre de Grecia se escucha por doquier y que se despierta cada vez más el interés por la cultura griega.


En pleno ajetreo por la organización de los festejos de las fiestas nacionales del Día del OXI el próximo 28 de octubre, Georgia nos habla desde Toluca México sobre el amor por su tierra natal, la mujer griega y los retos que implica velar por la integración de la diáspora griega en el extranjero.

Georgia, ¿cuál es la mujer griega que más admiras?
Sin duda, la artista, cantante, política Melina Mercouri , quien obtuvo el premio a mejor actriz en el Festival de Cannes en 1960 con su rol en ‘Nunca en domingo’. Fue una mujer que se destacó por su carácter activista, pues en 1977 fue elegida miembro del Parlamento Griego, luego en 1981, fue la primera mujer griega en convertirse en Ministra de Cultura.

¿Una mujer de armas tomar?
Bueno, Melina fue una de las oponentes más fuertes a la dictadura militar de los años sesenta en Grecia conocido como el Régimen de los Coroneles, durante este período le retiraron su ciudadanía griega, a lo que ella respondió: ‘’Yo nací griega y moriré griega’’. Además, existe una fundación con su nombre, cuyo objetivo es contribuir a la promoción y difusión de la cultura griega en Grecia y en el extranjero, por eso me parece una mujer digna de admiración.

¿Cómo ves a la mujer griega después que tu país se adhirió a la Unión Europea?
Las mujeres griegas hemos afrontado una paradoja: encontrar un equilibrio entre la modernidad y nuestra herencia cultural. El resultado de la mezcla entre tradición e innovación ha sido el cambio del status de la mujer, su incorporación a puestos de mayor responsabilidad en el ámbito público, político y en el sector privado unido a su compatibilidad como madres y ejecutivas del hogar, para seguir manteniendo nuestras costumbres dentro del seno de la familia.

¿Es todavía común eso de la dote?
La dote al casarnos cada vez es menos tradicional, aunque todavía recuerdo de forma muy anecdótica el día que dos de mis primas en los años ochenta se casaron por ‘Proxenió’, es decir, sin conocer a sus esposos. Así muchos griegos emigrantes también se casaban y por medio de amigos de la familia, o familiar del familiar, les hablaban de mujeres ‘casaderas’ a través de epístolas, incluso se llegaban a casar por poderes y venían en barcos a México o Estados Unidos a conocer a su esposo para crear un hogar lejos de su tierra natal.

¿Se mantiene el legado griego al interior de la comunidad helénica en México?
Vivir lejos de nuestro país es todo un desafío, pues queremos que nuestras generaciones sigan nutriendo su espíritu heleno, que sigan conservando nuestra religión ortodoxa, preservando nuestras costumbres, tradiciones, gastronomía, bailes, y lo muestren al mundo.

¿Y cómo ves la respuesta de la nueva generación?
Pensadores como Aristóteles, Platón, Sócrates, Heráclito, etc. literatos e historiadores como Hesíodo, Homero, Heródoto, Aristófanes, Esquilo, Sófocles, Safo, Jenófanes; físicos como Arquímedes; matemáticos como Nicómano, Pitágoras, Hipócrates; arquitectos y escultores como Praxíteles, Policleto, Mirón, Hipódamo, Calícrates, etc todos ellos nos dejaron un gran legado que permanece hasta nuestros días. Sin ir muy lejos, mi hijo Alexandros quiere estudiar arquitectura, inspirado en nuestros monumentos y Aristóteles mi hijo mayor quiere ser un gran político y economista, tiene un espíritu emprendedor y es un gran admirador del estratega Alejandro Magno.

¿Tu lengua materna se habla en casa?
Mi mamá española aprendió griego y así nos comunicamos siempre. Llegar a Grecia y poder comunicarnos con nuestros tíos y primos en griego es estrechar las distancias geográficas que nos separan durante el resto de los meses que vivimos en México. Es más, cuando la familia de allá puede comunicarse con mis hijos es como aceptarlos ‘como parte de’, y recuperar ese sentido de pertenencia, de sus raíces, es invaluable el sentimiento que todo esto nos genera. Yo lo llamo ‘llenar el tanque de oxígeno’ para poder seguir con la misión en la diáspora.

