En mi anterior entrada escribía sobre los peligros que pueden acarrear los comentarios ligeros y los contenidos que publicamos en nuestras redes sociales. Ponía de ejemplo la foto de un señor que todo el mundo está acusando de haber sido quien le cercenó tres patas a la perrita Muñeca y me preguntaba si acaso no es irresponsable difundir imágenes cuyo origen desconocemos a costa de poner en riesgo la integridad de personas cuyas actuaciones delictivas no nos constan.
El Tiempo destacó mi entrada en Facebook y publicó un aparte que transcribo a continuación:
«Basta entrar a cualquier red social y comprobar que las opiniones políticas de muchos se basan en reflexiones livianas de grandes pensadores colombianos como Gustavo Bolívar, Gustavo Gómez y el infaltable Vladdo, cuyas agudas críticas de tiempos mejores ahora no pasan del bostezo sostenido».
http://blogs.eltiempo.com/palabras-movedizas/2014/04/08/fiebre-de-justicia/
Tristemente la atención de muchos lectores no se centró en la idea principal de mi columna, que era en pocas palabras, concienciar a la gente de que en las redes sociales también tenemos responsabilidades civiles; muy al contrario, los comentarios de los foristas se centraron en mi opinión sobre los pseudointelectuales citados arriba.
Como es habitual, recibí muchos madrazos gratuitos pero a diferencia de otras oportunidades, en esta ocasión fueron inmerecidos, ya que muchos lectores me acusaron de ensalzar a estos personajes mediáticos cuando lo que yo intentaba era justamente lo contrario a partir de la figura de la ironía.
Aquí unos comentarios de foristas indignados:
– «Gustavo Bolívar un gran pensador??????»
– «Efectivamente es un simple bloguero, que está medianamente informado, basándose en las mismas críticas mediocres del resto del mundo… Y no sé qué filosofía habrá inventado el Gustavo Bolívar (sic) para considerarlo gran “pensador”. La mafia, la droga, las tetas…»
– «Lo que pasa es que el tiempo, Caracol y Rcn y demás prensa mediocre… están ardidos por que se dieron cuenta que la gente del común ya no se deja meter el dedo en la boca… y que asi tengan mala ortografía expresan lo que sienten y eso es lo que cuenta… de malas para ustedes que son una partida de de malos periodistas y resentidos… y no digan que fue un bloguero… sean mas valientes y digan que son ustedes los de su opinión de mierda … y si Gustavo bolivar es un pensador… entonces victor Gaviria es todo un maestro del pensamiento (…) Y si quieren que la gente opine sin juzgar sean más claros en sus titulares y enlaces… periodistas payasos y vagabundos…» (sic).
– «Si Gustavo Bolivar es un gran pensador, Pitbull es un filósofo». (sic)
– «Imbecil, la opinión de muchos es por lo que ve a diario y le ha tocado vivir en esta patria atropellada por la corrupción, la violencia la ignorancia, la alienación ideologica». (sic)
– «…Pensadores?… y eso donde se estudia, quién los tituló o que’!» (sic).
Más allá de la anécdota, me parece interesante el asunto por cuanto le da más peso a la argumentación de mi entrada anterior: Seguramente la equivocación de los opinadores anteriores se debe a que no se detuvieron a leer el fragmento destacado con atención, y mucho menos debieron leer la entrada completa, por lo que sus juicios son ligeros y se producen desde el desconocimiento, que era justo lo que yo denunciaba.
Queridos foristas: Qué bueno sería tener debates a la altura de una lectura detenida y superar por fin el insulto personal, más aún cuando su insulto evidencia que están opinando sin siquiera haber leído el texto que juzgan con dureza. Lamentablemente, como dijo Juan Gabriel Vásquez en una entrevista para Semana, “La gente lee columnas para reafirmar sus odios”.
@andresburgosb