En la madrugada del domingo, tras una emocionante final, se anunciaron los reyes vallenatos profesional, aficionado y de canción inédita.
Con el anuncio, fuegos artificiales y un show musical que comenzó con Carlos Vives, siguió con Silvestre Dangond y El Gran Martín Elías interpretando éxitos de su padre, terminó el Festival Vallenato número 47.
El nuevo rey vallenato profesional fue el acordeonero Gustavo Osorio Picón, de 41 años. Se había presentado ocho veces al festival en busca de la corona. Había sido tercero el año pasado. Nacido en Río de Oro, el administrador de empresas radicado en Santa Marta, había sido rey infantil. Y ha participado en muchos otros festivales folclóricos, entre estos el Cuna de Acordeones, de Villanueva (La Guajira), donde también ganó en una oportunidad. Venció en la final a los acordeoneros Mauricio De Santis, Javier Matta, Carlos Mendoza y Poncho Monsalvo.
El título de rey vallenato aficionado fue para Camilo Andrés Molina Luna, monteriano de 19 años, que estudia música en la Pontificia Universidad Javeriana, en Bogotá.
Molina Luna fue rey infantil en el 2005, año en el que comenzó a estudiar teatro como preparación para protagonizar la película ‘El ángel del acordeón’, para la que fue seleccionado mientras competía por la corona infantil. También hizo algunos pinitos en televisión, en la telenovela ‘Oye bonita’, sin embargo está dedicado a la música como vocación.
En la final fue el que más tranquilidad mostró a la hora de interpretar sus canciones.
En la modalidad de canción inédita ganó Enrique Ariza, de Riohacha (La Guajira), que el año pasado también había llegado a la final con otra composición.
Su canción ganadora fue el paseo ‘Con el alma entre las manos’, dedicada a Diomedes Díaz, homenajeado central del Festival Vallenato.
La pieza fue seleccionada como la mejor entre 238 composiciones inscritas y 50 preseleccionadas que llegaron a las tarimas de la competencia.
El rey infantil de este año fue Sebastián Sepúlveda, un chico de 13 años, nacido en Valledupar, que desde los 6 años y medio practica el acordeón y desde los 7 deslumbraba ya con su talento a quienes lo veían.
Hace parte de la selección Los Niños Cantores y Acordeoneros del Vallenato de Andrés ‘El Turco’ Gil. Con el grupo ha hecho giras por el país y el exterior, a la par que cumple con sus estudios de octavo grado en un colegio de Valledupar. Lea su historia en este enlace.
En la categoría de rey juvenil el ganador fue José Camilo Mugno, de Ariguaní (Magdalena), que ya había ganado antes en la categoría infantil.
La piqueria tiene ahora un rey santandereano: Andrés Felipe Barros, de 46 años, nacido en Barrancabermeja. Es profesor de música se ha presentado 26 veces a la competencia y ya antes había ganado en esta modalidad, que premia el ingenio del verseador, en 1995.
Comentarios