Cerrar Menú Blogs
Las opiniones de los blogueros son de su estricta responsabilidad y no representan la opinión de este portal.
Profile image

Ingresa o regístrate acá para seguir este blog.

Seguir este blog
Los colombianos conocieron a Daniel Rojas Ramírez a través de la televisión. Fue el viernes 9 de marzo. Hasta ese momento no sabían su nombre, pero lo vieron actuar. Su papel: correr hacia una estación de TransMilenio  con una piedra en la mano, dejarla caer, retomarla y lanzarla con fuerza, con su mano derecha, mientras con la izquierda trataba de controlar la maleta que colgaba a su espalda. 
De un solo golpe rompió la taquilla y corrió hacia afuera. Un periodista de Citytv le salió al paso y él se tiró por encima de una de las barandas, pero el comunicador le alcanzó a preguntar por qué lo hacía. ‘Injustos los precios para los estudiantes’, respondió Daniel Rojas, con rabia, con el rostro desencajado y listo a seguir corriendo, como lo hizo. 
Cuatro días después los colombianos lo volvieron a ver y supieron que tenía 18 años y que estaba validando bachillerato. Esta vez no llevaba maleta. No estaba desencajado. No corría. Estaba a las puertas de la estación de Policía a la que fue a entregarse porque, sin saber a qué horas, se había convertido en un vándalo. Y ya estaba en un cartel de los más buscados. Y tenía el número 51 en el afiche que mostraron  todos los medios de comunicación. 
Allí, antes de enfrentarse a la propia realidad de sentirse fichado por las autoridades, Daniel habló con un periodista de noticias Caracol. ‘Me siento arrepentido. Me siento un delincuente en este momento, un vándalo, por haber hecho eso. Dañé el medio de transporte que uso diariamente’, dijo ante las cámaras. 
Luego, reafirmando con su cabeza y poniendo su mano derecha, varias veces, justo en el corazón, pidió perdón: ‘Pedir disculpas tanto a mi familia como a toda Bogotá. Había otros medios y no haber utilizado la violencia para hacerme conocer’. 
Después de ello entró a la estación, en donde comenzó su historia judicial. Si bien quedó en libertad, tendrá que enfrentarse a una audiencia a la que lo llamará la Fiscalía. 
Ignoro si Daniel llegó allí llevado por su hermana, quien siempre estuvo a su lado, o fue su conciencia la que lo movió a ello. Cualquiera que hubiera sido la razón, fue un acto valiente. Cuando se pide perdón se repara en algo el daño que se hace. Y, sobre todo, se va sanando el alma. 
Al momento de escribir este blog ya se habían presentado 26 personas ante las autoridades. Ahora los colombianos estamos esperando que los otros vándalos hagan lo mismo. Que pongan la cara y respondan por lo que hicieron. Ya algunos se presentaron a la Policía, pero los demás no se pueden esconder. Y si lo hacen, no podrán huir de su propia conciencia, ni del señalamiento de sus seres más cercanos. Por eso, para que estén tranquilos, para que con el tiempo puedan decirles a sus propios hijos que una vez la embarraron pero corrigieron su camino, es mejor enfrentar hoy las consecuencias de sus actos y darle un ejemplo de valentía al país. 
(Visited 457 times, 1 visits today)

Etiquetas

PERFIL
Profile image

Egresado de Comunicación Social y Periodismo de la Universidad de La Sabana. Hizo un curso de agencias de prensa en la Agencia Dpa, en Hamburgo (Alemania). Jefe de prensa y Director de Divulgación de Promec Televisión. Redactor de espectáculos, editor nocturno, redactor político, Jefe de Redacción y director de la Agencia Colombiana de Noticias Colprensa. Trabajó en la Casa Editorial El Tiempo como Editor de Actualidad, jefe de Redacción y Editor General del Periódico HOY. Fue Editor General del periódico Q'hubo de Cúcuta (Colombia). Twitter: @VargasGalvis

    Sigue a este bloguero en sus redes sociales:

  • twitter

Más posts de este Blog

Ver más

Lo más leído en Blogs

1

¿Casa-logía?    Uno es lo que es. A los 15 años(...)

