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Manuel Antonio muy seguramente nunca pisó un estadio de fútbol, se hubiera muerto al presenciar todos los gestos, las expresiones, las groserías que se dicen en las tribunas .

Para Manuel Antonio las cosas tenían que hacerse al derecho y guardando las formas más elementales y las reglas sobre buenos modales, fundamentales (según él) para relacionarse en sociedad , para Manuel Antonio , morderse las uñas, sentarse con las piernas separadas o con las piernas cruzadas o torcidas de una manera poco convencional, masticar chicle mientras se hablaba, rascarse o pellizcarse la cara, comer ruidosamente haciendo gestos exagerados, decir groserías eran comportamientos de muy mal gusto que había que erradicar.

Seguramente a Manuel Antonio no le hubiera parecido nada gracioso que un coro de más de 300 personas le gritara “bruto” a un ser humano que se equivocó en tomar algunas determinaciones aunque estas al final (al parecer ) no le salieron tan mal como la gente pensaba , pero tampoco a Manuel Antonio le hubiera parecido muy decoroso el gesto que este ser humano le hizo a sus detractores.

A Manuel Antonio le gustaban la decencia y las buenas maneras y el domingo esas buenas maneras brillaron por su ausencia.

Nadie es más o menos hincha de fútbol por que grite, salte o cante todo el partido , el fútbol es un deporte que concentra multitudes y a las multitudes es muy difícil ponerlas de acuerdo.

Los entrenadores de fútbol saben que su profesión es una de las más difícil, ingratas y jodonas que existen en este mundo , el técnico responde por sus actos y por los actos de sus dirigidos así el no lo quiera.

El fútbol es su trabajo, y deben hacerlo bien y es el publico es que determina si lo hizo bien o mal aunque al final quien responderá será el técnico que vive siempre la disyuntiva de ser ídolo o villano.

Si ganan con decisiones erradas al publico no le importa ya que al fin y al cabo a la gente le interesa es que su equipo gane a toda costa y como sea, pero si de las decisiones que la hinchada considera malas el equipo recibe un revés , el monstruo de las mil cabezas no perdona y se les olvida que los técnicos son seres humanos y como tales tienen derecho a equivocarse.

El Señor Hernán Darío Herrera ayer en la rueda de prensa planteó una nueva lógica , el estratega paisa estratificó la afición , para Herrera “los pobres” y “los que gritan” son más hinchas que los que no gritan ni saltan, para Herrera ser hincha es aceptar todo y no criticar las determinaciones del técnico, ser Hincha para “el Arriero” es ser autómatas .

Esto dijo Hernán Darío :” Yo soy el que manejo el equipo, equivocado o no gané , con respecto al gesto a la tribuna, acá se viene es a apoyar al equipo no a maltratarlo ,estamos en una situación difícil y hay que apoyar al equipo, no lo critiquen ¿ Por qué los pobres de allá (Sur) por qué están gritando, Por qué los de acá (Sombra) no gritan ? .

Señor Herrera , hay gente capaz de ver y analizar el fútbol desde un punto de vista "objetivo" , personas que al igual que un técnico miran el partido tanto táctica como técnicamente, pueden discernir, reconocer errores y tienen la capacidad de critica , ven el fútbol con más razón que pasión.

Usted mismo reconoce que se puede equivocar, que no es infalible y todo comportamiento discriminatorio u ofensivo es errado desde todo punto de vista ya que todos somos hinchas aunque veamos las cosas de diferentes maneras .

No acolito el comportamiento del grupo de hinchas que ofendieron al técnico poniendo en entredicho sus conocimientos y de cierta forma entiendo la actitud del estratega en la calentura del partido, pero ya con cabeza fría, debe Usted reconocer que se equivocó no en los cambios,  pero si en exigir que todos los aficionados vean el fútbol a su manera y se abstengan de criticar sus determinaciones.

No estoy de acuerdo cuando se pretende por parte de Usted que los hinchas traguen entero , tampoco estoy de acuerdo con la distinción que se hace de la hinchada, decir que los hinchas verdaderos son aquellos que brincan, saltan y gritan todo el tiempo a pesar del resultado y del juego errático del equipo es una mentira tan grande como decir que el hecho de que se brinque y se salte todo el tiempo hará que nuestro equipo gane a pesar de los errores de una defensa que hace aguas, de unos arqueros que hoy juegan un partido de ensueño y en el partido siguiente son unas verdaderas coladeras , de unos volantes de contención que no contienen a nadie, de unos creativos laguneros y de unos delanteros que cuando están inspirados la meten desde sitios imposibles pero que cuando no están en su tarde no le meten un gol ni al arco iris.

Creo que usted debe preocuparse más por hacer su trabajo y hacerlo bien, el equipo debe ganar para salir de esa incomoda posición. En los partidos de visitante tendrán que enfrentarse a hinchadas más ofensivas y hostiles que aquella que le gritó ”bruto” y es allí cuando se va a ver si verdaderamente tienen las gónadas bien puestas.

Haga su juego y no le pare tanta bola a la tribuna, sáquenos de este hueco y luego pase la factura, no cree divisiones, no haga política, de nada vale que una parte de la afición lo idolatre si nos vamos para la B, de nada vale que una parte de la tribuna lo considere “bruto” si descendemos incluso ,si descendemos por estar pendiente a que unos saltan y otros no, lo más probable es que le de la razón a aquellos que cuestionan sus conocimientos como técnico .

Esta es su oportunidad histórica de ratificar que es un buen técnico, el otro año cuando nos salvemos de este trance, arme su equipo con los jugadores que Usted considere, busque revancha y llévenos a las posiciones de vanguardia , saque pecho y señale a sus contradictores pero ahora necesitamos más resultados y menos soberbia.

Tanto a Hernán Darío Herrera como a esa fracción de la afición que se olvidaron del decoro y de los buenos modales , toca recordarle que Manuel Antonio Carreño escribió un librito que desafortunadamente hoy está en desuso y menos mal que este insigne hombre ya falleció porque si el domingo hubiera estado en el Jaime Morón y hubiese oído todas las expresiones que se dijeron y hubiese visto los gestos que Herrera le hizo a la tribuna, muy seguramente el buen Manuelito se habría caído para atrás junto con su constructivo Manualito.

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