@NataliaGnecco

Con la declaración del presidente François Hollande “Francia está en Guerra” , luego del escalofriante saldo de 129 muertos que dejó la escalada terrorista del Estado Islámico (EI) el pasado 13 de noviembre, se abrió un nuevo capítulo en la guerra contra el terrorismo, que lideró George W Bush cuando ocurrieron  los atentados del 11 de septiembre en Nueva York. En retaliación por lo acontecido en París, aumentaron los ataques aéreos en Siria, mientras los analistas políticos no dejan de preguntarse cómo ganar una guerra contra actores de un conflicto que están dispuestos a morir, debido al alto grado de convicción y compromiso que profesan estos yihadistas europeos.

Con siete ataques aéreos en menos de una semana, la estrategia para combatir al EI se está reforzando, pues los países aliados para esta llevar a cabo esta misión Estados Unidos, Reino Unido, Francia, Alemania, Italia, Polonia, Dinamarca, Canadá, Australia y Turquía, reciben ahora el apoyo de Rusia, defensor del régimen de Bashar al-Asad. Con semejante ajedrez político la idea del Secretario de Estado americano, John Kerry de no enviar soldados sobre el terreno se hace cada vez más remota.

Indudablemente, para poder entender por qué ciudadanos franceses están atentando contra otros ciudadanos franceses, es necesario remontarse a la historia del colonialismo francés, “entender” qué quiere el Estado Islámico, (EI), por qué están en Siria, qué reclaman, etc. Lamentablemente los noticieros colombianos pasan por alto la necesidad de profundizar la noticia, de hablarnos de los antecedentes y no cuentan con un analista geopolítico de cabecera que explique todo lo que está en juego.

Por eso cuando muchos colombianos se apresuraron a mostrar su solidaridad con Paris, personalizando su perfil en Facebook con la bandera francesa, se armó tremenda polémica, pero no alrededor del origen de estos ataques, sino a cuestionar qué tanto le importan los muertos de Colombia al mundo entero. Menos mal se viralizó en las redes un video llamado “Why Siria” que explica brevemente, el origen de esta escalada terrorista, para así acabar con esta bronca e invitar a los cibernautas a tomarse la molestia de ver este importante mensaje.

Cada quien lee en su libro

Curiosamente al enterarse de los ataques en la capital francesa, el presidente Hollande determinó el cierre de las fronteras, pero lo grave aquí es que el enemigo vive, se alimenta y duerme en París. Prácticamente a Francia le cala el dicho “cría cuervos y te sacarán los ojos”, pues los franceses colonizaron Medio Oriente y el norte de África, siendo un país invasor. ¿Cuánta gente murió en sus procesos de colonización? ¿Hasta qué punto ejercieron presión en todos estos territorios para obtener su autoridad? Son preguntas que hoy cobran vigencia y nos obligan a repasar los anaqueles de la historia.

El Estado islámico tiene como bandera rescatar el Califato de Córdoba, el cual se extendía desde el Medio Oriente hasta el sur de España pasando por el norte de África, algo que a simple vista es absurdo, pero como cada cual lee en su libro, para ellos esta reconquista tiene mucho sentido. El Califato de Córdoba o de Omeya, o de Occidente, fue un estado musulmán andalusí proclamado por Abderramán III en 929 y según la tradición árabe se le atribuye su fin a la ambición del segundo de los sucesores de Almanzor, Abderramán Sanchuelo, es así como en el 1009 perdió el control de todo el territorio y en cuatro meses la poderosa estructura estatal del califato se vino abajo.

Sin embargo, después de 1492 al haber perdido los territorios, su poder se concentró en Turquía hasta cuando estalla la Primera Guerra Mundial (1914-1918) que finaliza con unos tratados de paz que hicieron desaparecer los cuatro grandes imperios que existían: Alemania, Rusia, Austro-Hungría y Turquía. En su lugar surgieron otras entidades que confirmaron el desmembramiento.

Es así como el Imperio Turco, quedó reducido territorialmente a la península de Anatolia (Asia Menor) y sólo conservó en Europa la ciudad de Estambul, debido al Tratado de Sèvres, perdiendo la zona de Irak, Palestina, Líbano y Siria que fueron convertidos en protectorados bajo la administración del Reino Unido o Francia. Pues bien, las colonias francesas logran su libertad luego de cruentas guerras civiles, que terminan mandando a los franceses de regreso a casa y es ahí cuando ofrecen a los habitantes de sus antiguas colonias la ciudadanía y se establece como segunda lengua oficial el francés, tal como sucedió en el Líbano o en Argelia.

Como es de suponer, la imposición de estas enérgicas condiciones trajo como consecuencia muchas revoluciones, guerras civiles que inciden en nuestro presente, en especial porque el Medio Oriente nunca ha perdido su protagonismo, tanto por sus problemas internos como por la importancia económica para el mundo, sin mencionar que es el centro del reino islámico, el ‘mundo musulmán’.

El Medio Oriente es además fuente de una considerable cantidad de petróleo y gas para el mundo, así como el lugar donde puede ser obtenido más barato. Hoy para nadie es un secreto que la invasión de Iraq tuvo dos excusas, el desarme de armas de destrucción masiva (ADM) – las cuales, nunca llegaron a encontrarse, ni su existencia pudo ser demostrada y ponerle fin al (supuesto) apoyo brindado por Saddam Hussein al terrorismo, para lograr la «libertad» del pueblo iraquí.

Con todos estos antecedentes terminó de germinar la violencia en el Estado Islámico, un grupo terrorista insurgente, de naturaleza fundamentalista yihadista wahabita, autoproclamado califato, asentado en un amplio territorio de Irak y Siria, convertido hoy en enemigo público de Europa y Estados Unidos, pues esta semana lanzaron nuevas amenazas contra el gobierno de Obama y le demostraron a las autoridades franceses que pueden violar su soberanía cuando les dé la gana.

El Estado Islámico libra guerras santas para desterrar a los infieles de lo que ellos consideran es “su territorio” , esa es parte de su filosofía y ven a Francia con su liderazgo como un país entre metido que apoya los bombardeos en Siria para exterminar a los terroristas. Rusia, quien permanecía neutral apoyando a su aliado Bashar al-Asad, se le ocurrió bombardear territorios con presencia del EI, lo que desató la furia de los extremistas islámicos, por eso derribaron un avión con más de 200 turistas rusos que vacacionaban en Egipto.

Por último, sólo basta decir que cada día que pasa, la situación mundial se complica más: un Putin diciendo que perdonar a los terroristas es tarea de Dios, pero mandárselos a él, es su misión; el FBI advirtiendo que vendrán más ataques similares en Paris, cual “copy cat”; un eminente bloqueo al ingreso de miles refugiados sirios a otros países;  nuevas amenazas a Roma, Washington y Nueva York;  un Estado Islamico reclutando jovenes por doquier y pendiente de obtener armas nucleares…  ¡Apenas para seguir celebrando la eliminación de la Visa Schengen a los colombianos!

 

Fotos: abc- noticiastelemicro.com, woerldpress, El Espectador, arainfo.org, el horizonte Mx