2

Comienzo por lo que me trajo aquí:



Me encantan, estos avances. Me encantan.

The interpreter (para nosotros, La intérprete, y como cosa rara, el título en español significa lo mismo que en el idioma original) es un filme dirigido por el estadounidense Sydney Pollack, estrenado en cines en dos mil cinco. El guión condujo a Pollack a grabar en las propias instalaciones de la ONU (localizadas en territorio internacional dentro de Nueva York), una historia con tintes políticos que recuerdan la situación más o menos reciente del actual presidente de Zimbabwe.

Estaba viendo hace unas horas cierta película francesa realizada exclusivamente para televisión hace unos años, no muy conocida por cierto, y me asaltó una duda que tenía desde hace un tiempo y que se avivó luego de ver La intérprete. La duda es la siguiente:

Lo más seguro es que todos conozcamos el aviso que aparece, usualmente escondido al final de los créditos de algunas películas, que dice lo siguiente, palabras más, palabras menos: "Los hechos relatados en esta película son puramente ficticios y no deben relacionarse con eventos pasados, actuales o futuros. (...) Cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia."
Yo me pregunto: luego de ver una película que parece un documental acerca de una situación actual, ya sea ésta una realidad o no, ¿qué sentido tiene recurrir a este mensaje, si de cualquier manera los espectadores van a hacer la relación?

Es claro, hay que decir, que no todo el mundo tiene por qué captar estos parecidos. Pero los que sí los captan, lo comunican a los demás, y al final la película pasa a verse como lo que realmente es: una crítica por parte del realizador hacia una situación en particular. Punto. No importa qué tan imparcial se pretenda ser, haciendo uso del mencionado avisito.

En fin, no entiendo esta actitud, si de verdad algunos pretenden protegerse bajo dicho mensaje. Quisiera creer que lo colocan no porque no pretendan dar la cara luego de dar la opinión, sino porque es una especie de requisito, un asunto legal de obligatoria aparición al final de todos los créditos de todas las películas de todos los géneros. Aunque al final, sólo quien tuvo la idea de escribir la historia como quedó escrita es quien sabe qué opinión tiene.

Él y sólo él.

-

Sobre la película, hay un dato lingüístico interesante; se creó un lenguaje nuevo (lo llamaron "Ku"), con sus propias palabras, conjugaciones, reglas... es decir, un lenguaje aparte, sostenible por sí solo, basado en lenguajes existentes en el sur de África, pero que "aunque sería reconocido por habitantes de la zona (...), los confundiría", debido a su estructura gramatical, leo por aquí. En todas partes encuentro que el creador de este lenguaje es Said el-Gheithy, director del Centre for African Language Learning en Londres. En general, no encuentro muchas críticas positivas para la película, pero a mí me gustó.

Me encanta leer la columna Contravía, escrita por Eduardo Escobar. Y la de hoy termina con una reflexión que encuentro parecida a cierto diálogo de La intérprete. Aquí va el diálogo, para terminar y dejar de ocupar su tiempo, estimado lector. Lo traduzco burdamente, pero espero que se mantenga la idea.

Silvia Broome: (...) Siempre que alguien pierde a un ser querido, quiere vengarse de alguien más, o de Dios, a falta de alguien. Pero en África, en Matobo, los Ku creen que la única manera de poner fin al dolor es salvando una vida. Si alguien es asesinado, luego de un año de duelo se realiza un ritual llamado "la fiesta del ahogado". Se hace una fiesta durante toda la noche, junto al río. Al amanecer, el asesino es montado en un bote. Se lleva al agua y se le tira allí, amarrado, para que no pueda nadar. Entonces la familia doliente debe tomar una decisión; pueden dejar que se ahogue, o pueden lanzarse a salvarlo. Los Ku creen que si la familia deja que el asesino se ahogue, se hará justicia, pero pasarán el resto de sus vidas de duelo. Pero si lo salvan, entonces admitirán que la vida no siempre es es justa, y a cambio ese acto los liberará del dolor.


dancastell89@gmail.com

3

[audio src="https://co.ivoox.com/es/30-primera-radio-whatsapp_md_20668488_wp_1.mp3"] Radio en entornos digitales: experiencias de segmentación en aplicaciones(...)

