Me pasó algo tan extraño cuando vi el tráiler de este film, de inmediato se me vino a la cabeza Werner Herzog, conocido y polémico director alemán a quien debemos Fitzcarraldo (1982) y Cobra Verde(1988) ambas con ese extraño personaje de la vida real, actor él para el placer de algunos llamado Klaus Kinski.

Ciro Guerra se aventura en el cine igual que lo hacen sus protagonistas en El abrazo de la serpiente, se tira de cabeza al blanco y negro para contar una historia llena de magia, llena de naturaleza, de un vibrar vital en la selva que sostiene la búsqueda de una planta mágica. Y es que el color se hace dentro de lo que se crea, el color y la tonalidad no se da por la escala cromática, sino por la emocionalidad que impera en este tipo de historias. Y seguimos pensando en que esa selva que hemos visto tantas veces en el cine, es una selva ajena. Pero no, es parte de nosotros, cosmológicamente somos hojas de esos árboles que nos pertenecen y a quienes pertenecemos.

Insisto en que el señor Guerra es un aventurero al tener la visión y la entereza de meterse a contar este cuento de la manera en que lo ha hecho y que está acompañado en dicha misión entre proyecto y locura, por aquellos que le han seguido el juego como su productora Cristina Gallego y el actor Brionne Davis, quien ha dejado su mundo de confort y narcisismo (lo digo por su película del 2014, Narcisist) para darle alma, vida y espíritu a través de sus profundos ojos claros a este personaje ansioso e inquietante.

El abrazo de la serpiente llega entonces catalogada como una película de aventuras y misterio, a la que antes le precedieron historias en la selva donde no había esperanza, donde no había salida, donde no había la belleza innegable que se nos muestra en esta. Es fundamental que apoyemos como espectadores este tipo de cine, tenemos en las manos la opción de ver y conocer el tráiler y de esa manera dejarnos contagiar por esa mágica experiencia que ofrece esta historia que estará estrenándose en la segunda quincena de mayo y que esperamos los exhibidores locales le apuesten, de tal manera que vayamos identificando ese verdadero valor que nuestro cine ha ido adquiriendo con el paso de los años, donde no solo se juega con maravillosas locaciones sino que los realizadores más importantes se han ido dando cuenta de la innegable calidad que tenemos en los profesionales dedicados a la industria cinematográfica nacional.