El concepto de trabajo decente tiene su eje central en la dignidad humana, pues es en este donde se ve el conjunto de los derechos humanos y la buena praxis organizacional. Un entorno laboral donde se respeta la dignidad es un lugar donde la igualdad, el respeto y el desarrollo personal son promovidos de una manera casi autónoma, dado el ambiente que este mismo crea, lo que a su vez mejora la productividad y la sostenibilidad organizacional de la empresa.

La libertad sindical, si la tomamos desde un aspecto de la psicología organizacional, es crucial para el bienestar psicológico de los empleados, pues esta es la que proporciona un  espacio para que se pueda expresar colectivamente sus inquietudes y necesidades, haciendo que su compromiso y satisfacción en el trabajo crezca de manera conjunta.

Esta participación fortalece el sentimiento necesario que debe tener el empleado de ser valorado y escuchado dentro de la organización, logrando que así el ambiente de trabajo se transforme y sea más sano y motivador. Un ambiente laboral seguro y saludable es el lugar en donde se va más allá de la prevención de accidentes físicos, dado que se da también el espacio y la prioridad para la salud mental de los trabajadores.

Al reducir la ansiedad y el estrés que son un afectante actual en las empresas, un entorno de trabajo seguro contribuye de manera significativa al bienestar psicológico de los involucrados. Cuando las organizaciones implementan efectivamente políticas de salud ocupacional, crean un clima donde los empleados perciben un compromiso genuino con su cuidado y respeto, promoviendo así su bienestar integral.

Este enfoque holístico, al reconocer y abordar las necesidades psicológicas y emocionales, se convierte en un pilar para el desarrollo de un sentido de pertenencia y lealtad  hacia la empresa, fomentando una mayor motivación y compromiso a largo plazo. Cultivar un entorno que prioriza la seguridad mental y física es una inversión en la salud organizacional y en la productividad sostenida, demostrando cómo el bienestar del empleado y el éxito de la empresa están intrínsecamente conectados.

La Figura 8 y Figura 9 del documento muestran cómo la Corte Suprema de Justicia ha emitido sentencias relativas al trabajo seguro y la salud y bienestar en el trabajo. Estos datos refuerzan la idea de que el entorno laboral en Colombia está evolucionando hacia una  mayor seguridad y protección para los trabajadores, lo cual es esencial para fomentar la motivación y el compromiso.

La cultura organizacional es fundamental en la promoción del trabajo decente,  actuando como el eje sobre el cual gira la experiencia laboral del empleado. Una cultura que  enfatiza la transparencia, justicia y respeto mutuo crea un ambiente que no solo es atractivo para el talento actual y potencial, sino que también incentiva la lealtad y reduce la rotación de personal.

En un entorno donde se valoran estos principios, los empleados se sienten más comprometidos y conectados con la misión de la empresa, lo que los motiva a contribuir de manera significativa y efectiva. Estas organizaciones se convierten en lugares donde la innovación, la colaboración y el crecimiento personal no son solo posibles, sino que son alentados, permitiendo que todos los miembros avancen hacia objetivos comunes en un clima de apoyo mutuo y reconocimiento.

Los datos mostrados en la Figura 1 y Figura 2 ilustran las variaciones en la tasa de formalidad laboral entre 2020 y 2021, destacando la importancia de políticas que promuevan la formalización del empleo y un entorno de trabajo seguro.

Colombia ha logrado progresos en la promoción del trabajo decente, pero aún se enfrenta a desafíos significativos como la alta tasa de informalidad laboral y las notables diferencias en las condiciones de trabajo entre sectores. Estos desafíos brindan una oportunidad valiosa para que las empresas y organizaciones revisiten y mejoren sus prácticas laborales. Adoptar un enfoque más humano y fundamentado en la psicología organizacional  puede ser la clave para abordar estas problemáticas, mejorando así tanto el bienestar de los empleados como la eficiencia organizacional.

Las estadísticas presentadas en el documento, como la tasa de desempleo y la tasa de trabajo infantil (Figura 5), subrayan la necesidad de mejorar las condiciones laborales y avanzar hacia el trabajo decente.

Las empresas pueden adoptar una gama de estrategias basadas en la psicología organizacional para fomentar un entorno laboral más saludable y justo. Implementar programas de bienestar para empleados, promover una comunicación transparente y ofrecer capacitación en habilidades de inteligencia emocional, son algunas de las tácticas que pueden mejorar significativamente la calidad del ambiente laboral. Estas no solo benefician el bienestar de los trabajadores, sino que también contribuyen a mejorar la productividad y el rendimiento general de la organización.

Comprometerse con el trabajo decente significa comprometerse con el futuro sostenible y equitativo de Colombia. Integrar los principios de la psicología organizacional en las prácticas empresariales puede conducir a la creación de entornos laborales que no solo cumplan con los estándares de trabajo decente, sino que también fomenten activamente la salud mental y el bienestar general de los empleados. Este enfoque holístico no solo beneficia

a los individuos, sino que también contribuye al desarrollo sostenible y equitativo del país, asegurando un futuro mejor para todos.

 

Por:

Juan Pablo Suica

Estudiante

Programa de psicología

Centro de Pensamiento de Talento Humano y Organizaciones Saludables

Politécnico Grancolombiano

Correo: jsuica@poligran.edu.co

 

Referencias:

https://revistas.unilibre.edu.co/index.php/saber/article/view/10008