Por Fabian Sampayo, Visionario Millennial. Docente de las materias “Modelos Ágiles de Negocio”, “Habilidades Gerenciales” y “Pensamiento Estratégico y Prospectiva” de las Especializaciones del Politécnico Grancolombiano.

Imagina un mundo donde todos seamos felices. Tal vez esto se puede considerar una utopía en el mundo actual, sin embargo, en los últimos años la evolución de la tecnología ha permitido que el ser humano libere tiempo de su pensamiento para repensar la humanidad y volver a conectar la visión de las personas con las decisiones que toman en su día a día. Esto demanda un gran esfuerzo, y una filosofía que aporta gran valor a la construcción de esta utopía es LEAN.

El miércoles 11 de noviembre tuvimos la oportunidad de conversar con Alexandre Cardoso, presidente de 2bLean Brasil y cuyo propósito es transformar las organizaciones haciendo que sus colaboradores sean felices. Cuando lo escuchas comprendes cómo una filosofía empresarial se puede aplicar a la vida personal. Compartimos algunos de los aprendizajes que nos dejó acerca de sus dos libros: Una vida sin desperdicios y Logística Lean en Centros de Distribución.

En la primera parte nos explica cómo a través de un sistema organizado de inventario, llamado Kanban, podemos optimizar el consumo que tenemos de nuestros alimentos. Para poder aplicar debemos realizar lo siguiente:

1. Planear: calcular el número de personas en la casa y definir la demanda de alimentos o insumos que se necesitan.
2. Hacer: determinar un plan de compras variable donde estimas el inventario que deseas tener y que satisfaga a tu familia. Por ejemplo, para 2 personas se necesitarían 4 cajas de leche mensual de 500 ml, lo que implica que si al finalizar el mes aún mantienes dos unidades solo compras el excedente que necesitas. El desperdicio que generamos se basa en que “compramos de más”.
3. Adaptar: El plan lo puedes ir ajustando, dependiendo de la necesidad que tengas. Si tu familia crece, si cambias de hábitos, todo es temporal, por lo que tu Kanban es ajustable a tu necesidad.

Otra de las prácticas que nos comparte Alexandre es acerca de la compra de ropa; nos habla sobre cómo mantiene una regla en su casa donde al momento de adquirir una nueva camiseta para sus hijos ellos mismos deben donar una. Esto mismo aplica para los juguetes y demás cosas que solemos acumular. Ahora imaginemos nuevamente si aplicáramos este pensamiento a nivel global, seguro el nivel de hambruna y de inequidad disminuiría y viviríamos de una manera consciente sin impactar negativamente a nuestro ambiente.

En la segunda parte de nuestra conversación pasamos a un componente más empresarial, donde esta misma metodología ha sido utilizada por empresas como Toyota, desde 1950, para asegurar un crecimiento sostenible.

LEAN tiene su origen en el TPS (Toyota Production System) o sistema de producción de Toyota, donde busca aumentar la productividad a través de las 3MU: Muda, Mura y Muri. Estas tres palabras japonesas significan desperdicios, variabilidad y sobrecarga. Y para implementar Lean debemos asegurar un contexto que debe ser dirigido por el cliente o la persona a la cual se le entrega valor. En otras palabras, es ir al GEMBA, una palabra japonesa que invita ir al lugar en donde pasan las cosas.

El primer principio de aplicar Logística Lean es entender la necesidad de mi consumidor, y partiendo de ahí definir un tiempo de ciclo de tal manera que la empresa pueda abastecerlo y cumplir con la satisfacción del cliente. Si volviéramos al ejemplo de la familia y su sistema Kanban para el mercado, este sería el insumo de un solo cliente, para entender toda la demanda consolidaríamos las compras que reciben todos los supermercados de una zona.

El segundo principio es entender que esa demanda debe ser atendida a un ritmo y con un proceso, por lo que en un centro de distribución existen diferentes procesos como recepción, inventario, alistamiento, empaque y despacho. Cada uno debe tener un flujo de tal manera que balanceas tus recursos de máquinas y horas humanas dedicadas.

El tercer principio es estandarizar el proceso para luego encontrar problemas y hacernos cargo en el día a día de una operación. Estos principios provocan que los desperdicios disminuyan, la variabilidad se controle y la sobrecarga se elimine. Alexandre cierra nuestro espacio de Antídoto Talks invitando a las personas a que vivan Lean en su mundo laboral y personal.

Tres consejos finales: Ir al gemba, entender el ritmo y hacer que fluya tu vida personal y laboral.

Si deseas ver la conferencia completa puedes dar verla aquí: