@NataliaGnecco

Obtén un abdomen plano en un mes; pierde hasta diez kilos en pocos días; logra ya unos glúteos perfectos; prueba las gotas que te ayudarán a tener el cuerpo que siempre soñaste; combate la celulitis; olvídate de las estrías; deja de lado el sobrepeso y luce delgada… Anuncios como estos son lo que más proliferan en la red social Instagram , famosa por ser una aplicación para compartir fotos y videos.

Es tanto el furor de Instagram que muchos se han llegado a sentir fotógrafos profesionales, mientras que otros lo llaman jocosamente “chismagram” porque se enteran de lo mínimo en la vida de sus amigos y familia. Sin embargo, el verdadero “ plus” de esta red social que cuenta con 300 millones de usuarios es ser una de las plataformas de anuncios para móviles más grandes del mundo, aunque muchos productos que se anuncian navegan en las turbias aguas de la publicidad engañosa, incluso algunos han sido retirados del mercado, sin que la gente se entere.

Prueba de ello es el Ultra Zero Xtreme (Ultra ZX), suplemento para la pérdida de peso, que la La FDA (Food and Drug Administration) entidad estadounidense que regula el mercado de alimentos, suplementos y medicamentos ordenó la retirada del mercado desde el pasado 10 de marzo por contener componentes no declarados en la etiqueta, considerados nocivos para la salud humana.

Mediante análisis de laboratorio oficiales realizados por la FDA se encontró que el Ultra ZX contiene sibutramina y fenolftaleína, sustancias que pueden causar problemas cardíacos y cáncer, respectivamente. Recordemos que la sibutramina fue retirada del mercado desde el año 2010 por encontrarse que incrementa la presión sanguínea y el ritmo cardíaco, pudiendo representar alto riesgo para pacientes con antecedentes familiares de enfermedad coronaria, falla cardíaca, arritmia o derrame cerebral.

¿Pero cómo llegan todos estos mensajes a tu cuenta de Instagram ? Carolina, administradora de empresas de 39 años advierte que no hace falta seguir a los anunciantes, pues a ella le llegan hasta cremas milagrosas que desaparecen las estrías del embarazo, afinan la cintura, etc, etc. Preocupada explica: “recibo todos estos anuncios porque sigo una cuenta de vestidos de baños y como se anuncian mutuamente, entonces los usuarios quedamos obligatoriamente expuestos a todas estas maravillas”

Por su parte, Juan Pablo estudiante de aviación de 21 años piensa que a la gente le da miedo ser rechazada y los anunciantes se aprovechan de ese desespero, la contaminación visual es tan agresiva que por poco termina comprando unas gotas adelgazantes para moldear su abdomen. Mientras tanto, Verónica, estudiante de bachillerato de 12 años y amante del Instagram como Juan Pablo expresa: “yo veo toda esa publicidad y digo ¡qué rayos! Es mentira, se están aprovechando de las niñas que están gorditas y desean adelgazar sin mucho esfuerzo… ¿cómo vas a perder entre 12-15 Kilos (24-30 libras) en tan sólo 30 días?

 Lo increíble es que muchos usuarios de Instagram no saben que este tipo de avisos están prohibidos, de hecho en el 2014 la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC ) emitió resoluciones sancionatorias por más de 3 mil millones de pesos a 33 empresas que cometieron publicidad engañosa en sus publicidades o productos. En lo que va corrido de este año ya se han multado trece compañías entre ellas Natuchips y sus plátanos verdes; Despegar.com; Siluet 40; Megavacaciones; Maxiboletos, entre otros.

Más allá de la publicidad engañosa

Ver constantemente anuncios que venden la idea del cuerpo perfecto es como estar sometido a un “brain wash” o lavado de cerebro, pues la utilización de productos “mágicos” no ayudan para nada a prevenir el trastorno corporal dismórfico (TCD) , anteriormente conocido como dismorfofobia, un trastorno en el cual una persona piensa que tiene un defecto físico, o cree que un defecto leve es mucho peor de lo que en realidad es, hasta llegar a obsesionarse con la idea.

De ahí que veamos tantas jóvenes obsesionadas con su apariencia, muchas llegan asumir riesgos innecesarios que pueden acabar con su existencia. El caso más reciente es el de Angélica Sánchez, empleada de un banco que decidió someterse a una liposucción en una clínica ilegal, sin saber las graves consecuencias que esto le causaría.

Angelica es solo un ejemplo más de jóvenes que en flor de la vida fallecen en un quirófano, pues buscar un cambio en su figura, encuentran una tragedia. Algo similar le ocurrió a Angie Lizeth López Patiño caleña de 21 años, quien desde 2013 residía en Hannover, Alemania, pero rergresó a su ciudad para practicarse una lipoescultura y una lipoinyección glútea. Murió por complicaciones tras la intervención quirúrgica.

Y mientras casos como estos se vuelven el pan de cada día en Colombia, la comunidad Instagram sigue interesada en probar los productos que se promocionan con bombos y platillos en fotos y videos. El llamado entonces es a los incautos para que no se dejen seducir por publicidad engañosa; a los profesionales de la salud y pacientes para informar sobre los efectos relacionados con el uso de estos productos, o su retiro del mercado y a los consumidores a denunciar la publicidad engañosa.

Como se trata de un problema de salud pública, este llamado se hace extensivo al Ministerio de Salud, que reglamenta la importación de medicamentos y alimentos a través del Invima, sin dejar de lado a las Secretarías de Salud, a la Superintendencia de Salud para el debido control, vigilancia e inspección de clínicas de estética ilegales.

Para finalizar no puedo pasar por alto la necesidad de una campaña de prevención nacional enfocada al tema de belleza física como un patrón específico, que lleva a muchas personas acudir a estas cirugías que terminan matándolas, todo porque piensan que ¡la belleza es igual a éxito! Un buen ejemplo a seguir es el programa de prevención implementado por la psiquiatra Lucrecia Ramírez en Medellín sobre el embarazo adolescente, la anorexia y la bulimia.

 

Fotos: Instagram