Ha pasado un año desde la firma del Acuerdo de Paz, y hoy se siente un ambiente diferente. Tal vez nos hemos ido convenciendo de que el tema no está en si estamos de acuerdo o no con el acuerdo, o si creo en la paz o no. Se trata ahora de crear paz y esto es lo que nos debe dar unidad de patria. Colombia necesita que todos los colombianos nos enfoquemos en como vamos a construir cultura de paz.
La cultura de paz es aquella que promoverá un modelo de buenos ciudadanos, aquella que contribuye a la creación de ambientes laborales de paz, esa que permeará las comunidades para que florezca la sana convivencia y las relaciones constructivas. Como alguien mencionó, esa cultura que refleje lo que hacemos siempre de manera correcta cuando nadie nos esté mirando. No necesitamos un vigilante para hacer lo correcto. Sólo conciencia frente a lo que se debe y no se debe hacer, pensar, sentir.
Y las organizaciones deberán asumir su rol activo frente a esta construcción de cultura de paz, implementando un sistema de gestión de cultura de paz que cree en la conciencia de los colaboradores un modelo de ciudadano corporativo. La cultura de paz será la clave para construir la colombianidad que nos represente a la mayoría de los colombianos que somos buenas personas, que tenemos comportamientos ciudadanos modelo, que respetamos al otro, que nos reconocemos como individuos dentro de un colectivo al cual cuando acepto ser parte del mismo me comprometo a seguir ese contrato social implícito y tácito que nos exige tener la cédula de ciudadanía de Colombia.
La tarea es ardua pero la recompensa es inmensa. Los invitamos a que juntos construyamos cultura de paz.