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“Las inscripciones en la categoría de vallenato/cumbia han sido muy bajas. Si esto continúa, tristemente, la categoría estaría amenazada”, explicó Gabriel Abaroa, presidente de Laras, que otorga el Grammy Latino.
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La categoría vallenata en el Grammy Latino, la gran conquista de la música colombiana del año pasado, podría tener el record como “la historia más corta de una categoría en la historia de los Grammy, que llevan más de 50 años”.
Con esas palabras, Gabriel Abaroa, presidente de Laras, academia que otorga el premio, le indicó por escrito a EL TIEMPO lo que puede pasar si el viernes 8 de junio, no hay entre 20 y 25 álbumes de vallenato o cumbia, debidamente inscritos, en la oficina del Grammy en Santa Mónica (California, E.U.).
La copia de esta comunicación llegó a diferentes ejecutivos de las casas disqueras y los dejó preocupados. Así lo reconoció Fernando López, vicepresidente de Codiscos, “Se ve el poco interés de las compañías de discos y de los mismos artistas. Especialmente, de los artistas independientes. Nosotros inscribimos los productos que tenemos”.
Si llegan entre 15 y 20 discos, la categoría queda en alerta. Si llegan menos de 15, “se estudiaría sobre la posibilidad de que los discos se integraran a la categoría tropical”, afirmó Aida Scorza de la Academia. Es decir: ni siquiera habría categoría este año.
Esta vez, el proceso de inscripción se dividió en dos rondas. La primera, para discos o canciones cuya salida a la venta en tiendas se hizo entre el primero de julio del año pasado y el 30 de marzo. Estos tenían plazo para inscribirse, con formulario diligenciado, el mismo 30 de marzo. Los demás, que aparecieron o aparecerán después (hasta el 30 de junio), tienen como fecha límite este viernes.
En la primera ronda, los resultados fueron alarmantes para la Academia: “en ese periodo –agregó Abaroa– la inscripción no llegó ni a la decena”.
Y lo esperado era que la categoría creciera este año, basándose en los 28 álbumes que concursaron el año pasado, el orgullo que generó entre la comunidad vallenata y la recepción que tuvo el otrogamiento del premio en la industria musical latina.
La categoría se creó como resultado de un proceso de tres años en los que se puso a prueba la fortaleza del género. Se observó la oferta de producto y que hubiera votantes que conocieran el género y votaran a conciencia. Esto, para evitar precisamente osos como verla nacer un año y morir al siguiente.
En abril del 2006, cuando los colombianos celebrábamos el establecimiento de la categoría de vallenato/cumbia, Aida Scorza, de la Academia, explicó: “Van tres años y medio recibiendo tantos discos de vallenato que no hay dónde ponerlos. Así, consideramos que era injusto incluirlos en la categoría tropical y el comité vio que era el momento de darle un lugar propio”.
Paradójico: llegaban discos por montones cuando no había categoría y ahora que la hay, quizás al cierre de las inscripciones, se alcance apenas a cumplir la meta.
Sony BMG, la casa disquera que cuenta con mayor número de artistas del género, esperó hasta última hora para inscribir sus artistas. En eso estaban a finales de la semana pasada.
“Esperamos tanto –explicó Diego Toro, de la disquera–, porque somos cuidadosos y siempre mandamos un paquete con los álbumes de todos”. Van, incluso, con la comprobación de las fechas en que empezaron a distribuirse.
“ Llevamos dos meses trabajando en esto –agregó Toro–. Desglosamos cada disco. Por ejemplo, el nuevo de Felipe Peláez se inscribe en vallenato, pero si tiene tres canciones exitosas, las anotamos en canción tropical, por ejemplo”.
Toro afirmó que Sony BMG inscribirá siete álbumes en en la categoría este año: Jorge Celedón, Los Hermanos Zuleta, Zuleta, Felipe Peláez, Jean Carlos Centeno, Miguel Morales y Silvestre Dangond.
Desde Discos Fuentes, Rafael Mejía afirmó que las inscripciones de Otto Serge, Los Gigantes y Jorge Oñate se enviaron hace como mes y medio. “Tenemos que mantener viva la categoría, no importa quién gane. Si la perdemos pasará mucho tiempo antes de que se cure la herida y nos den otro chance”.
Mientras tanto, el tiempo corre en contra. Para inscribirse, los artistas independientes pueden hacerlo através de los miembros de la Academia, si ellos mismos no lo son.
Por lo pronto, si las cosas no mejoran, podría ser que Poncho y Emiliano Zuleta pasaran a la historia como los primeros y últimos en obtener el galardón.
“Esto es lo más irónico del mundo –agregó Mejía–. El folclor vallenato tiene el desarrollo que tiene porque en Valledupar consigues hasta niños tocando guacharaca, todo el mundo canta, toca, compone. Hay mucha oferta y está en peligro de ser descalificado porque no se inscriben. Que la categoría se acabe por ausencia de participantes es como tener muchos boxeadores y que ninguno se suba al ring”.
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