A pesar de tener el talento para jugar en las mejores ligas, Kylian Mbappé sigue aferrado al proyecto poco creíble del PSG.
Sígame en twitter: @avargasdeporte
Por si no había quedado claro después del Mundial de Rusia 2018, el mejor jugador del Paris Saint-Germain no es Edinson Cavani, Ángel Di María y ni mucho menos Neymar. El futbolista que llena las portadas de los diarios por las maravillas que hace cada fin de semana tiene 20 años y se llama Kylian Mbappé. Su talento no tiene pierde para el espectador y, aunque él asegura que se quedará en la liga francesa la próxima temporada, queda la sensación de que ese torneo ya no es un reto para él y que el PSG, aparte de dinero, no tiene mucho más que ofrecerle.
En la última década, personajes como Eden Hazard, Neymar o Antoine Griezmann han ilusionado al hincha con ser los número 1 del fútbol. A pesar del indudable talento de todos ellos, algún rollo extradeportivo les ha sacado del camino y han firmado temporadas para el olvido. Con Mbappé el tema va bien. Desde que cogió ritmo en el Mónaco de 2016, el delantero no ha hecho sino sorprender. En aquella temporada, de la mano de Radamel Falcao, anotó 26 goles en 44 partidos, ganó la Ligue 1 y llegó a semifinales de la Champions League. Tras su traspaso al PSG, en 2017, jugó con el equipo de la capital 44 partidos, metió 21 goles y volvió a ganar la Ligue 1 así como las dos copas locales. Este año, después de ganar el Mundial 2018 y ser figura, Mbappé explotó definitivamente. En 40 partidos lleva 36 goles y, como si fuera poco, ganó su tercera Ligue 1 consecutiva.
Lea también: El Ajax nos da una lección de fútbol
Con esos números valdría la pena verlo en un equipo de mayor jerarquía y en una liga más exigente. La competencia francesa no está mal para quien busca experiencia en Europa, pero las verdaderas estrellas están en España e Inglaterra, y algo en Italia. No es solo cuestión de alinear en un equipo con los mejores jugadores y entrenadores, que algo similar ofrece el PSG, sino competir contra otros clubes similares todas las semanas. No es lo mismo enfrentar a la defensa del Mónaco que a la del Real Madrid, Atlético de Madrid, Barcelona, Manchester City, Liverpool o Tottenham. Si Kyilian Mbappé quiere probar hasta dónde puede llegar su nivel, debe subir la dificultad y entrar en una liga que no tenga campeón virtual a mitad de temporada como suele pasar en Francia.
Lionel Messi y Cristiano Ronaldo se acercan al ocaso de su carrera y este deporte busca al menos un futbolista que pueda ponerse la corona o por lo menos mitigar la ausencia de estos auténticos cracks. Muchos nominados han fallado al llamado. Mbappé es capaz de sorprender cada vez que juega y eso le da la posibilidad de ser el mejor. Sin quitarle mérito al PSG, el club parisino parece más un cementerio de grandes jugadores que un formador de leyendas. Ojalá el joven delantero entienda que su lugar está fuera de Francia. A diferencia de Neymar, Ronaldinho y muchos otros, Mbappé puede significar más que un juego bonito.