9 Comentarios
Ingresa aquí para que puedas comentar este post
  1. DonJuanitoX

    Creo que lo que quiere decirnos robvar es que debemos verle el lado positivo a las situaciones. 1. El niño se arrepintió. Esta en una edad donde no puede entender ni sus actos, no sabe que es Transmilenio, de hecho son muchos de los que dirigían la protesta, no saben que es TM. No saben cual es su papel,no saben de movilidad, no saben de ingeniería. Yo como ingeniero, considero que son mas las cosas buenas que malas, las que ha dejado TM. Me gustó que la ciudadanía después de los actos vandálicos, haya apoyado a TM con la bandera. Creo que aunque Daniel Rojas sigue siendo un delincuente y se arrepintió, este acto lo llevará a reflexionar de una u otra forma. Es una oportunidad para que él y los demás que se entregaron, miren a través de sus actos y al menos -aunque no puedan entender el transfondo de un sistema como TM- entiendan que la ciudad y su infraestructura merece y debe ser respetada y cuidada, si queremos ver un país mejor.

  2. no pues que bonito como juzgan sera que nunca se han tenido que montar en un transmilenio ??? el camino no es el vandalismo pero quien diablos se creen ustedes partida de borregos , que facil es juzgar detras de una pantalla cobardes !!

  3. elquenolevanta

    que tiene de Valiente… es un maldito revoltoso que atento contra el bien publico… No me venga con CUentos pen.d.ejos de exaltar la conducta delincuencial de un joven!!

  4. deberían investigar primero las cosas para después comentar sobre esto la que iva con el era la hermana y lo hizo por que quiso nadie lo obligo cometio un error como todo ser humano y de esto aprendio

  5. deberían investigar primero las cosas para después comentar sobre esto la que iva con el era la hermana y lo hizo por que quiso nadie lo obligo cometio un error como todo ser humano y de esto aprendio

  6. De valiente no tiene nada. Es un vandalo que solo aparecio porque se vio identificado. Este pais no necesita arrepentidos, valiente es el que no utiliza la violencia, cualquier animal es violento pero no cualquiera es capaz de racionar.

Reglamento de comentarios

ETCE no se responsabiliza por el uso y tratamiento que los usuarios le den a la información publicada en este espacio de recomendaciones, pero aclara que busca ser la sombrilla de un espacio donde el equilibrio y la tolerancia sean el eje. En ese camino, disponemos de total libertad para eliminar los contenidos que:

  1. Promuevan mensajes tipo spam.
  2. El odio ante una persona o comunidad por su condición social, racial, sexual, religiosa o de situación de discapacidad.
  3. Muestren o impulsen comportamientos o lenguajes sexualmente explícitos, violentos o dañinos.
  4. Vulneren o atenten contra los derechos de los menores de edad.

Además, tenga en cuenta que:

  • - El usuario registrado solo podrá hacer un voto y veto por comentario.
Aceptar
¿Encontraste un error?

Para EL TIEMPO las observaciones sobre su contenido son importantes. Permítenos conocerlas para, si es el caso, tomar los correctivos necesarios, o darle trámite ante las instancias pertinentes dentro de EL TIEMPO Casa Editorial.


Debes escribir el comentario
¡Gracias! Tu comentario ha sido guardado
Tu calificación ha sido registrada
Tu participación ya fue registrada
Haz tu reporte
Cerrar
Debes escribir tu reporte
Tu reporte ha sido enviado con éxito
Debes ser usuario registrado para poder reportar este comentario. Cerrar