Ingresa o regístrate acá para seguir este blog.
Este año llega para la Selección Colombia con el reto de clasificar al Mundial de Rusia 2018. Varios jugadores del conjunto nacional empiezan el 2017 en forma: Juan Cuadrado es titular en la Juventus, Radamel Falcao lleva 12 goles con el Mónaco, Carlos Sánchez es figura de la Florentina y Yerry Mina es pretendido por el Barcelona. A eso se le suman varios futbolistas nacionales, como Vladimir Hernández, Mateus Uribe y Daniel Bocanegra, que merecen cada vez más un puesto entre los convocados por José Pékerman. Con una situación así, ni siquiera el tema de James debería ser excusa para no viajar a Rusia el próximo año.
Primero, la situación de la tabla no es tan mala como la han hecho ver algunos periodistas e hinchas. Colombia se ubica sexta en la tabla con 18 puntos, o sea que le bastaría con conseguir tres victorias y un empate para llegar al “número mágico” de 28 puntos, que supuestamente le da un cupo en el Mundial. De los seis partidos que restan, solo Ecuador y Brasil se asoman como partidos complicados, pues para Colombia el mal trago de Argentina, Uruguay y Chile ya pasó. Las eliminatorias de la CONMEBOL son complicadas, pero nuestra Selección depende de sí misma para clasificar al Mundial.
Ahora bien, si para finales de marzo queremos seguir diciendo lo mismo es necesario que Pékerman repase varios temas. El primero, en mi opinión, es la creación de espacios. Este problema quedó retratado en el partido contra Chile en el Metropolitano. Creí, al principio, que la escases de ocasiones de gol era consecuencia de la titularidad de Borja (gran jugador, pero con mucho que aprender para merecer ese puesto), pero en la segunda parte, con un gran Falcao en cancha, me di cuenta que el lío estaba en la táctica. Además, poco se parecía ese Chile agotado, sucio y desubicado a aquel que levantó las últimas dos copas continentales. El problema de ese día, al igual que en Argentina, Brasil y Paraguay (donde ganamos por un mérito individual de Cardona) es que los balones no llegaban a los delanteros con suficiente claridad. Colombia parecía predecible, lenta y sin cambio de ritmo. Eso y la mala suerte han mantenido a los delanteros sin ver portería desde marzo del año pasado
Otro punto es el bajo rendimiento de los laterales izquierdos. Después de tener a Pablo Armero, un correcaminos que ahogaba a cualquier jugador de la banda rival, hemos pasado a Fabra y Díaz que, con mucho futuro por delante, cometen errores que jugadores del nivel de Suarez, Messi, Neymar y Cavani no perdonan. Con los mejores días de Armero cada vez más lejos, es responsabilidad de ambos jóvenes laterales adquirir más experiencia y cerrar lo que hoy es un hueco defensivo de la Selección.
Por último, hay un tema importante que quizá es más mediático que táctico: el de James. La vida no ha sido del todo justa con el cucuteño, pero tampoco estaba en una situación muy diferente cuando arrasó con Ecuador en el Metropolitano a principios del año pasado. Considerar que James, o peor aún, que la Selección no da resultados positivos porque al capitán lo tienen de suplente en el Madrid es buscar excusas. Sí, es verdad que los jugadores con continuidad rinden más, pero el ex jugador de Mónaco ya ha demostrado que puede rendir con el conjunto cafetero sin ser un habitual en su club. Mientras su futuro queda definido, James debe enfocarse en ser el creador de juego simple, de pocas palabras y muchos toques que vimos en el Mundial.
Queda un año largo, pero no tanto, y poco se va a poder aprovechar esta gran generación de jugadores si el desempeño de estos partidos no nos lleva al Mundial. No estamos en una crisis como Perú o Paraguay (porque de Bolivia y Venezuela ni hablar), pero todavía no hay nada asegurado. Además les digo algo: yo no veo a Pékerman renovando después de 2018, y no estoy seguro de que haya un buen remplazo.
Buen análisis. Tocó un punto que no hemos querido ver y es el de los laterales, porque después de Zuñiga y Armero poco se ha visto de ataque por las bandas (ni Fabra, Arias, ni Farid generan gran desborde y si lo hacen dejan un hueco enorme) y recae todo el peso a medio campo, que al ser bloqueado neutraliza todo el juego de Colombia. Pekerman debe revisar y tener en cuenta otras alternativas de ataque.
- Me gusta
1
- No me gusta
0
ReportarCalifica:
En efecto, vamos a ver en marzo que nos trae el juego por la banda.
- Me gusta
0
- No me gusta
0
ReportarCalifica: