Con un motor 1800 turbocargado de última generación, el E250 CGI se mueve algo más rápido que su hermano el 350 de 6 cilindros, en alturas donde la »asfixia» pasa factura. Ah, y consumiendo menos combustible!

 

* Siempre lo han hecho, pero de unos años hacia acá los fabricantes de automóviles van día a día un poco más rápido en lo que tiene que ver con el aumento de la eficiencia tanto de los motores Diesel como los de gasolina disminuyendo los consumos, aumentando el torque y los caballos de potencia, al tiempo que se »ajustan» para poder cumplir con una normatividad de emisiones cada vez más exigente, poniendo su grano de arena para así, tratar de conservar lo que nos queda de nuestro maltratado planeta.

Dentro del grupo de tecnologías encaminadas a lograrlo se encuentra el »downsizing» la reducción del tamaño en los motores para consumir y contaminar menos. Estas modernas máquinas de reciente aparición están asistidas por turbocargadores o súpercargadores los cuales trabajan al unísono con sistemas de inyección directa de gasolina, como en el caso del Mercedes Benz E250 CGI (Charged Gasoline Injection), sujeto de ésta prueba.

Partiendo de un motor de 1800 centímetros turbocargado, Mercedes obtiene una potencia máxima de 204 caballos, y un par máximo de 310 Newton/metro entre las 2000 y 4300 revoluciones por minuto (rpm), cifras que produce un motor moderno aspirado  -sin turbocargador-,  en promedio de unos 2.8 a 3 litros de cilindrada.

Sabiendo que un motor aspirado a alturas sobre el nivel del mar como las de Bogotá Tunja o Villa de Leyva (entre 2600 y 2800 metros) pierde de un 26 a 30% de su rendimiento y que uno con turbo si acaso el 5% no es desatinado afirmar que el 250 CGI se mueve ligeramente más rápido a esas alturas que su hermano, el E 350 de 6 cilindros el cual ya lo hace de manera sorprendente.

La sorpresa es mayúscula tan pronto se pisa a fondo, pues agota en un santiamén los primeros 4 cambios de la caja automática (5 velocidades en lugar de las 7 del 350 lo cual no es una desventaja dado el performance) llevándonos en pocos segundos a velocidades y aceleraciones estratosféricas, donde en cierto punto de la aceleración parece que el auto viajara en el vacío pues la resistencia del viento poco hace para retener la carrocería, dado el aluvión de potencia: vamos sobre un misil, éste es el embrujo de la turbina!!!!

El motor entrega la potencia con relativa progresividad: el empuje inicia en las 2000 revoluciones pues por debajo hay que esperar un instante con el gas a fondo mientras »carga» el turbo lo suficiente  -culpa de ser un 1800 »normal» momentáneamente mientras recibe el aire comprimido del turbo, se presenta el denominado turbo lag, pues es justo en ese instante donde el 350 reacciona fugazmente-,  va aumentando, y sobre las 2800 »se dispara»  girando sin desfallecer en todos los cambios, hasta superar ligeramente las 6000 rpm.

Como sucede casi siempre en la mayoría de estos vehículos, hay que ser prudente y estar atento para medir las distancias con los vehículos que nos preceden, pues cualquier golpe de acelerador a fondo nos lleva de un grupo de vehículos y camiones al otro, en un segundo; allí es donde nos soportan los excelentes frenos, infatigables a estos ritmos, y con casi un 10 sobre 10 sabiendo que van reteniendo casi 1700 kilos de peso. El tacto del pedal es una delicia.

Valga mencionar que en carretra frenando con bastante intensidad, al tiempo que se vira, o se cambia de carril, el auto no nos sorprende con malas maneras. Su comportamiento, a pesar de la tendencia hacia la suavidad dada la puesta a punto de las suspensiones, es encomiable pues es neutro, no nos sorprende con un tren trasero nervioso o ágil ni nada por el estilo.

Al acometer las curvas, el habitáculo empieza por inclinarse para inmediatamente ser retenido por unos amortiguadores que aportan al confort haciéndolo pasar muy bien sobre todo tipo de imperfecciones,  contribuyendo a la seguridad en el mencionado comportamiento dinámico.

