Cuando no disponemos de mucho espacio en casa tenemos que buscar maneras innovadoras de decorar las habitaciones más pequeñas, de manera que sean agradables y eficientes al mismo tiempo, pero no siempre resulta tan fácil como suena. El baño es una de las habitaciones de la casa más importantes, ya que gran parte de nuestra rutina se desarrolla en él, de ahí que sea tan importante optimizar al máximo el espacio del que disponemos.
He conseguido reunir 9 ideas para decorar baños pequeños que te serán muy útiles para sacarle el máximo provecho a tu baño, tanto si te interesa hacer una reforma como si no, ya que muchas de estas ideas son perfectamente accesibles si solo quieres redistribuir tus muebles y conseguir un espacio más eficiente.
Recurre al plato de ducha
Contar con un plato de ducha puede ser la idea más eficiente para ahorrar espacio, ya que las bañeras por norma general ocupan más. Además, no es necesario tener mucho espacio para conseguir integrar un plato de ducha con puertas de cristal, ya que solo hace falta dividir la estancia y acercar un poco más el resto de elementos para aprovechar al máximo el espacio. Los estantes y toalleros se pueden colocar encima del inodoro o del lavabo para no tener que ocupar más pared de la necesaria, y puede ser toda una ventaja tener todos los elementos tan a mano.
Aprovecha la luz
Cuando tenemos un baño pequeño, una de nuestras prioridades es conseguir que parezca más grande de lo que realmente es. Es evidente que es una de las pocas habitaciones en las que no podemos eliminar ninguno de los muebles, porque son todos esenciales, así que nuestra jugada estrella en estos casos es jugar con la iluminación.
Si nuestro cuarto de baño tiene una ventana y podemos inundar la estancia con luz natural, eso dará una sensación de mayor amplitud. En esta misma línea, pintar las paredes de color blanco o instalar azulejos claros también sumará a la sensación de espacio, por lo que un truco muy práctico para que nuestro baño parezca más grande es evitar los tonos oscuros.
Escoge bien tus muebles
Si aun con todo te gusta más la idea de tener una bañera para poder disfrutar de baños largos y relajantes, existen formas muy prácticas de incluir una bañera en un cuarto pequeño sin por ello tener que renunciar al espacio. Es todo cuestión de organización. Lo ideal es colocar la bañera en una de las esquinas, tanto para facilitar la toma de agua como para que no reste espacio al resto del baño. El lavabo no tiene por qué ocupar mucho espacio, ya que siempre puedes optar por colocar un pequeño armario empotrado que te permita almacenar todo lo que necesitas.
Eso sí, tendrás que tener en cuenta el tamaño de la bañera antes de instalarla, puesto que hay alternativas que te resultarán mucho más cómodas que otras, tanto por sus medidas como por su forma, y nunca está de más valorar todas las opciones.
Reduce el espacio libre
Esto puede parecer una medida incómoda, pero no tiene por qué serlo. Basta con disponer del espacio necesario para poder arreglarnos frente al espejo o salir de la ducha sin tropezar. Al fin y al cabo, si no tienes mucho espacio lo más práctico es recurrir a aprovechar lo que tienes en su máxima medida, y es evidente que tienes que tratar de incorporar todos los elementos de la manera más organizada posible, así que no tengas miedo a juntar algunos muebles y consigue aumentar la eficiencia con mucha más facilidad de la que imaginas.
Aprovecha las partes no visibles
La parte de detrás de la puerta es un buen ejemplo de esto. Como puedes ver en esta imagen, se trata de un baño muy sobrio y con muy pocos elementos, pero está todo lo que se necesita, incluso una bañera. El motivo por el cual está tan bien organizado y parece más grande de lo que es se debe a que no han incorporado demasiados elementos adicionales, por lo que la sensación de amplitud es mayor.
Los toalleros se pueden colocar cómodamente detrás de la puerta, y si quieres una opción más accesible para cuando salgas de la ducha, puedes colocarlos junto a la puerta y aprovechar ese hueco para colocar un pequeño armario en el que guardar todo lo que necesites.
Utiliza mamparas de baño
Las mamparas de baño se han convertido en el mejor aliado de la decoración de baños, no solo de los baños pequeños sino de todo tipo, ya que suponen un complemento práctico y elegante que añade sensación de espaciosidad y distinción a cualquier baño. Las mamparas de ducha frontales funcionan especialmente bien con platos de ducha, que, como has podido ver, son también grandes aliados para decorar baños pequeños.
Una de las principales ventajas de las mamparas de baño es que son correderas, por lo que no tendrás que preocuparte por abrir o cerrar puertas, acción que, quieras que no, ocupa cierto espacio en el baño (espacio del que tal vez no dispones), y su ventaja frente a las clásicas cortinas es que son mucho más seguras.
En la sencillez está el gusto
Hay opciones muy prácticas, modernas y bonitas que pueden hacer de tu baño una estancia cómoda y agradable, aunque no sea especialmente grande. Si buscas una manera de añadir un toque decorativo a tu baño, sin tener que mover los muebles o redistribuir ningún elemento, siempre puedes añadir estanterías originales en las que colocar toallas, recambios de jabón o incluso elementos decorativos como granos de café o piedras de playa. No es necesario hacerse con un mueble de grandes dimensiones o muy ancho, basta con encontrar una estantería pequeña y acorde a nuestro estilo para añadir ese toque de color que queremos en el baño.
Añade una pared de espejo
Puede que parezca algo estrambótico, pero lo cierto es que añadir una pared de espejo aportará mucha más espaciosidad, ya que no se concebirá esa pared como un límite sino como una continuación del baño. Es un efecto visual práctico y muy inteligente, que no tiene que ver con la redistribución de los muebles, pero que te permitirá disfrutar de una sensación más agradable cuando utilices tu baño, sintiéndote en un espacio más amplio y cómodo.
Opta por lavabos pequeños
Muchas veces creemos que lo que más puede molestar al a hora de distribuir un baño es la bañera o el plato de ducha, pero lo cierto es que en más de una ocasión lo que puede resultar más incómodo es el lavabo. No es necesario optar por un lavabo ostentoso con una estructura demasiado ancha, como es el caso de muchos modelos, sino que las más de las veces basta con conseguir un modelo más sencillo que se pueda incorporar directamente a la pared o que se pueda colocar sobre un mueble que tenga, también, otro fin.
Si tu objetivo es buscar la máxima eficiencia con un estilo acorde a tu personalidad, sabrás que no necesitas disponer de un lavabo demasiado grande para decorar tu baño. Basta con encontrar un modelo práctico y con el tamaño justo, y si recurres a uno con esas características tu baño lucirá perfecto sin perder eficiente.