Méderi Hospital Universitario Mayor cumple 9 años de persistir en la operación de una verdadera institución de salud humanizada.
¿Cuántas de ellas son mayores de 35 años, y han resuelto en la clínica, desde 1962, o en el hospital, a partir de 2008, una adversidad de la salud, atendidas en alguno de los 8 pisos habilitados para pacientes o en las “Urgencias” de este edificio anclado en 40.000 metros de área construida que es un ícono de la urbe capital de Colombia?
El conductor que me lleva a la cita con Orlando Jaramillo Jaramillo, el Presidente de Méderi, no encuentra al hospital en Waze. Le menciono la Clínica San Pedro Claver, y a este punto de la calle 24 con carrera 29 llegamos serpenteando por los meandros del Barrio Samper Mendoza.
El trajín es el mismo de toda la vida. Hay cúmulos de gente en la entrada a la plataforma de ingreso al hospital, en las Urgencias, en las aceras de acceso que son como hormigueros desde el puente peatonal que le cae a la estructura como un avispón.
Méderi: curar
He venido fascinado por el libro “De la oruga a la mariposa”, con el que la Corporación Hospitalaria Juan Ciudad (producto de la unión de la Orden Hospitalaria San Juan de Dios, Compensar y la Universidad del Rosario) ha celebrado el alentador suceso de esta casi década de trabajo en el sistema de salud colombiano.
Es una joya bibliográfica concebida como la práctica actual en el hospital: con testimonios, con la voz de la gente, con la amabilidad de quien abriga al enfermo en el pacto de hospitalidad de estas manos cruzadas y simbólicas. Méderi, la palabra latina con una tilde asistencial para pronunciarla más fácilmente, sin alterar su comprometido significado de “Curar”.
Recorremos con Orlando este edificio, inaugurado como clínica el 14 de julio de 1962 con 120 camas, diseñado y construido por Cuellar Serrano Gómez. La demandada central de Urgencias de la Clínica San Pedro Claver se dio al servicio 16 años después con otras 120 camas.
Jaramillo anda despacio. Al comenzar abril y estando en Cartagena, se rompió el tendón rotuliano. Vino a operarse al hospital y su recuperación es sorprendente. Fue su forma de practicar lo que predica a sus colaboradores: la confianza. Y él la tiene en Méderi.
Recibió la clínica con 802 pacientes en cama y 2700 personas, entre empleados y profesionales. El 50% de los pacientes que se atienden hoy en el hospital son mayores de 60 años. Es la herencia humana del Seguro Social. Para atenderlos con lo que lo obsesiona, la humanización de la salud, ha luchado por implementar una cultura para la gente.
Visitamos los pisos remodelados 7, 6 y 5. Urgencias tiene 118 camas de observación y la UCI, 120. Se atienden 12.000 urgencias mensuales. En las habitaciones, los huéspedes pueden elegir cuatro opciones de un menú. El hospital recibe 100.000 visitantes al mes.
Méderi es otro planeta en el universo de la salud.
Gracias a la vida
Al salir, el doctor Jaramillo me muestra el panel que sobrevive empotrado en la pared con los nombres de más de 200 médicos, que activaban su suiche individual para reportar su ingreso a la Clínica San Pedro Claver.
Es como una placa viva.
Busco a quien me auxilió el 7 de agosto de 1975, cuando me trajeron herido de gravedad después de un accidente de tránsito.
Tenía 18 años, y entonces agradecí como lo hago ahora al doctor Luis Rodríguez Clavijo, a las enfermeras y al personal que sostuvo a mi familia en esa prueba y que tres meses después me retornó al milagro de la vida.
Soy una voz como las de millones de personas que hoy pasan frente al edificio de Méderi Hospital Universitario Mayor: abrigamos en el corazón el recuerdo de la curación y el don inigualable de la gratitud.
El libro “De la oruga a la mariposa” se puede leer en http://www.mederi.com.co/images/pdf/delaoruga.pdf
Artículo publicado originalmente en Portafolio 27.06.2017
www.carlosgustavoalvarez.com
En medio de tantos problemas que sufre el sistema de salud en Colombia es un oasis encontrar un sitio que funciona tambien como este. Ojala siga asi y sea un ejemplo para otros, en los que el paciente no es un ser humano sino un numero y como tal lo tratan. Aunque de todas formas, lo mejor de lo mejor es no enfermarse.
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