How to Get Away with Murder podría traducirse mejor como “Cómo salirse con la suya” que enmarca mejor el argumento de la serie que el título que se le ha dado en otros países “Cómo defender a un asesino”. Producida por ABC y presentada en América Latina por Sony, es una de las series más inteligentes que se han hecho en los últimos años; no se queda sólo en el drama legal al que podría parecerse, sino que tiene una construcción de personajes de una manera tan concisa que termina uno por tomar unos de ellos y acogerloa, así sin más.

Todos son defectuosos, no hay nadie con el alma pura ni totalmente malvado, todos son inescrupulosos pero a la vez cuidadosos, tal cual somos en la vida real (mis disculpas para los que no) y enmarcados en una investigación de asesinato que los hace tan vulnerables ante las diferentes situaciones que presenta la serie. El primer episodio engancha totalmente, porque uno como espectador se queda sin saber a ciencia cierta qué es lo que está pasando, se siente uno respetado por los guionistas que no entregan todo masticado sino que obligan a que se hagan conjeturas, apuestas, explicaciones y se creen dudas, como si de un verdadero juicio se tratara.

Apoyados por Viola Davis, una de las mejores actrices de los últimos tiempos, el elenco cumple con lo suyo en un trabajo coral impecable. Si no ha visto la primera temporada ya está disponible en los canales comerciales de televisión por internet y les aseguro sin temor a equivocarme que es de la producciones más inquietantes que se hayan visto hasta ahora. Atrás quedaron los programas de abogados en los que todo era recto e impecable y de detectives comprometidos con una verdad absoluta… ¡Sayonara, Barnaby Jones!

El canal Caracol acaba de estrenar una serie llamada La esclava blanca ambientada en el siglo XIX, en pleno auge de la rebelión de esclavos en Colombia contando una historia que parece conocida sobre una joven llamada Victoria que regresa de España a vengarse de sus enemigos y lo hará de la manera más inesperada (¡!) pero lo bello no es esa historia de venganza despiadada protagonizada por la española Nerea Camacho, a quien todos recordamos por la película Camino. La producción es impecable, se nota la calidad con la que se ha realizado obviamente con el objetivo de ser exportada a otros países y develando una inusitada belleza en esa historia de palenques, conventos y casonas. Vale la pena apreciar la belleza de la fotografía y la enorme calidad con que fue concebida esta serie.

Pasando de canal sigue al aire Anónima, estelarizada por Verónica Orozco y producida por SONY y Teleset, lo que le ha permitido la entrada a otros canales que la emiten en diferentes países, mostrando una historia enmarcada en el engaño, la corrupción, el crimen pero ante todo en la esperanza. Eso hace que esta producción mantenga a tantas personas cautivas, cada capítulo es trepidante en su concepto pero sobre todo permite echarle una mirada a esa realidad que a muchos ha cobijado en este país… literalmente. ¡Seguimos haciendo zapping!

@leonardopineda