¿Alguna vez ha tenido el susto de su vida, cuando de paseo hacia la costa en una curva mojada o con aceite, su carro patina, pasa a ocupar el carril contrario, pierde el control de éste y en pocos segundos de manera impotente, ve cómo se va de frente contra el camión que viene por el carril izquierdo en sentido contrario? Si tuvo buena suerte, logró esquivarlo o el camión se detuvo a tiempo. De lo contrario, este artículo puede estarle recordando el peligroso incidente en el que perdió su auto, y usted o sus acompañantes resultaron heridos en el mejor de los casos.
El control de estabilidad que se empezó a usar en las marcas de lujo hace 13 años, y que hoy en día lo ofrecen todas las conocidas, probablemente lo hubiera salvado de accidentarse, y de vivir todo esa atemorizante y desagradable situación. Cuando un auto circula, describe la trayectoria que quiere el conductor por medio de la dirección donde en varios casos también, los frenos y el acelerador ayudan en la formación de ésta. Las llantas son los puntos de contacto del auto con la vía. Si una o más de ellas patina, el carro sigue derecho por más de que se trate de girar con el timón, o saca la cola potenciando la formación de un trompo. La primera situación se conoce como subviraje, y la segunda como sobreviraje. Cuando estas se presentan, es que entra en acción el increíble control de estabilidad. Con sensores que detectan el ángulo de giro del timón, la velocidad del vehículo, de cada una de las ruedas, la aceleración lateral y angular sobre su eje (para cuando saca la cola por ejemplo), trabajando en total armonía con los frenos ABS y los controles de tracción, las computadoras del sistema determinan si se está perdiendo el control del carro, y dependiendo de la situación específica, frena una o más ruedas y si es necesario, interviene en el motor, en algunos casos en la transmisión, para reducir la potencia entregada a las llantas.
En los modelos más recientes intervienen incluso la dirección. Esto es algo que ni el mejor piloto lograría, pues además todo actúa en décimas de segundo. Si se va de frente contra el camión y la curva es hacia la derecha, reducirá la potencia, probablemente tenderá a frenar la rueda trasera derecha, aplicando diferentes presiones en las otras tres, para hacer rotar sobre su eje al carro, metiéndolo de nuevo en su carril.
Otra situación: ¿cuántos no han perdido el control por ejemplo, al tratar de esquivar a un peatón o a un perro por el fuerte frenazo o timonazo dado? El control se valdrá de frenos, reducción de potencia, intervención de dirección etc, para no permitir que vuelque o que siga derecho, sino para que esquive y regrese a su carril. Obviamente el ESC (electronic stability control) lo salvará siempre mientras no se hagan maniobras absurdas que superen los límites de la física. Me hubiera gustado mostrar un video bien explicativo, pero las fallas actuales en la plataforma de El Tiempo, no me lo permiten. Visiten youtube buscan ELECTRONIC STABILITY PROGRAM un video que es en la nieve, para que vean bien de que se trata.
Se considera que después del cinturón de seguridad, es el sistema de seguridad activa más eficaz en la historia del automóvil. Lo inventó Bosch con Mercedes Benz (Bosch lo llama ESP, Alfa Romeo y Subaru lo llaman VDC, Honda VSA, Toyota VSC, Mazda y BMW DSC etcétera), pero -como casi siempre-, Volvo no se demoró nada en lanzarlo, mientras las otras marcas premium hicieron lo mismo, y las generalistas estaban a punto de hacerlo mientras lo investigaban y desarrollaban. ¿Cuántas vidas ha salvado el sistema? Las cifras lo dicen todo: según un estudio realizado por IIHS (www.iihs.org) de EE.UU hace 2 años, 10000 accidentes se hubieran evitado si todos los vehículos en ese mercado equiparan el excelente sistema, y se evitarían un 43% de accidentes fatales, y un 56% de accidentes fatales que involucraran a un solo carro. En éste momento tanto en Europa como en EE.UU más de la mitad de los carros nuevos lo llevan de serie, y es opcional hasta en los más baratos y pequeños del segmento A como el Fiat 500, el Twingo, o el Citroen C1.
En Dinamarca Italia y Alemania, prácticamente el 100% de los autos lo llevan, y la legislación Norte Americana obligará a que el año entrante, el 55% de todos los vehículos nuevos lo instalen y el 95% para el 2011, Europa va por la misma ruta pues lo impondrá en su totalidad, entre el 2012 y el 2014.
Por esto es que destaco los 2 modelos protagonistas en el título de ésta columna, pues en ese rango de precios (53 millones la Chevrolet y 58 el Sonata), que aunque en nuestro país no es popular pero tampoco corresponde al segmento de lujo, estos son los únicos autos que instalan el control de estabilidad de serie, lo cual no deja de ser sumamente atractivo dadas las infinitas ventajas que proporciona el sistema.
En síntesis, se trata de «un piloto automático» que lo asistirá en situaciones peligrosas, salvando su vida y la de los suyos, y el ejemplo sobresaliente de la nueva Chevrolet HHR (lo llama Stabilitrack) y el Hyundai Sonata (ESC), deberían seguirlo la mayoría de fabricantes ofreciéndolo por lo menos como opción -no es hoy en día costoso, en torno a los US400-500-, pues creo que después de enseñar con unas buenas dosis de publicidad y pedagogía al ciudadano común y corriente en que consiste y las ventajas que el sistema le proporcionará, creo que la mayoría de las personas no dudarían en pedir su auto nuevo con el eficaz sistema.
Se trata de tocar a la puerta, de concientizar, y de paso -como siempre-, hacer que nuestros dirigentes reduzcan los altos impuestos que pagan nuestros vehículos ya que en gran parte por los costos, nos están privando de importantes dispositivos y sistemas de equipamiento que como el que ocupa éste espacio, trabajan todos los días, segundo a segundo, tratando de salvar millones de vídas.
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