Con un solo retazo de triple unido a su ingenio, Pachito puede fabricar con sus manos y sus herramientas la figura de un músico de salsa o hacer en miniatura una tornamesa con todos sus detalles, un par de bongoes, un piano o un cubanito.
Su trabajo que delicadamente hace en su taller ubicado en su apartamento se ha exhibido en la Feria de Cali, en los Salsa al Parque de Bogotá, en los diferentes encuentros de melómanos y coleccionistas de la capital y en las Maratones Salseras, entre otras.
Se podría afirmar que todo salsero en Bogotá tiene en su casa por lo menos una figura hecha por este artista.
¿Cuántos años en este oficio?
Con las artesanías empecé hace 20 años por la necesidad de trabajar, pues me quedé sin empleo. Lo primero que hice fue unos cuadros, luego seguí con las figuras. Mi inspiración para los muñecos fue la imagen del flautista que está en la caratula de un trabajo discográfico de Jhonny Pacheco. Al detallarla la vi muy sencilla y decidí ponerle instrumentos. Terminé construyendo toda la orquesta y la bauticé como Los Muñequitos de Matanzas. Eran de 50 centímetros de alto y fueron pensados para decorar las tabernas salseras de Bogotá. Durante muchas noches de viernes y sábado viajaron en una maleta de arquitecto hasta que encontraron un dueño.
¿Quién fue ese primer comprador?
Fue Charles ‘Pachanga’ dueño de un bar en el barrio Bachué. Los muñecos eran fluorescentes y brillaban en la oscuridad. Otros lugares en los que estuvieron las figuras fueron en Boricua Salsa Bar, de James Ortega; La Corredera y Siguaraya.
Esos muñecos se popularizaron en un tamaño más pequeño…
Sí, y se convirtieron en cuadros. De esos muñecos más pequeños nuestro primer cliente fue Ómar Antonio, quien era el locutor del programa El Túnel del Ritmo de la Radiodifusora Nacional de Colombia.
¿Quién lo bautizó el artesano de la salsa?
Orlando Pinilla, él le dijo a Ómar Antonio que yo era el artesano de la salsa y así, poco a poco se empezó a dar a conocer mi profesión.
¿A qué artistas salseros les ha vendido sus figuras?
A Jossie León, Alfredito Linares, Tony Molina y Orlando Marín. Ellos me pidieron otro tipo de figuras y por esto nacen los gramófonos en réplicas y las tornamesas en madera, al igual que las carátulas de acetatos.
Sabemos que tiene un reconocimiento bien ganado entre los salseros de Bogotá, pero ir a Cali fue uno de sus triunfos como artesano…
Ir a esa primera Feria de Cali hace ocho años fue maravilloso. Al principio compartí stand con otros comerciantes, pero hace tres años tengo el mío propio y se llama El Artesano de la Salsa. Mi mayor satisfacción es cuando un cliente me compra mi producto y pienso que vale la pena seguir luchando por hacer algo diferente para la industria de la música y en especial de la salsa.
Bogotá, Cali, ¿qué plaza sigue para Pachito?
Mi sueño es ir con mis productos al Día Nacional de la Salsa en Puerto Rico y representar a Colombia.
¿Cuánto tiempo demora en hacer un cuadro?
Puede tardar dos días dependiendo de la dificultad del cuadro, ya que estos van calados en madera y hay que hacer parte por parte para que la figura no se pierda. Pero si es una conga o una tornamesa o un gramófono es más demorado porque hay que construirlos parte por parte, pintarlos y cada detalle toma más tiempo. Todo lo hago a mano, no tengo máquina eléctrica para realizarlo, solo corto los materiales, los lijó, pintó y empacó y eso hace que el trabajo tenga más calidad y valor.
¿Hay alguna figura difícil de hacer?
No, solo hay que tener mucha paciencia y con el talento que Dios me regaló no hay nada complejo.
¿La gente en dónde lo puede ubicar para comprarle sus trabajos?
Por Facebook: Pachito Duque, El artesano de la salsa, y en Instagram: @elartesanodelasalsa
También colecciona música en long play…
Sí señor así es y disfrutó la música con mi pequeña colección de discos que comparto con mi hija y mi nieta.
@CeronBstidas