Cuando nació el Festival Vallenato, los Granados ya estaban allí: Hace 40 años, el padre, Ovidio Granados quedó de segundo, solo superado por Alejo Durán, primer rey vallenato.

Más adelante, otro segundo lugar le dejó ver a Ovidio que la corona no sería suya. Pero nadie le quitará el prestigio que tiene como técnico de acordeones y la inspiración para componer canciones con las que sus hijos sí se han coronado.

El mayor, Hugo Carlos, es el único acordeonero que ha cosechado cuatro coronas en el Festival (infantil, en 1980; aficionado, en 1986; rey de reyes aficionado, en 1997, y rey profesional, en 1999) y la semana entrante (del 26 al 30 de abril) competirá con otros 18 acordeoneros, incluido su hermano menor, Juan José, por la corona del Rey de Reyes 2007.

Aprendió porque no tenía más remedio viviendo en una casa llena de acordeones. Tenía cinco años cuando su papá le dejó dar sus primeras notas. Empezó a participar en el concurso infantil en el 79, cuando tenía 13 años.

Por esa época, su hermano Juan José apenas era un seguidor más que lloraba cuando perdía y celebraba, cuando Hugo Carlos ganaba. Porque a Juan José, el amor por el acordeón le llegó tarde. A los 14, la edad en que su hermano ya era rey infantil, Juan José empezaba a ubicar los dedos en el instrumento.

“No comencé antes porque me gustaba mucho el estudio y el deporte –recuerda el menor-. Pero como a la casa llegaban Alfredo Gutiérrez, Emiliano y su hermano Poncho Zuleta y hacían parrandas en las casa, me revivieron las ganas de ser como ellos”.

Su primer acordeón fue regalo de un amigo, Joselo González, advirtiéndole que se lo daba porque le veía futuro. Juan José comenzó su carrera en el Festival Vallenato disputándose la corona de aficionado que alcanzó en 1992. Por eso, en el rey de reyes aficionado de 1997, le tocó competir contra su hermano.

En la competencia de 1997, los puntajes indicaban que uno siempre fue seguido del otro. Se esperaba que Hugo Carlos obtuviera el primer puesto y Juan José, el segundo. Pero el menor fue descalificado. “Había que entender que tampoco podíamos llevarnos todo”, explica el mayor.

“Nos fue bien. Llegamos los dos a la final. Él se quedó con el premio –dice ahora Juan José–. Yo estaba un poquito inmaduro. Y me dolió bastante. Después analicé que su presentación fue mejor que la mía. Así que me sentí orgulloso por él y apenado por mi actitud. Tuve que disculparme”.

Aún así, los hermanos Granados decidieron cuidarse en salud. “Desde entonces hicimos un convenio familiar -–dice Hugo Carlos–: seguiríamos concursando un año él y un año yo. Pero nunca al tiempo. Porque los medios tratan de enfrentarnos”.

Por esto, apenas el año pasado cuando Juan José despedía su año de reinado, decía que lo más seguro era que solo uno de los dos participara por el Rey de Reyes.

Hugo Carlos se coronó rey vallenato en 1999. A pesar de que en medio de la final se le dañó un pito del acordeón. Tremenda anécdota, recuerda, porque el público se dio cuenta de que a él, el hijo del que reparaba los acordeones en Valledupar, se le venía a dañar el instrumento precisamente a esa hora, en la final.

Por su lado, Juan José se coronó en el 2005.

Hugo Carlos y Juan José han equilibrado sus posibles rivalidades. Están conscientes que Juan José sobresale en lo comercial (es decir, en grabaciones de discos, en alternar con cantantes como Fabián Corrales y, ahora, con Michel Torres), mientras que a Hugo Carlos le va mejor en festivales y parrandas.

“Toca que nos miremos como los contrincantes que somos –dice el mayor-. Si en la competencia yo lo cuido a él, porque es mi hermano, me descuido de los otros 17 que quedan. No puedo tratarlo suave a él, porque los otros no me van a tratar suave a mí. Es que mi objetivo no es vencer a mi hermano, sino a los otros”.

¿Y ahora que viene una nueva rivalidad, qué van a hacer para no romper la armonía familiar?

Por lo pronto, se pusieron de acuerdo los dos sobre las canciones que van a llevar a la competencia. “Ambos vamos a interpretar canciones de mi papá –dice el menor-. Hugo Carlos llevará ‘El vicio’, la canción de mi papá con la que yo me coroné. Y yo llevaré una nueva, inédita, en la que mi padre cuenta su experiencia, que no fue rey, pero sus hijos sí y ahora competimos por el Rey de Reyes”

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Fotografía enviada por la familia Granados