En los Estados unidos el partido republican, en la oposición, tiene como único objetivo el bloqueo y descredito de los demócratas, en el gobierno. Lo que llaman unidad nacional no deja de ser un concepto para los shows periodísticos y los discursos de campana. Una vez en el poder la lucha por evitar que el partido opositor logre alcanzar el poder es constante, al igual que la lucha del partido opositor por descreditar y bloquear a quien está en el poder, para poder alcanzarlo

En Colombia el partido liberal y el Polo, en la oposición, utilizan la misma táctica en contra del Uribismo. En España, el Partido Popular hace lo mismo con el PSOE. En Inglaterra los conservadores lo hacen con los Laboristas. Es esto realmente benéfico para la democracia, y más aun, para los países y sus pueblos?

Que haya diferencias ideológicas que se puedan expresar libremente y que se pongan a la libre decisión del pueblo a través del voto, es la esencia de la democracia. Esas diferencias ideológicas enriquecen el debate y permiten que todos, de una u otra forma, tengamos cabida en el sistema democrático. De igual manera, el ejercicio de la oposición es fundamental en la democracia, no solo como elemento de control con el grupo en el poder, sino también como alternativa ideológica y de discusión que puede promover nuevas opciones y soluciones frente a los problemas.

Los partidos políticos son los que aglutinan a las personas que comparten ideologías especificas y les dan una presencia, una voz importante que, mientras más estructurada y amplia, tendrá más peso en el debate político y electoral. Es por ello que, así en el papel hayan decenas de partidos políticos en las democracias mundiales, general mente la contienda electoral es entre los 2 o 3 partidos políticos principales. Los demás hacen oír sus planteamientos y avivan el debate electoral, pero tienen pocas posibilidades de llegar al poder o de influir decisivamente las decisiones del estado.

Ahora, es lo que pasa en los países que mencionamos antes y en muchas otras democracias legitimas, esa lucha constante entre quien está en el poder y quien lo quiere, benéfico para las naciones? El objeto de la oposición se ha distorsionado por la lucha de intereses y poder que existe en la estructura del gobierno. La oposición no busca colaborar con sus planteamientos a lograr mejorar soluciones o para ejercer un sano proceso de control, Las oposiciones actuals buscan entorpecer las acciones del gobierno de turno,. Para que en las próximas elecciones pierda el poder y la oposición pueda llegar a él. Lo vemos claramente con lo que los republicanos hacen en el congreso y con cualquier acción del presidente Obama. Sea o no positiva, aun si es apoyada o no por el pueblo, buscan demeritar y viciar dichas acciones para convencer al pueblo de la inconveniencia de tener a los demócratas en el poder. Es tal el cinismo que, acciones previamente aclamadas cuando el gobierno republicano las tomo, ahora son criticadas porque las toma un demócrata. De igual manera cuando los republicanos estaban en el poder, los demócratas ejercieron exactamente el mismo papel. Es claro que el objetivo es electoral, no el beneficio de la nación.

La existencia de partidos, ideologías y lucha por el poder es fundamental para una democracia sana. La alternación en el poder es también sano para las instituciones, controla la burocracia partidista y la corrupción, pero la oposición política debería ser constructiva, con objetivos electorales pues esa es la naturaleza del proceso político, pero teniendo por encima el interés principal de la democracia y del estado y sus servidores, la nación y su bienestar. Hoy en día la democracia es menos en todas estas naciones porque por encima de la nación parece estar… el partido y su bienestar.