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El turismo gastronómico es uno de los sectores que más auge está teniendo en la última década y cada vez son más los turistas que no solo buscan disfrutar de los monumentos de un ciudad o país, sino que también quieren degustar sus platos típicos. Pero no todas las recetas que encontraremos van a ser del gusto de todos, descubriendo alimentos que ponen a prueba nuestro estómago. En este listado hemos seleccionado los platos de comida más raros del mundo con los que te sorprenderás.
Tarántulas fritas
Al igual que en la provincia de Cádiz es muy habitual el famoso pescaito frito, en muchas regiones asiáticas te puedes encontrar con uno de los platos más extraños que hemos descubierto. Se trata de las tarántulas fritas, aunque también se suelen vender otro tipo de arácnidos e insectos. Según el lugar en el que las pidas, te las podrás comer incluso con un rebozado de ajo y perejil. Realmente es un plato para estómagos fuertes que quieren experimentar con alimentos muy diferentes y exóticos.
Sannakji
Este plato es todo un espectáculo, aunque no todo el mundo se atreve con él. El ingrediente principal son pulpos de pequeño tamaño que se consumen vivos con una salsa realizada con aceite de sésamo. Cuando intentas agarrarlos con el tenedor o con los palillos chinos, empiezan a moverse de un lado a otro, siendo muy complicado su degustación, ya que los tentáculos suelen intentar salir de la boca o agarran la lengua del consumidor. Nosotros preferimos comprar pulpo en el supermercado online Lola Market y hacer un tradicional pulpo a la gallega, que es más sabroso y menos peligroso.
Gusanos
Uno de los platos más raros y que con total seguridad sería una delicatesen para el aventurero Bear Grylls son los gusanos. En Tailandia se considera uno de los alimentos con más sabor y que, además, cuenta con un valor proteico muy alto. Su modo de preparación es frito o incluso al horno, aunque otros cocineros lo rebozan o incluso lo utilizan como ingrediente para otros platos como tortillas, ensaladas o para realizar galletas. Es habitual pasear por los mercados tailandeses y que te lo vendan al peso comiéndoselos por la calle como si para nosotros fuesen las pipas de girasol.
Sándwich de cerebro
Aunque puedas pensar que se trata de otro de los platos típicos asiáticos, estás equivocado, ya que este bocadillo se sirve en Missouri y tiene gran aceptación entre sus habitantes. Según el restaurante a donde vayas te lo podrás encontrar con un corte más elegante o gourmet, aunque lo más habitual es consumirlo como si se tratase de una hamburguesa. El ingrediente principal son los sesos de ternera fritos, buscando conservar el aspecto para crear una mayor impresión al comensal. Respecto al sabor, cuando te has quitado la imagen de la cabeza de lo que estás comiendo, te viene un toque muy delicado, suave, aunque con una textura gelatinosa. En otros países también cuentan con platos en los que su ingrediente principal son los sesos, como México, sin embargo, ellos lo preparan en tacos o burritos con diferentes salsas.
Camello relleno
Un plato digno para el galo Obelix ya que nos encontramos con un plato que ha ganado el record Guinness por ser el más grande de todo el mundo. ¿De qué está relleno este camello? Pues bien, nos encontramos dentro de este un cordero, también entero, pero para mejorar la receta, dentro de este último hay un total de veinte pollos que han sido rellenados previamente de arroz cocido y huevos duros. Debido a toda la carne que tienen en su interior y de las dimensiones del camello debe hacerse a fuego muy lento para que todo quede en su punto. Cabe destacar que solo se realizan cuando hay una gran fiesta o hay muchos comensales porque no está pensado para una cenita romántica.
Haggis
Su aspecto quizás no invite demasiado a probarlo, pero su sabor es intenso y especiado. Se trata de un plato cuyos ingredientes son los pulmones, el corazón e hígado de oveja, todo ello condimentado con muchas hierbas y especias que es lo que le dan el sabor, junto con harina y cebolla. Toda esta masa se introduce en un estómago del mismo animal para cocerlo. Se podría decir que es una variación escocesa de la morcilla, pero con un tamaño mucho mayor. Este plato suele acompañarse con una buena copa de whisky y un puré de patatas, pero debe ser degustado por varias personas, porque es de esas recetas contundentes que te dejarán saciado al momento.
Queso Casu marzu
Casi todo el mundo es amante de los quesos y cuando se tiene la posibilidad de disfrutar de los quesos de otras regiones del mundo, sin duda se degustan. Sin embargo, puede que con el queso Casu marzu hagas una excepción, puesto que, tal y como su nombre indica, se trata de queso podrido. Su origen se encuentra en la isla de Cerdeña y es muy conocido en esta región. Su sabor suave es debido a la acción de decenas de larvas vivas que se introducen dentro del propio queso, las cuales pueden llegar a medir unos 15 centímetros de longitud. Al introducirse dentro del queso, las larvas se van alimentando fermentando el producto desde dentro. Una vez pasado el tiempo de cura, el queso queda por dentro muy suave e incluso líquido, pero para los habitantes de Cerdeña es una auténtica delicia, aunque nosotros nos quedamos con el habitual queso curado.
