Son muy pocas las personas que conocen cuáles son sus derechos y qué tipo de indemnización pueden cobrar en función del accidente en el que se han visto envueltas. Es de vital importancia que los ciudadanos conozcan qué pueden exigir en este tipo de situaciones, ya que se trata de una circunstancia grave en la que se requiere algún tipo de compensación por los daños sufridos. Evidentemente, esto significa que una indemnización está atada a ciertos criterios, por lo tanto, solo podrás cobrarla si cumples dos requisitos básicos y bastante evidentes: en primer lugar, que hayas acabado lesionado durante el accidente, y, en segundo lugar, que este no haya sido culpa tuya. Si tú eres el causante del accidente, no tendrás derecho a cobrar una indemnización, por mucho que hayas salido herido.

Con respecto a la culpa, existen factores que pueden afectar a la indemnización. Si el accidente ha sido exclusivamente culpa tuya, la aseguradora no tiene la obligación de indemnizarte. Si la culpa no ha sido tuya, la indemnización debes cobrarla, pero si, por ejemplo, existe un tercer escenario en el que la culpa es compartida, tendrás que contratar a un abogado externo para que analice cuál es el porcentaje de culpa que te corresponde, ya que será esa cifra la que se presente ante la aseguradora para cobrar la parte correspondiente.

Lo cierto es que recurrir a un abogado externo para conseguir cobrar una indemnización es la mejor opción desde el principio, porque las aseguradoras, por norma general y ateniéndose a su convenio salvavidas, rara vez conceden una indemnización justa en proporción al accidente. Si has sufrido un accidente y has salido mal parado, lo mejor que puedes hacer es contactar con IndemnizacionPorAccidente.com para que te ayuden a conseguir la indemnización que mereces. Sea como fuere, es muy importante que, como mínimo, conozcas de antemano los derechos que tienes y la indemnización a la que puedes aspirar en caso de accidente, para así tener una base sobre la que recibir asesoramiento y apoyo legal.

Derechos e indemnización en caso de accidente de tráfico

Existen varias maneras de vivir un accidente de tráfico. Anteriormente te he hablado de cuáles son las condiciones para cobrar una indemnización en caso de que tú seas el conductor, ya seas el culpable o no, pero si eres un pasajero y te ves envuelto en el incidente, tendrás derecho a una indemnización independientemente del culpable del mismo. Asimismo, si el accidente que has sufrido es que te han atropellado, como peatón lesionado tienes derecho a cobrar una indemnización, pero si ha sido por tu culpa – si estabas cruzando en rojo o por un lugar por el que no podía cruzarse – cobrarás un porcentaje inferior.

Aun con todo, al sufrir un accidente se tienen derechos más allá de la indemnización, y a ellos puedes aspirar tanto si eres culpable como si no. En caso de estar lesionado a causa de este, se te deben conceder los llamados días impeditivos, en los que no puedes realizar tus tareas habituales debido a las lesiones, y, más tarde, los días no impeditivos, en los que podrás acudir al trabajo, pero tu condición es limitante. Todo esto forma parte del proceso de recuperación tras un accidente de tráfico, y tienes derecho a ellos aun cuando no tengas derecho a cobrar una indemnización.

En caso de que tengas derecho a una indemnización, debes contar con un abogado especialista para poder asegurarte de que cobras una indemnización justa, en base a lo que te mereces. Son las aseguradoras las que pagan estas indemnizaciones, y son bastantes los requisitos en los que se basan para abonar una cuantía u otra. Los daños materiales es lo primero en lo que pensamos, puesto que en un accidente de estas características es normal que nuestro coche o moto acabe maltrecho. Con respecto a esto último, si has sido el culpable del accidente y no vas a recibir nada para rehabilitar tu vehículo, lo mejor que puedes hacer es recurrir a Motor10.top para comparar las piezas que necesitas para restaurarlo, ya que es la única manera de ahorrar dinero si no vas a cobrar indemnización.

No obstante, este tipo de daños no son los únicos que contemplan para realizar el cálculo, aunque de esto es probable que tengas que asegurarte tú junto a tu abogado, ya que los otros requisitos pueden ser subjetivos. De la mano de los daños materiales encontramos los daños morales, que son aquellos causados por las consecuencias de nuestras lesiones. Si, por ejemplo, eres estudiante, y a causa del accidente tienes que perder casi un curso entero de clase, se considera un daño moral porque estará obligándote a repetir el curso, y deberá abonarse una cantidad significativa para cubrir esos daños. Por otro lado, las secuelas y el perjuicio estético son también conceptos que se valoran a la hora de indemnizar, y cuando más joven se es más cantidad debe sumarse a la indemnización.

Tener secuelas graves a causa de un accidente de tráfico puede empeorar notoriamente la calidad de vida de una persona, de ahí que deba contemplarse dentro del precio a pagar. Es tu derecho como ciudadano y, sobre todo, como víctima, en este caso, el obtener una indemnización acorde a los daños ocasionados, y no debes conformarte con menos solo porque las aseguradoras quieran cubrirse las espaldas.