¿Te has dado cuenta de que, en tan solo unos pocos segundos, construyes ideas y opiniones sobre otras personas cuando interactúas con ellas por primera vez? ¡según esta premisa, pareciera que la primera impresión si cuenta! y lo que también demuestra es que llegamos a conclusiones muy rápido y con muy poca información. No es lo ideal, pero hace parte de nuestra naturaleza.

¿Recuerdas ese momento en el que conociste al amor de tu vida, o la primera vez que interactuaste con tu nuevo jefe, o cuando hablaste con ese vendedor? Estas primeras impresiones, son determinantes y son las que hacen que tomemos la decisión de tener una relación sentimental, hacer parte de ese nuevo equipo de trabajo, o cerrar negocios.

De la misma forma ocurre, cuando buscas sobresalir en el mercado profesional. Es necesario identificar como quieres que te reconozcan y recuerden, pues esto va a ser decisivo para tu futuro laboral. ¿Estas familiarizada(o) con el concepto de marca profesional?, personalmente, me encanta utilizar este concepto y se lo enseño a cada uno de mis clientes, pues para ser competitivos, es necesario tener una marca que ayude a ganar visibilidad, y por supuesto, asegure el desarrollo profesional.

¿Pero qué es en sí, eso de la marca profesional? La podemos definir como la manera en la que te recuerdan, la percepción que tienen de ti y de lo que haces en el ámbito profesional, lo que te diferencia de otros candidatos y te posiciona de forma estratégica. Es lo que eres y ofreces en el contexto profesional.

Con el tiempo, y después de haber trabajado por varios años en recursos humanos y reclutamiento, he identificado tres razones principales por las cuales la mayoría de las personas no son exitosas en su búsqueda laboral.

  1. Creer que el CV es SOLO un resumen de la experiencia profesional.

Este es el error más común y el que más impacto tiene a la hora de participar en un proceso de selección. El CV, es una herramienta de la marca profesional, y es justamente este documento, el que te va a dar la oportunidad de contar tu experiencia y habilidades, desde una perspectiva más estratégica. Qué tal si en vez de contar lo “maravilloso que eres como candidato” te enfocas en proveer la información relevante, que demuestre que entiendes la demanda del mercado en términos de habilidades indispensables para el rol para el que te estas presentando.

La próxima vez que actualices tu CV, te sugiero que lo hagas pensando en la perspectiva de quien lo lee y no desde la tuya, quien lo escribe.

  1. No tener diseñada tu Marca Profesional.

La marca profesional es la expresión pública de quién eres en ese ámbito. Por eso es necesario generar espacios que te generen visibilidad frente a las personas quienes van a tomar la decisión de invitarte a participar en un proceso de selección. Estoy convencida de que en unos años el CV va a tener la tendencia a desaparecer, y plataformas como LinkedIn, y otros contenidos digitales, serán la carta de presentación, seran tu presencia digital para interactuar con posibles empleadores.

Y tú, ¿ya tienes tu perfil creado en LinkedIn?

Si crees que no es necesario, déjame contarte que esta plataforma es actualmente la base de datos más grande del mundo en el contexto profesional. Te invito a pensar detenidamente sobre lo que quieres que sea tu marca, (¿cómo quieres que la gente te perciba?) y con base en ello, comuniques tu experiencia, fortalezas y habilidades a través de tu perfil profesional.

  1. No ser proactivo.

¿Tienes una metodología para tu búsqueda de trabajo?, ¿cuál es tu estrategia, no tienes una? ¡Ahí puede estar el error! La mayoría de la población espera a que aparezca la publicación en alguna bolsa de empleo, y lo que no tienen en cuenta, es que al igual que ellos, otros cientos hacen lo mismo, aumentando el número de candidatos y disminuyendo su visibilidad.

Asegúrate de asistir a eventos o grupos de networking, haz un alista de empresas donde te gustaría trabajar y utiliza LinkedIn como herramienta para conectar y generar conversaciones con personas que tienen poder de decisión en los procesos de selección.

El secreto del éxito en la búsqueda laboral está en asumir la responsabilidad de hacer todo lo que está dentro de tu control, y así, crear espacios que te den visibilidad. Entender la demanda del mercado y asegurarte de que tu CV y LinkedIn sean coherentes con tu marca profesional*.

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