1 – 0, ganando el ELN. Las FARC todavía siguen esperando poder marcar dentro de poco en un partido de incertidumbre donde los del Sí no quieren dejar solo el arco y los del No quieren meter su gol.

Juan Manuel Santos una vez más ha salido a los medios a decir que se sentará a negociar acuerdos de paz con el Ejército de Liberación Nacional – ELN, pero esta vez anuncia fecha, ya que el próximo 27 de Octubre en Quito (Ecuador) la mesa estará servida, esperando que esta vez sí sea posible quedarse sentado con estos rebeldes que desde el gobierno de Álvaro Uribe Vélez vienen diciendo que quieren negociar la paz.

Pero mientras el ELN apunta en el arco de la paz, las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia –  FARC, siguen esperando el balón. De hecho el país está a la expectativa por las conversaciones y los acuerdos entre los que votaron Sí en el plebiscito por la paz y los que votaron No. Por un lado los del Sí son optimistas y dicen que de lo propuesto por Uribe la gran mayoría de puntos son viables, pero los del No argumentan que esos acuerdos no necesitan solo “quitar y poner puntos y comas”, es decir, la redacción del documento no es el problema y lo que buscan es empezar desde ceros, tal como lo expresó el ex procurador Alejandro Ordoñez y días atrás el ex presidente Andrés Pastrana quien aseguró que la paz con las FARC podría demorar 2 años más.

En ese orden de ideas, unos van por el fondo y otros por la forma. De hecho, el presidente Santos ha mostrado su afán por dejar este marcador definido y espera poder el viernes a más tardar pronunciarse frente a las propuestas que el No le está haciendo llegar para saber qué queda y qué no. ¿Un poco apresurado? ¿Un poco improvisado? Se está hablando de menos de 48 horas para que el gobierno estudie sugerencias y tome decisiones.

Ojalá el afán y la arrogancia no le ganen nuevamente al gobierno y esta vez sea más idóneo a la hora de atender a sugerencias de las otras partes, porque no le quedaría bien al nobel de paz promover más polarización como la que anoche se dio en el congreso de la república (a propósito bochornoso en quienes dicen “querer la paz”). Pero también ojalá los del No, no se excedan en sus propuestas, porque lo imposible sólo le queda bien hacerlo a Dios y no a los hombres.

Sin duda un escenario similar al fútbol, como toda una final donde existe incertidumbre, solo que en este partido se espera un marcador integral donde los goles se marquen a favor de la paz. Cuidado presidente Santos, haga su mejor debut en este partido ELN vs FARC, el partido de la paz, donde usted es el árbitro.