El Museo de la Salsa de Cali está ubicado en el primer piso de una casona del barrio Obrero y dentro de este bello espacio cuyo piso está adornado por baldosines negros y blancos y en sus paredes reposan miles de fotografías de artistas salseros que en algún momento visitaron la capital del Valle del Cauca,  entre ellos Celio González, Héctor Casanova, Johnny Pacheco, Héctor Lavoe, la Sonora Matancera en pleno, el Gran Combo de Puerto Rico y muchos más.

Carlos Molina Jr. en El Museo de la Salsa

También hallamos en este mágico lugar un vestido de ‘La Guarachera de Cuba’ Celia Cruz, traje que usó en algunas de sus cientos de presentaciones en el mundo entero, al igual que varios bustos con el rostro de Daniel Santos y un disco de oro que les donó el mismo Roberto Roena, además de instrumentos musicales, figuras, discos, un sombrero que donó Justo Betancur, las maracas de Machito, baquetas de Willie Rosario, Tito Puente y otros timbaleros.

Este espacio de cultura es dirigido por Carlos Molina Jr., hijo de Carlos Molina, más conocido como el fotógrafo de la salsa. “Mi papá empezó desde 1968 a documentar la historia de la salsa en Cali, en esa primera ocasión fue cuando vinieron Richie Ray y Bobby Cruz y de ahí en adelante fotografió a todas las orquestas que visitaban la ciudad”, destacó Molina Jr.

Pero este museo no solo es fotografías, en el segundo piso se encuentran más de 90 mil long play de salsa y bolero, además de camisetas de la época que los artistas le entregaban a Carlos Molina y con las que promocionaban sus trabajaos discográficos. “Hay cosas que no hemos podido exhibir por falta de espacio, también tenemos los afiches de todas las Ferias de Cali y de artistas promocionando sus discos”, asegura Molina.

El Museo de la Salsa está ubicado en el barrio Obrero, de Cali

Dentro de las historias que esconde este mágico lugar, su director nos contó en una visita que hizo Leo Marini -cantante de la Sonora Matancera- a la casa de su papá le dijo que su casa era un museo… el museo de la salsa. “Mi papá además de ser fotógrafo, melómano y coleccionista, era amigo de los artistas y cantantes de salsa, ellos eran asiduos visitantes de nuestro hogar. Desde hace diez años el Museo está abierto para el público, antes era privado y para algunos medios de comunicación que querían saber sobre la salsa en Cali”, destacó Molina.

Carlos Molina, el fotógrafo de la salsa

Pero además de la salsa, Carlos Molina Jr., quien es teólogo, trabaja en la parte social en el barrio Obrero con jóvenes, madres cabeza de familia y población vulnerable.

Pero si usted viaja a Cali no olvide visitar el verdadero y único Museo de la Salsa que tiene la historia de esta música vivida en Cali desde los años 60. Está ubicado en la carrera 11B 24-44, del barrio Obrero, también lo pueden seguir en @museodelasalsa.

@CeronBastidas