A propósito de la diáspora, ¿qué es lo más difícil de trabajar para la Comunidad Helénica en México?
Yo diría que recuperar el poder de convocatoria entre las familias griegas. Tenemos familias cuyos abuelos llegaron a principios del siglo pasado en barcos, la mayoría querían llegar a Estados Unidos pero por una u otra razón se quedaron en México. Ahora tenemos a las terceras generaciones que siguen llegando a los eventos de la comunidad; más otros que perdieron ese eslabón que nos une tanto que es la lengua griega. Sin embargo, gracias a la escuela ‘Ithaki’ estamos reuniendo cada vez a más griegos que desean recuperar la lengua que dejaron de enseñarles. También, nos esforzamos por acercarles a sus raíces a través del baile, tenemos bien constituido el grupo de Bailes Tradicionales de Grecia, ‘Egeo’.

¿Cuál es el mensaje que les  transmites?
Ser griegos es un derecho de sangre, pero no basta con decir ‘soy griego/a’, yo quiero ir más allá que la Mercouri, en la diáspora los griegos tenemos un compromiso para difundir nuestra cultura y que nuestros hijos se enamoren de ella.

¿Qué retos has tenido que afrontar?
Son muchos, uno de ellos fue elaborar una base de datos actualizada de griegos, pero gracias a que disponemos de nuevas tecnologías y redes sociales hemos podido apoyar la difusión cultural, como el concierto de la mezzosoprano Alexandra Gravas, o la poesía de Cavafis en el Palacio de Bellas Artes.

¿Pero los frutos se están viendo?
Claro, ya nos han publicado tres artículos en la portada del National Herald en Nueva York, con temas relativos a las actividades que realizamos los griegos en México escritos por mí en inglés; hemos institucionalizado las clases de danzas de Grecia con la Agrupación de Danzas Tradicionales ‘Egeo’ de la COMHELMEX, el grupo asiste a varios eventos culturales representando a Grecia en todo su folklore en diversas partes de la República Mexicana.

¿Existe solidaridad entre los miembros de la Comunidad?
Contamos siempre con el apoyo de la Excma. Sra. Polyxeni Stefanidou, Embajadora Extraordinaria y Plenipotenciaria de la República Helénica en México, quien está realizando una labor extraordinaria como diplomática. Además tenemos la mejor tesorera del mundo, Eleni Mitsoura, ella es experta en hacer rendir los pocos recursos para realizar nuestros eventos y sostener la Escuela de Idioma Griego Moderno y Antiguo ‘Ithaki’.

¿Qué es lo que más le gusta a los mexicanos de Grecia?
El pueblo mexicano y el griego tienen muchas similitudes, por ejemplo, los valores de la familia, las tradiciones del país, la alegría por celebrar la Independencia, el amor por la patria, etc. Cuando tenemos eventos en la sede COMHELMEX cantamos nuestro Himno en actos protocolarios al igual que los mexicanos, además hay júbilo al compartir los bailes griegos que les fascinan, la pista de baile se llena de griegos y mexicanos ávidos de aprender los pasos del Sirtaki, del Kalamatianó. Y en fiestas privadas, ya no pueden decir ‘que nunca han roto un plato’, pues disfrutan como niños rompiendo las vajillas.

¿Han logrado que se involucren en sus actividades?
¡Por supuesto! Muchos de nuestros alumnos en clases de idiomas o danza son mexicanos, las familias son mixtas y con la gran difusión que hemos hecho en estos últimos años, nos solicitan hacer más eventos, difundirlos y hasta recibimos ofrecimientos de los mexicanos para colaborar y participar activamente con nosotros.

Por último, ¿ la crisis se sintió en COMHELMEX?
El 10 de abril de 2014 finalizó «oficialmente» la crisis, pues el Estado Griego logró el exitoso reingreso de Grecia a los mercados internacionales de bonos. Sin embargo, por el asunto de la crisis, están llegando oleadas de griegos a México en busca de nuevas oportunidades, que traen sangre nueva y nos refrescan. Nosotros hacemos la labor de conectarlos y atraerlos a la comunidad para que todos juntos, los primeros que llegaron, hijos, nietos y los recién llegados,  nos unamos en una comunidad fuerte y bien consolidada.

Fotos: Archivos COMHELMEX