El próximo 28 de septiembre se estrena a nivel nacional el documental Viva Edy, la historia de una música indestructible, del cineasta caleño, Carlos Ospina. En él cuenta la historia del músico colombiano Edy Martínez, oriundo de Pasto y quien hizo parte de las orquestas de Ray Barretto, Mongo Santamaría, Ángel Canales entre otros.
Este virtuoso del piano es de los artistas más representativos de la salsa y del jazz latino y en este documental hay entrevistas con Bobby Valentín, Willie Rosario y Luis Perico Ortiz, quienes califican a Edy como un maestro de la música. Carlos duró cerca de nueve años trabajando en este bello producto que para los entendidos es una historia que se tenía que contar. Cabe recordar que Carlos Ospina es el dueño de La Topa Tolondra, un bar clásico en la ciudad de Cali.
¿Desde hace cuánto rondaba la idea de hacer un documental de Edy Martínez?
Siempre he admirado a Edy Martínez y conocía parte de su historia. Un día él apareció en la Topa Tolondra y un amigo me lo presentó, le dije, maestro espéreme aquí voy por una cámara para tomarle unas fotos. Mientras le tomaba las fotos me contó que se había venido de Nueva York y estaba viviendo en Pasto. Aproveché y lo invité a un evento de melómanos en el que solo se escuchó música de él y desde ese momento empecé a grabarlo, a seguirlo y a la vez a investigar sobre su vida. Él me empezó contar cosas de su trabajo, de su legado y de su vida en Nueva York con los grandes artistas de la Fania, esto me pareció una historia fascinante y cuando me di cuenta ya tenía un material bien importante y entonces pensé en la posibilidad de hacer un documental. Desde eso ya han pasado nueve años.
En el trailer vemos varias entrevistas con músicos, cuéntenos de eso….
En el 2020 y en plena pandemia, TelePacífico decide hacer parte del proyecto y logramos financiar el viaje a Nueva York donde logramos entrevistas con artistas de la talla de Gilberto ‘el Pulpo’ Colón, quien fue pianista de Héctor Lavoe, Adalberto Santiago, Tito Allen, entre otros, a esto se sumaron otras entrevistas que ya se habían hecho en Puerto Rico con Bobby Valentín, Willie Rosario y Luis Perico Ortiz, lo que iba enriqueciendo la historia. También encontré detalles desconocidos de Edy, ya que mucha gente solo sabe de sus trabajos con Ray Barretto y Mongo Santamaría. Algo que me pareció muy importantes es la manera en la que estos músicos se refieren a Edy, unos le llaman maestro, otros pionero y otros talentoso.
¿De este trabajo, qué fue lo que más lo sorprendió?
Tal vez el tema que más me impresionó en el transcurso de esta grabación es que en plena pandemia, Edy casi se nos muere, y eso está reflejado en el documental. Hay una parte en donde mostramos escenas en las que él está convaleciente en un hospital en Bogotá. Sobrevive a ese momento difícil para seguir haciendo música y es así como en pleno rodaje él graba el trabajo musical Travesía y Legado, en los estudios Egrem, de Cuba.
¿Cuál ha sido la impresión de la gente que ya ha tenido la oportunidad de ver la película?
El documental, para la familia y para la gente no tan cercana y extraños ha sido de orgullo porque luego de verlo se sorprenden de lo grande y desconocido que es el legado de Edy. En este documento fílmico queda explícito que él es uno de los músicos más importantes en el ámbito de la salsa a nivel mundial y quizás el más importante en el medio del latin jazz, porque él, ante todo, es jazzista.
¿Qué lo motivo a usted a hacer este documental?
Una de las tantas cosas que me motivo es saber que el maestro era empírico, autodidacta y qué de niño, a medida que aprendía a leer iba aprendiendo a escribir partituras. Su papá que era músico le compartía elepés de música clásica tocada por Stravinsky y otros maestros, pero también oía música criolla de Mongo Santamaría, Tito Puente o Tito Rodríguez y lo más impresionante fue saber que él llegó muy jovencito a Nueva York y tocó con sus ídolos, eso me pareció importante contarlo.
¿Cree que los colombianos o los salseros estamos en mora de hacer este tipo de documentos fílmicos a otros artistas?
Creo que en Colombia y no solo en el campo de la música, también en el de las letras, la pintura, el cine han existido compatriotas que tiene un trabajo extraordinario que merece ser contado. Creo que cumplo con contar una historia que no solamente habla del trabajo de un músico importante, sino que también es una historia mágica porque va muy arraigado al campo de lo lirico, de la fantasía, de lo fantástico, de la premonición, del destino, todo esto trazado de alguna manera y eso me parece importante y sí sería bueno que otras personas cuenten la historia de nuestros propios personajes y así honrar su legado.
Sabemos que el documental se estrena en las salas de cine este 28 de septiembre…
Así es y será en simultánea nacional. Procuraremos estar con el maestro tanto en Bogotá, en Cali y posiblemente en Pasto para hacer una velada bonita con conversatorio y que la gente lo conozca y reconozca. Esperamos que todos disfruten de esta historia.
Hablemos de Carlos Ospina…
Tengo 48 años, he sido empírico en el tema de administrar un bar; en lo de hacer cine soy autodidacta. Desde niño he pintado y esto ha hecho que este muy cerca de las artes plásticas. Desde los tres años de edad veo cine, ya que mi madre se casó con un español y él era cinéfilo y gracias a eso alcancé a vivir la etapa bonita del autocine y desde siempre idealicé hacer ese arte. Muchos han soñado con ser astronautas, jugadores de futbol o médicos yo lo que siempre quise ser fue director de cine.
Cuéntenos de la Topa Tolondra, el bar salsero de Cali…
Sí, la inauguré hace 12 años y empezó como un espacio pequeño para compartir con amigos el disfrute musical salsero y aproveché mi amor por el cine para combinar estas dos pasiones.
¿Cuántos trabajos fílmicos ha realizado?
Tres: el primero es Entre la sombra y el alma es el primero y trabajó el actor Álvaro Rodríguez. Es la historia de un bailarín de semáforo que danza con una muñeca. Él idealiza su amor con esa figura y habla de la soledad y el desamor.
La otra se llama La sombra de tu sonrisa, se trata de la cofradía de payasos sicarios que es una metáfora de país y en la cual un niño se adentra y se enamora de una niña del circo, es protagonizada por Julián Díaz, actor de teatro radicado en Bogotá, Marleyda Soto, actriz de teatro caleño.
El otro corto se llama A las 9 es la cita y es la historia de un taxista veterano que debe vez en cuando hace paseos millonarios con la ayuda de dos bandidos y tiene un amor imposible de una señora que trabaja en un granero de barrio. Es protagonizado por el maestro Germán Jaramillo, actualmente radicado en Nueva York, también están Alina Lozano y Manuel Sarmiento. El otro trabajo es la película sobre la vida del maestro Edy Martínez, ha obtenido cuatro premios. Todos los cortometrajes los he escrito, producido y dirigido.
@CeronBastidas