Empeora el abuso en los impuestos de los vehículos

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Así es, empeora, porque lo de los avalúos incrementa el montón de plata que ya se paga por el ‘delito’ de tener un auto. ¿Sabían por ejemplo que desde que entra el primer litro de combustible al tanque ya estamos pagando al estado?

Queridos lectores, hoy me salgo de los apasionantes asuntos técnicos, de las pruebas individuales y de los comparativos, de las cosas sencillas sobre las que he venido exponiendo en éste espacio por muchos tiempo. Sí, siempre he considerado que es un abuso descarado, la inmensa cantidad obligada que tenemos que pagar al estado, en impuestos, los ciudadanos que tenemos un vehículo nuevo o usado.

La verdad es que, cansado de que abusen del pobre ciudadano, me uno a las voces de protesta por el nudo de anzuelos en que han convertido la metodología, o los ‘parámetros’ que decidieron modificar sin ningún conocimiento, con los cuales quieren seguir cobrando el impuesto anual de rodamiento en cada vehículo.

Hoy escuché a la ministra del transporte hablando en Blu radio, y después de que explicó, los destacados periodistas dijeron que quedaron peor, más confundidos de lo que estaban; igual quedé yo. ¿Cómo es posible que a cualquier vehículo que se deprecia en toda la bola de tierra, en Colombia le suban artificialmente el valor para cobrar más?

Hago un ‘paréntesis’, para recordar que desde hace unos 18 meses, por muy poco dinero, algunos usados han subido su valor porque ante las circunstancias del mercado, muchos prefirieron comprar usado que nuevo, y así, aumentó la demanda. Pero subieron poco, muy poco dinero, que no justifica ésta masacre contra las finanzas del ciudadano: creo que no es disculpa para mover el avalúo ni un milímetro. Hablo por ejemplo de carros de 30 o 20 millones, algunos con ya 10 años que a lo sumo aumentaron la ‘cuantiosa’ suma en 1 millón de pesos o poco más.

Retornando a lo esencial, cumpliendo como ciudadanos de bien, ya unos pagaron muy a tiempo el impuesto de rodamiento y por ser tan cumplidos les salió caro; ahora les toca esperar a que les devuelvan el dinero que pagaron de más antes de que explotara la bomba y la ministra pusiera la reversa eso sí, estrellándose contra todo, y sin saber aún por cuáles calles, carreras o transversales piensa seguir transitando.

Aún no han dicho qué es lo que tiene que hacer la persona para que le devuelvan su dinero. Ténganlo por seguro que por lo menos le harán perder mas de un día de valioso tiempo. Por otra parte, es absurdo que los vehículos más caros tengan que, proporcionalmente, pagar más impuesto, como si ya no fuera suficiente con un seguro obligatorio más caro, al que se suma el dineral en mantenimiento.

Ellos no saben por ejemplo que una llanta de una camioneta grande vale mucho más que la de un automóvil compacto, que gastan más dinero en combustible (de paso le aporta más a las finanzas del estado), que por su peso tienen que comprar pastillas de freno más costosas que duran menos, y hacer revisiones del sistema con más frecuencia.

En los vehículos más grandes los amortiguadores deben frenar las oscilaciones de mayor peso que tienen que ver con su mayor tamaño y precio. Y eso que no hablamos de las marcas que más cobran en sus talleres. Hay que recordarle al estado, que también se devalúan como todos. Saliendo de la técnica, en cada galón de combustible nos cobran la ‘sobre tasa’, que supuestamente es para el mantenimiento de la malla vial, más de frente no se puede abusar de nosotros.

Y abusan aún más, cuando muchas veces después de explicar ‘bien’ por qué vale tanto el combustible, nos dejan siempre en la absoluta ignorancia con una fórmula que jamás se ha entendido. Claro, mientras el barril de petróleo ha bajado más o menos un 70%, acá el galón baja 100 pesos, para subir 150 en poco tiempo….. ¿Por qué nos sentimos estafados cada vez que sacan de nuestros bolsillos todos los impuestos relacionados con vehículos?

• Porque ahora van a estar más atentos a multarnos cuando por la mala programación de los semáforos quedemos bloqueando las intersecciones.

• Porque la misma programación de los semáforos nos lleva la paciencia al límite cuando estamos 100 carros parados en rojo, viendo pasar 3 gatos por la calle que está en verde. Apenas cambia, tenemos la ‘dicha’ de avanzar a lo sumo 15 segundos.

• Porque los trancones en los que vivimos a diario, hacen que los motores trabajen más calientes restando vida útil a los aceites, para que tengamos que cambiarlos antes, porque de lo contrario la máquina pierde vida.

• Porque la contaminación por un parque automotor viejo (debería existir un subsidio justo para que la gente más pobre pueda abandonar las chatarras con llantas) por unos combustibles que aunque han mejorado no aportan como debieran, y las obras de infraestructura eternas, de nuevos andenes absurdos por tamaño, que lo que hacen es levantar polvo y más tierra para enrarecer el ambiente, no sólo perjudican la salud, sino también los motores que, teniendo que aspirar varios litros de aire por segundo,  se ‘comen’ un aire enrarecido que les resta vida útil.

• Porque como bien lo decía el señor José Clopatofsky en uno de sus acertados editoriales, nos tenemos que aguantar, entre muchas, absurdas obras como la de la autopista en Bogotá hacia el norte, donde se reduce sin ninguna lógica o análisis serio, o no sé qué, la cantidad de carriles de 5 a 3 convirtiéndola en un absurdo embudo que atormenta a diario.

• Porque hace unos 5 años, David Luna recordaba que tenemos las mismas vías de hace 30, y a Bogotá le entran cada año cerca del 40% de los vehículos nuevos que son entre 100 y 120.000. Obviamente, 5 años después seguimos con la misma infraestructura (confío, respetado Alcalde Peñalosa, en que su alcaldía deje huellas muy positivas al término de su mandato)

• Porque -tan raro, a nadie le ha pasado-, no acabamos de salir del taller con el carrito perfectamente alineado y balanceado, cuando ya hemos caído en uno de los millones de cráteres lunares, de todos los diámetros, profundidades y ubicaciones. No nos salvamos ni de las que denomino ‘alcantarillas volcán’ aquellas que sin explicación, poco a poco se van asomando más sobre la vía, desafiando la rigidez del chasís más sólido de última generación (¿¿¿¿recuerdan que cada vez que pagamos el combustible parte de ese impuesto es para mantenimiento vial????)

• Porque es probable -espero que no sea así- que el estado se enrede y o enrede aún más, a los propietarios a los que por pena (lo dudo) y justicia, les tengan que devolver el monto adicional que nunca debieron pagar. ¿Cuál será el mecanismo expedito que pondrán al servicio del maltratado colombiano?

• Porque parece que aún no es suficiente el IVA y el arancel que se paga en Colombia por autos nuevos como si fueran superiores: con lo de un Kia Rio, Peugeot 208 o Hyundai Accent i25, se puede montar en un auto del segmento superior siguiente, en los países más avanzados: el Cerato, el Peugeot 308 o el nuevo Elantra i35.

• Porque siendo las 12:00 pm acabo de escuchar que el ministerio, aún dando tumbos, está completando el listado porque había muchas líneas de vehículos que aún no aparecían; que las que queden por fuera, se tendrán que asimilar a una semejante: improvisación, improvisación y más improvisación……

¿Confundido ante tantas opciones de carros nuevos y usados? ¿Necesita asesoría telefónica o presencial a costo razonable? No dude en contactarme 3114435337 – 3052204057

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@MASERAGRANTURI

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