Para nadie es un secreto que normalmente los hombres tenemos un apetito más grande que el de las mujeres; es como si la capacidad instalada de nosotros permitiera digerir más fácil cierto tipo de alimentos que son considerados dentro del término food porn. Eso trae en ocasiones líos cuando invitamos a nuestra novia, esposa, hermana o hasta nuestra mamá porque en el restaurante que elegimos no hay opciones para ellas, teniendo que cambiar la decisión del sitio donde vamos a comer.

En el año 2012 Felipe Ruiz, cheff de profesión y emprendedor por naturaleza, se aventuró a sacar su carrito callejero de perros en Modelia al occidente de Bogotá. Trabajó casi 18 meses a perdida en una esquina del barrio, con las uñas, al sol y al agua, soportando muchas veces las inclemencias del clima. Exploró todo tipo de estrategias, incluso la de salir a regalar hamburguesas para que el publico conociera y se enamorara del buen producto que ofrecía, hasta que dos años después su perseverancia dio frutos al lograr estabilizar su negocio y con mucho esfuerzo logró tomar en arriendo un pequeño local ahí mismo en Modelia (Carrera 82 #22d-05), donde ya había logrado fidelizar un número importante de clientes.

El concepto de Felipe siempre fue crear una hamburguesa para cada apetito, unos voraces y otros no tanto. La intención es ofrecer una excelente relación calidad, cantidad y precio, productos al alcance de todos los presupuestos y bolsillos. Hoy en día la marca tiene en el menú hamburguesas desde $9.500 (100 grs de carne), hasta la más grande de $34.000 (660 grs de carne). Pero como lo dije anteriormente él es chef y no quería limitarse a hamburguesas tradicionales que puede conseguir en cualquier lugar; por eso empezó a innovar, a hacer ensayos de texturas, sabores y recetas que solo su marca pudiera presentar a sus comensales. Un ejemplo claro es la hamburguesa de reducción balsámica, que tiene como ingredientes 220 gramos de carne magra, queso doble crema, tomate, tocineta salteada, cebolla caramelizada, una salsa de reducción balsámica aromatizada con vino tinto y un pan artesanal buns de mantequilla que preparan ellos mismos y que usan en las otras opciones de la carta.

Esta opción de hamburguesa no la consiguen en otro lado y es de lo mejor que yo he probado; también tienen otras recetas originales como la de «carne al limón», la de «pollo queso crema» y la «Maximus» (260 gramos de carne rellena de queso cheddar, tocineta salteada, cebolla morada, tomate y pan artesanal de mantequilla).

Con un concepto claro y unas recetas novedosas, el negocio de XL Gourmet empezó a crecer abriendo puntos en San Andresito y Cajicá, pero por algunas dificultades con los arriendos de los locales y reorganización del POT en el sector tuvieron que ser cerrados. Felipe seguía luchando por darse a conocer abriendo un punto en la zona rosa (calle 83 No 14-14 recientemente remodelado) y en Tuluá Valle, locales que se encuentran actualmente funcionando. Para el año 2019, con mucho esfuerzo y con algunas alianzas estratégicas, abrió sedes en Suba Plaza Imperial (local 2-122 piso 2), Castilla (Calle 8 #72ª-18) y Salitre (hoy sede Normandía: Cr 71c #52-42), esta última sede tuvo que ser trasladada en medio de la pandemia al no llegar a un acuerdo con el arrendador del local. También este año, aproximadamente en el mes de marzo, abrió la sede de Mosquera, Cundinamarca, en el Centro comercial Ecoplaza (Carrera 3 No 15ª-57 Local 7).

Siempre está en búsqueda de nuevas ideas. Con la ayuda de un abogado santandereano que lo invitó a hacer un recorrido gastronómico por Bucaramanga, una de las mejores plazas en lo que a comida rápida se refiere, estuvo una semana visitando restaurantes y probando alrededor de 23 hamburguesas de diferentes tamaños y sabores, que les sirvió para obtener nuevas recetas, como es el caso de la «hamburguesa magnífica» (220 gramos de carne de res, queso doble crema, tomate, cebolla grillé, tocineta salteada, reducción de piña en un sirope de miel y panela con queso costeño rallado, acompañado con el pan artesanal de la casa) que participó en el Burguer Master y logró ser finalista.

Como casi todos los negocios del sector gastronómico, XL Gourmet también fue golpeado fuertemente por la pandemia; no es un secreto que nadie vive a punta de domicilios. En este momento se viene realizando una planeación estratégica mucho más corporativa, con un plan de crecimiento en la medida de la capacidad de logística y producción. Si las cosas mejoran, como todos esperamos, se tiene planeado abrir en el municipio de Chia antes de finalizar el año. Las cosas se están haciendo de la mejor manera, ahora Felipe cuenta con alguien que le está ayudando a estructurar corporativamente el negocio y la marca para que entre en la formalidad y pueda alcanzar un reconocimiento y una expansión sólida. Trabajó juiciosamente en registro de marca, contabilidad, personería jurídica, razones sociales por punto, y está transitando el camino para consolidar la planta de producción.

Siempre me gusta conocer «la historia detrás de», y XL Gourmet es uno de esos casos de emprendimiento que merecía ser contado. Ya lo saben amantes de la comida rápida, que en este caso es hecha con dedicación. Pueden ir a pedir una hamburguesa o un perro caliente que tiene la misma variedad de sabores y tamaños, con la certeza de que encontrarán una experiencia gastronómica novedosa y a su medida.