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No debemos tragar entero, ni dejarnos llevar por ese reality mediático de Santos, al que muchos medios de comunicación le han seguido el juego.

De entrada debemos decir que todo lo pactado en La Habana es ilegal, porque ha sido a espaldas del pueblo, con delincuentes narcoterroristas al margen de la ley.

El anuncio de ayer de imposición de penas “restrictivas de la libertad”, hasta por ocho años, para los principales líderes de las FARC, responsables de delitos graves, es sencillamente IMPUNIDAD.

Ese ´sapo´ que los colombianos debemos tragar, de dizque pena “restrictiva de la libertad” para esos criminales de las FARC, será desarrollado dizque por una ley, y dizque aplicado por un tribunal especial, que también será creado para juzgar tanto a los excombatientes de la guerrilla como a los miembros de la Fuerza Pública y a otros actores responsables de delitos cometidos a propósito del conflicto armado. Todo eso no es otra cosa que dilatar, delegar y posiblemente absolver a esos criminales guerrilleros, además de ponerlos al nivel de nuestros soldados, quienes si tienen la obligación constitucional de defendernos de esos terroristas.

Aterran también las declaraciones del fiscal Montealegre: «Si quisiéramos una cifra de los delitos indultados o amnistiados, excluyendo lo de la Corte Penal Internacional, podrían ser amnistiados más de 15 mil miembros de las FARC por delitos conexos con el delito político». Esa justicia transicional orquestada por el fiscal Montealegre es IMPUNIDAD.

En cuanto a la dejación de las armas de las FARC, que según Santos, ocurrirá 60 días después de la firma del fin del conflicto, es absurdo que no las entreguen antes de la firma o el mismo día, ¿quién va a vigilar que las entreguen todas a punto y a tiempo y que no le metan un gol a los colombianos?, ¿y cuándo van a entregar las rutas de coca y toda la coca que tienen?, ¿y quién garantiza que dejen todas sus actividades criminales? Todos esos anuncios son globos, cortinas de humo, acuerdos ilegales, todo, absolutamente todo, revestido e impregnado de IMPUNIDAD.

Como dijo el expresidente Álvaro Uribe, ´´ese ´acuerdo histórico´ de ayer iguala a la sociedad con el terrorismo´´.

A espaldas de la sociedad colombiana, los delegados de Santos han negociado, durante tres años, con delincuentes criminales al margen de la ley, la agenda del país, en temas como “Desarrollo agrario integral”, “solución al problema de las drogas ilícitas” y “participación política”, y ahora, ese pacto de ´penas restrictivas de la libertad´. Nada de eso es legal porque los colombianos no hemos participado de eso, además, porque el presente y futuro del país no se debe discutir con quienes han desangrado a Colombia por más de 50 años.

No debemos sacar el carro de bomberos, ni dejarnos emocionar por los temas de los Beatles y Lennon acerca de la paz con los que las emisoras al servicio de Santos musicalizan la información acerca de ese dizque ´Acuerdo Histórico’. Tampoco debemos tragar entero todo lo que Santos dice y algunos medios le celebran. Todo lo de La Habana tiene tinte de IMPUNIDAD, todo es ilegal, todo se ha hecho a espaldas de los colombianos. ¿Quién ha pensado por un segundo lo que sienten las víctimas al ver a sus victimarios haciendo política?, (aunque si se quiere todos los colombianos hemos sido víctimas de esos narcoterroristas). ¿Qué pensará Fabito, mi amigo del barrio, a quién esa criminal guerrilla lo secuestró tres veces y luego lo obligó a que dejara de salir en un mensaje institucional de ´País Libre´ o sino lo volvían a secuestrar?

Esa narco guerrilla de las FARC haciendo política es IMPUNIDAD. Van al Congreso o a cargos de elección popular con sus manos bañadas de sangre luego de asesinar millares de colombianos.

Ese proceso de paz y ese dizque ´Acuerdo Histórico´ va a tener un costo muy grande para los colombianos a quienes nos han puesto al nivel de esos narcoterroristas.

Supuestamente en seis meses se firma la paz, pero la paz no es esa firma señor Santos, la paz es justicia, empleo, oportunidades, salud, equidad, estudio, seguridad, entre otras cosas. La paz no es indultar y amnistiar a esos narcoterroristas de las FARC, la paz es inversión social, acabar la corrupción, la mermelada y el clientelismo. La paz es acabar con su gobierno Neoliberal señor presidente.

Todo este show mediático que han montado Santos y los medios de comunicación a su servicio ha logrado su objetivo, desinformar a un gran sector de la sociedad colombiana para ´refrendar´ un proceso de paz plagado de IMPUNIDAD. Ojo, no nos dejemos engañar, todo es un andamiaje orquestado por la ´Unidad Nacional´ y sus medios de comunicación amigos para que Santos logre el Nobel y luego se desentienda en el postconflicto e incumpla todas sus promesas, como lo hace siempre.

giovanniagudelomancera

periodista

Tarjeta Profesional #8356 Expedida por el Ministerio de Educación Nacional

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