Existen muchos restaurantes y pastelerías que empiezan con las recetas y las tradiciones de antaño, pero que en el pasado no se hicieron realidad porque era algo más informal, de esas señoras de barrio a las que se les encargaban las tortas de cumpleaños para los niños de la cuadra, o el pavo de fin de año, o la lasaña para ocasiones especiales y celebraciones familiares. Pues así nació también la historia repostera de Rita Echeverría, una furibunda hincha del Unión Magdalena que tenía mucha sabiduría y talento a la hora de hacer pudines, postres y tortas en la ciudad de Santa Marta. Pero Rita solo trabajaba a puerta cerrada y por encargo; y trabajar es un decir no más, porque ella disfrutaba mucho lo que hacía, así que no le daba el menor esfuerzo hacer la mejor María Luisa de la región, o las tortas de matrimonio para esos eventos fastuosos por allá por 1950.

Todo inicia como un hobby antes de los años 90’s, cuando Rita (QEPD), degustaba con sus deliciosos postres en todos los eventos sociales donde participaba. Luego, con el pasar del tiempo, cuando escasamente contaban con una cocina medida, una batidora manual y obra nula, se le fue dando forma al negocio sobre pedido. Una generación después, en 1998 nace Donde Rita a cargo de María Elena Cotes Vives, quien heredó sus facilidades en este arte.

Desde 1998 se ha venido desarrollando la marca, a manera de negocio y sin desmejorar el producto. Ésta goza de mucho prestigio en la ciudad de Santa Marta y sus alrededores.

Las posibilidades al llegar a este lugar, hoy en día son innumerables, puesto que ya no son solo postres; se han especializado en tener excelentes desayunos y otras opciones de sal, también con recetas de la abuela de Caya, como la lasaña que tiene una salsa con receta secreta que no me quisieron contar. Yo les voy a dejar la carta al final del artículo, pero voy a nombrar tres o cuatro cosas que si o sí deben probar si van a Dónde Rita; empiezo por algo que ya había contado, pero que merece mayor reconocimiento, se trata de la María Luisa, un postre que a muchos se les antoja muy dulce, pero que para mi es perfecto para acompañar un tinto, un vaso de leche fría o un chocolate sin azúcar. ¡Es maravillosa! La segunda recomendación es “la arepa koller”, un desayuno con una arepa de maíz cien por ciento molido que lleva mucho queso, salchicha de la casa Koller, huevos revueltos y un muy buen hogao. Después pueden seguir con mini deditos de queso y las mini arepitas de anís, muy tradicionales de la región Caribe, y que sirven perfecto como una entrada para compartir. La lasaña con la receta antigua de la abuela también es una obligación; es una preparación dedicada con láminas de pasta, queso mozzarella, salsa de tomate natural, y por último abundante pollo. Pueden terminar la visita con un buen helado artesanal de kola, tamarindo, corozo o zapote costeño.

Si me pongo a enumerar la cantidad de postres que tienen en el sitio, creo que no terminaría hoy, pero resalto además de la buena María Luisa, el volcán de arequipe, la trufa de chocolate, el New York Cheesecake (guayaba, mora, fresa, corozo y dulce de leche), el tres leches tradicional, el brownie de milo, y por último los buenos macarons que prepara Caya.

Me hubiese encantado hablar con Rita, ponerme a hornear tortas con ellas y hablar de su amado Unión Magdalena. Pero lamentablemente nací en otra época; afortunadamente puedo disfrutar al paladar todo su conocimiento y buen gusto a la hora de meterse a la cocina. Su obra no se perdió en el tiempo. Gracias a Caya por recuperar sus recetas, por hacer de su restaurante y repostería un lugar muy agradable en donde se siente a Rita en todas partes.

Dirección: Carrera 1a No 23-57, stands en centro comercial Buenavista y Prado Plaza.
Instagram: @reposteriadonderita
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