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Por: Carlos OssaEn estos días se está desarrollando el juicio contra Santiago Uribe Vélez, hermano del expresidente Álvaro Uribe. De lo que se conoce en el juicio los testigos que la prensa clasifica como “estrella” están diciendo que “no les consta” o “no se acuerdan” de absolutamente nada de lo que ellos mencionaron en la etapa indagatoria.
Lo que ocurre es que puedo decirle lo que deseo al fiscal, pero esto solo es válido cuando se da efectivamente testimonio en la etapa del juicio oral. Si se rinde testimonio que no es comprobable o es demostrado, incluso en el juicio que es falso se comenten los delitos de fraude procesal y falso testimonio, para tal evento es mejor no dar falsos testimonios en la etapa de juicio oral así lo haya hecho ante el fiscal.
Es común escuchar a los “antiuribistas” decir (sin ninguna prueba) que “en realidad” los testigos o sus familiares están siendo amenazados no importa que estén viviendo en el exterior en este momento o que estén bajo tutela del programa de protección a testigos siempre tienen la doble salida: si lo condenan irrefutablemente es culpable y si lo absuelven fue porque le metió mano al proceso o amenazó a los testigos, etc.
Es común condenar a alguien en los medios dárselas de detective y condenar a toda persona que sea acusada como en el “caso colmenares” estamos lejos de cumplir con el derecho de presunción de inocencia.
Sería bueno preguntarle a Manuel Garzón, abogado que denunció a Santiago Uribe, ¿qué pasó con sus “testigos estrella”? entre dichos testigos está uno que ya fue condenado por el delito de falso testimonio gracias dicho “testigo” le dictaron medida de aseguramiento a Uribe Vélez, lo que ocurre es que este abogado quien se autodenomina “defensor de derechos humanos” está muy ocupado en su campaña a la cámara por Bogotá por el partido de las FARC.
Me pregunto ¿cómo uno se puede autodenominar defensor de derechos humanos cuando pertenece a un partido que se ha ganado curules con muertos y no con votos? O que sabe que es de un grupo político el cual se dedicaba anteriormente a violar niñas, secuestrar, reclutar forzosamente entre muchos otros delitos y actos violatorios de los Derechos Humanos. Mucho se ha especulado si Uribe es paramilitar, pero estas acusaciones vienen de esta clase de defensores de DDHH o vienen de esta clase de testigos, hoy miembros de la nueva comisión de la verdad dicen que las FARC reclutaban niños como un acto altruista y de bondad.
Si existen tales acusaciones estas se deben denunciar y no asumirlas como una estrategia “vox poluli” si muchos están seguros que es un asesino es un hecho que tienen que denunciar, de lo contrario es un chisme creado sin base, adicionalmente lo más curioso es que por ejemplo nuevas acusaciones de masacres se den precisamente en temporada electoral.
Excelente opinión. Es una muestra clara de lo que ocurre con la justicia amañada y manejada a su antojo por los militantes del socialismo del siglo XXI. La primera reforma que tiene que hacer el próximo gobierno es la reforma a la justicia. Sin justicia no habrá paz.
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