La dirección es algo ligera, no transmite mucho sobre lo que pisan o se »deforman» las ruedas, pero lo hace pasar por donde uno quiera hacerlo con sus manos sobre el volante, independientemente de la velocidad a la que se tomen los virajes.El retorno o autocentrado, no es muy rápido.

Buscando imperfecciones al límite y en situaciones nada habituales, únicamente al hacer la prueba de »slalom», cambiando sucesivamente y a buena velocidad de un carril a otro, la zaga se asoma: allí entra a »salvarnos» el excelente control de estabilidad ESP que todos los Mercedes llevan de serie.

Esto, con las presiones en las llantas que recomienda el fabricante, cuando se va ligero de carga.Probablemente al inyectar las 10 libras adicionales que recomienda para circular con 5 personas y el baúl lleno, se produzca un comportamiento menos nervioso. En la ciudad, su excelente diámetro de giro le permite virar como si se llevara un compacto.

Retornando con la máquina el sonido está bien aplacado y es de buena calidad pues cuando se da todo el gas nos llega como un agradable gorgoteo acompañado de un peculiar sonido símil al de la presión hidráulica; todo se escucha por allá, en la zona alta del tacómetro.

¿Y el consumo de combustible? Muy bueno dadas las prestaciones pues en ciudad está en torno a los 33-34 kilómetros por galón  -el 350 hace entre 25 y 27-,  y a velocidades constantes de 110 kilómetros por hora en cuarta velocidad consume un galón por cada 60 kilómetros!! Lógicamente esto se logra sin pisar a fondo, pues cuando se »provoca» a la turbina, los consumos se disparan.

Eso sí, éste 4 cilindros no es tan cremoso ni refinado en su funcionamiento como el V6 del 350 y el sonido es diferente menos seductor, más mundano……..

La eficiencia que se logra para consumir y contaminar menos es gracias a la tecnología Blueefficiency de la compañía la cual le quita cargas al motor, las cuales se deben mover permanentemente en los motores normales como el alternador, la bomba de gasolina, y la de la dirección hidráulica, las cuales en el 250, se desacoplan o disminuyen el apetito por los caballos sólo cuando es necesario y permiten que el motor gire libre sin tener que arrastrarlas en determinadas situaciones.

Igualmente las llantas son de baja resistencia, y el flujo de aire hacia el radiador está gobernado por unas lamas al interior de la persiana, para mejorar la aerodinámica.

En lo demás, es un E en todo el sentido de la palabra: espacio y confort a raudales, la calidad visual y táctil percibida en los materiales del interior es de primera categoría (con la excepción del plástico superior del tablero que sin ser de mala calidad, podría ser mejor; igual es en el 350), con un diseño clásico evocador y eficiente aerodinámicamente.

Cuesta una cantidad importante de dinero menos que el 350 lo que se refleja en la ausencia del timón graduable eléctrico, en las memorias del mismo y de las sillas las cuales son semi eléctricas puesto que la graduación longitudinal del cojín es manual no así su altura y el espaldar, la caja de velocidades es de 5 cambios en lugar de 7  -no veo desventajas en éste aspecto-,  con su palanca ubicada en la consola en lugar del fino y pequeño control de la de 7 puesto en la columna de dirección.

Cambia el tono de la madera y su composición que es de eucalipto, su timón nos recibe con el tacto que sólo Mercedes puede imprimir y, en general, mantiene buena parte del equipamiento de su hermano mayor como las excelentes luces bixenón auto adaptables inteligentes, el asistente para estacionarse, el attention assist que detecta su cansancio y se lo advierte, climatizador bizona, el parktronic……..

En fin decir que sus sillas no cansan después de un buen número de horas y kilómetros, que a mi parecer el espaldar trasero va muy inclinado hacia atrás………pero que como sea, es un verdadero placer estar al mando de uno de los sedanes de las marcas de lujo que han sido para el resto de las compañías, un notable punto de referencia en muchos aspectos técnicos y estéticos durante décadas.

Al final después de analizar cifras   -incluídas las del consumo pues requiere tanquear gasolina extra-,  equipamiento y comportamiento, el afortunado cliente de la firma teutona es el que decidirá el valor por el cual girará su cheque, cualquiera que sea el modelo a elegir.

* Agradezco la disposición de Daimler representante de los vehículos Mercedes Benz en Colombia, por permitirme rodar durante los suficientes días y kilómetros en el modelo de la prueba.

CORREO  italianties@yahoo.com